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ABC MADRID 01-07-1944 página 3
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ABC MADRID 01-07-1944 página 3

  • EdiciónABC, MADRID
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DIARIO ILUSTRADO DE INFORMACIÓN GENERAL. 25 CÉNTIMOS S HOGUERAS DE S A N I U AN lio. No nos hemos escandalizado. ante, la oscuridad de sus dogmas. Nos hemos escandalizado ante la Inmensidad de su candad, de su universalismo. En época precursora estamos y seguimos. No queremos entender toda la enorme transformación de catolicidad, de universalidad, que, como última flor, del Evangelio, es necesaria. Nos resistimos a eso de que no haya griego, ni judío, ni bárbaro, ni tscita y a que el samaritano sea nuestro prójimo. Seguimos hablando de derecho internacional de soberanías nacionales que es coiilo seguir hablando de la Vieja Ley. Por eso las hoguei as del San Juan de este añOj ante tanto como queda por quemar y tanto como queda por alumbrar, han debido arder con una rabiosa desesperación. DIARIO. ILUSTRADO DE INFORMACIÓN GENERAL. 25 CÉNTIMOS ü ofrecer un aspecto muy diferente, y miembro que soy de la clase periodística, yo no me explico aún cómo una simple paloma ha podido pisarle a la radio la noticia de ¡a invasión. Es cierto que todas las radios estaban controladas por las autoridades militares, pero también es de suponer que las palomas mensajeras fuesen objeto, en aquel día, de una vigilancia especial y, sin embargo, nuestra heroína logró llegar oportunamente con su despacho al puerto de destino. Esperemos que, a más de darla como homenaje una ración extraordinaria de grano o de miga de pan, la Agencia Reuter se apresure a subirle el sueldo. NA vez más se han encendido las hogueras de San Juan. ¿Por qué a San Juan, el Precursor, se le celebra con este rito popular de la hoguera? ¿Será porque la hoguera quema... e ilumina? Porque el Precursor venía a eso: a quemar un pasado, a iluminar un porvenir. Por eso, tal vez, este año, las hogueras hayan tenido un sentido más profurtdo. Allá en Alicante, frente al Mediterráneo, frente al mar de Roma, sede de la catolicidad; frente al mar del Apóstol que dijo ya no hay JULIO. CAMBA griego, ni judío, ni bárbaro, ni escita las hogueras tienen que haber ardido, e ste año, i i; N labiosamentej al ver a Roma en peligro y al ver al judío, y el griego, y el escita. más JOSÉ MARÍA P E M A N afirmados que nunca en sus posiciones hosíDe la Real Academia Española. tiles y separatistas: al ver, en una palabra, que había que seguir quemando lo mismo e N todas las grandes ciudades deberían UN TKIUNFO PERIODÍSTICO iluminando lo mismo que hace veinte siglos. celebrarse frecuentemente ferias dé No es de extrañar. Tan enorme era, tan libros o de flores para que los ciurevolucionaria. la novedad que venía a alum- dadanos no se olvidasen de pasear. Porque brar el Precursor, que, aun en los Sagrados la gente de la gran ciudad, más que pasear, Libros, la vemos despegarse trabajosamente, pasa. Los transeúntes llegan a perder el ritcon miedo, del pasado tradicional, cuya comUENTAN los radioescuchas que Bob mo del paseo, y sólo saben caminar de prisa, bustión es tan lenta y difícil, como vaciHope estaba en su emisora haciendo como si en realidad fuesen huyendo siemlante y trabajosa es la iluminación del porun chiste de ¡mil dólares y que Frank pre de su sombra. Idas y venidas de la graií venir. En el altar, en el instante de Ja obla- Sinatra se encontraba en la suya cantando ciudad, con ese vértigo que nos hace un ción del incienso, es decir, en pleno rito de una romanza de tres mil- -el uno por cuenta poco muñecos a lo. largo de las aceras y a. la Ley Antigua, se aparece el Ángel para de una célebre pasta dentífrica, y el otro través de los pasos para peatones de la anunciar al Precursor, con palabras llenas para anunciar un: famosa jabón- -cuando de alusiones escriturarias. Cuando, luego, se hizo un gran silencio, seguido de una voz calzada. Es verdad que el tiempo empuja, pero tal vez somos nosotros, muchas veces, Zacarías le tiene en los brazos, su himno de que decía: f los que empujamos al tiempo sin un objetivo salutación se dirigirá al Salvador de la- ¡Atención! Numerosas fuerzas anglo- determinado. Hay que tomar el tranvía en casa. de David americanas, provistas del material más mo- marcha, hay que pescar el taxi al vuelo, hay Realmente la primera iluminación de lo derno, han desembarcado esta madrugada en que penetrar en aquella tienda ahora mis? nuevo, decidida y audaz, es aquella llama- 5 a costa francesa. La invasión ha comenza- mo, hay que arrebatar de las ma. ios del venrada profética, que se enciende, de pronto, do y el segundo frente es ya un. hecho real. dedor el periódico que acaba de salir... Y todo en la boca d María cuando siente brincar Dentro. de breves instantes daremos lectura ello sin concedernos esos plazos prudenciales al Hijo en sus entrañas. El Magníficat es a un comunicado del general Eisenhower que la buena fe establece para los negocios ya el primer himno de la Nueva Ley. María, sobre la marcha de las nuevas operaciones. jurídicos. La masa nos arrolla, nos arrastra, Y así fue cómo llegaron a América las y es difícil mantener un paso lento en medio como arrebatada, canta ya al Poderoso que exaltará a. los humildes y derribará a los po- primeras noticias del desembarco aliado en de las aglomeraciones de la gran ciudad. Acatentados; que llenará de bienes a los ham- las playas normandas. so no tenemos prisa, ni nos dirigimos a un brientos y despedirá vacíos a. l o a riEvidentemente la radio es una gran cosa, lugar determinado, pero nos dejamos llevar cos. Hasta entonces ha sido el Mesías pero si una paloma de la Agencia Reuter no por la corriente y terminamos por ser los. temporal, el nacionalismo, el racismo. El hubiera- atravesado el Canal de la Mancha primeros en alcanzar la boca del metro, para Magníficat es ya la revolución universalis- en la madrugada del 6 de junio, llevando mirar por encima del hombro a los com- ta; es decir, el Evangelio católico. H a termi- debajo de un ala un: mensaje cifrado, el pañeros, así como diciendo: T e he vennado la combustión del pasado, y empieza mundo no se hubiera enterado de la inva- cido. la iluminación del futuro. sión hasta dos o tres horas más tarde. Fue Pasear es medir la gracia del aire paso Y desde entonces, todo es una lucha ie una paloma mensajera, en efecto, la primera portadora de la sensacional noticia y, yo a paso, dándonos cuenta de la belleza cirios rescoldos mal apagados de lo viejo, frente, a los celajes mal iluminados de la in- no sé con qué se suele alimentar a las palo- cundante, sin sentir el agobio de una hora finita novedad. Desde entonces el Evangelio mas mensajeras, pero, sea con lo que sea y que nos amenaza en la pulsera del reloj. Los tendrá enfrente una sorda y correosa resis- aunque se trate de una sustancia sobre la visitantes de las Ferias se han transfortencia de interpretaciones materiales y co que se hayan impuesto las mayores restric- mado un poco en paseantes de provincia. rninerías nacionalistas. No se querrá que el ciones, opino que aquella valiente paloma se Ellos nos han recordado la plaza Mayor, de ¡Mesías deje de. str el gran vencedor tempo- ha ganado sobradamente una ración extraor- Salamanca; la calle de Dato, en Vitoria; la dinaria. acera de San Francisco, en Valladolid. El ral; no se querrá que el pueblo elegido ceda su puesto de elección. Cuando Jesús En la antigüedad, parece que los griegos paseante pasa para volver a pasar, a la mahable de su cielo futuro, a quella mujer le ya se servían de palomas para transmitir a nera de ese cómico que hace como que se preguntará si sus hijos no podrán tener a las ciudades del interior los nombres de va, pero vuelve. ¡Qué placidez brotó estos sus lados, reservadas, como dos buenas lo- aquellos atletas que eran proclamados ven- días pasados en la Feria del Libro y en la calidades de teatro, un par de sillas! Cuando cedores en los campeonatos olímpicos, pero, Feria de ías Flores I ¿No es verdad que la paz predique el perdón, el mismo Pedro le pre- entonces, bajo el cielo de Grecia, no había nos la figuramos así, sin prisas ni agobios, guntará si bastará con perdonar siete veces. aeroplanos, proyectiles de doble propulsión que tanto nos ayudan a envejecer? Ásorín Quiere un perdón tasado y racionado eco- ni ondas dirigidas o condicionadas, y las in- nos recordaba hace unos días el precioso lema nómicamente. Y luego será aquella resisten- trépidas aves estaban allí completamente Ii- ¿festinatiente. Y Goethe nos dirá: Como el cia a entender que el Evangelio ha sido pre- brcs de toda rivalidad y de toda, competen- ásifo, sin precipitación y sin descanso. Que dicado también para los incircuncisos gen- ciá. Todavía en la guerra fránco- prusja. ria ¡í tiles. Y aquella desesperación de San Pablo del yo, los únicos enemigos de las palomas el descanso no es siempre inactividad, sino porque en Jeru? alén achicaban la gran em- mensajeras eran los halcones que el Ejérci- actividad deleitosa, como ese pasear entre la presa, y daban, en la nueva Iglesia, demasia- to alemán adiestraba para perseguirlas, pero, guardia, de, los libros v Jas flores que hace das preeminencias a los parientes de ...Je- sobre el. Canal de la Mancha y t n la ma- j; poco tuvo lugar en Madrid. sús; Este ha sido el escándalo del Evange- -dragada del 6 de juniorlas cosas debían de -í FJRANCÍSCP. JAVIER MARTIN ABRIL LA PALOMA DE LA REUTER E E L EN CANTO DE PASEAR C

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