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ABC MADRID 23-03-1943 página 7
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ABC MADRID 23-03-1943 página 7

  • EdiciónABC, MADRID
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A B C M A R T E S 23 BE MARZO BE 1943. EDICIÓN DE 1 JA MAÑANA PAG. i. te- L- FUHRER PÍDELA UNION EUROPEA CONTRA EL BOLCHEVISMO, INSTRUMENTO DIABÓLICO DE DESTRUCCIÓN ¡Otra hazaña de Ja División Azul, al Sudeste de San Petersburgo. Los rusos rechazados en Viasma. Ofensiva alemana en el segtor de Kursk. En Túnez as tropas dd Eje se defienden contra Ja superioridad numérica de sus adversarios. Churchill dice que Ja guerra será Jarga Dice el Führer en su magnífico discurso gue rcalmante no habla, del peligro comunista ¡al pueblo alemán, porque éste no necesita I aliento para seguir luchando. Sus palabras f se dirigen a los enemigos del Reich para ver si llegan a darse cuenta de la amenaza que, i a pesar de los recientes triunfos- de Alemania, i sigue pesando sobre todo el mundo civilizando. Los que hayan leído el libro- programa del Führer, saben que siempre preconizaba el acuerdo con la Gran Bretaña, con la esperan sa de conseguir mano libre contra Rusia. Si i el temor a los Estados Totalitarios, el perjui ¡cio de la paz indivisible y de la seguridad colectiva no hubiese paralizado una acción en ese sentido, el problema demográfico de Ale! inania hubiera podido encontrar solución a costa de la U. R. S S. Dice Mi lucha que Alemania ha, de acabar con el empuje hacia el Oeste y el Sur y concentrar todas sus fuer sas contra el Este, pues ha de encontrar co Lonias en el mismo Continente, en vez de buscarlas más allá de los océanos. Basándose en el libro de Hitler, hubiera sido posible un acuerdo, sin llegar a fa guerra. Porque para el Tercer Reich- el enemigo número uno es ¡la Rusia bolchevique, contra la cual quiere unir todas las fuerzas europeas. El discurso del caudillo del pueblo alemán Vwo deja de tener gran importancia, a pesar ¿e, su brevedad castrense. A B C EN BERLÍN cisiete mil tioneladUs en los dos primeros terejoe ule- i mes- toi eji cabe hablar ide u ¡na píeíii siva, en gran escala que el almirante Doenití ha pasad realizar- tan pronto ¡la estación se ha presentad orno favorable. Es preciso tener en cuenta que todavía no se puede considerar oorno alcanzaidia la mejor época para operar para prlevein tos resultado a que en esta primavera y verano llegará esta airma tan temible die la MJarina, ailemana desde que su jefe- ha asumido ¡e l mainido supremo de iia Flotia- Por innecesario huelga volver a recordar al lector. Ja raicionalización a que Alema, niía ha sometido 3 a coinstoucoión de eubmari nos que, en realidad, síe fabardcao en sierie en los grandes centras industriadles de montánd- olos luego en los astilleros del Báltico y del mar del Norte, para sólo hacler re- Iaolóin a los que han de operar en el At- láin Jco. El pirogres o logrado par Alemania en lo qu a Va d g uerra éa CiSta materia de fia, construcción de sumergibles es tal, que hace pocos días ha podido volver a BU base del Atlántico una unidad después de haber cubierto 21.600 millas de recorrido eti 135 sin- gladuras en la ruta del cabo de Buema, Esperanza. Se trata üambién de un. record ya que h astíai ahora ningún submarino hiabía permainecido aleja Jo de su tese más de cuatro m eses. Mas también se trata de un submarino- -el del famoso teniente ¿e navio HeJmuth Watte- -íjue cuenta, asimismo, con ía mlayor cifra de hundimiemíos en um solfo viaje, esto es, con las 73.678 toneladas de arqueo de tos 12 buques Que en pocos días hundió a, nte las mismas costas de los Estados Unidas. Ein la ocasión presemte, y remontando el cabo de Búlenla Esperanza, ha logrado una hlazaffia que mo le Mai muy en z a. ga ya que al recabar en, su ba e el mástil do su bote se adornaba con. la 11 grímpolas de los oorresipondiíe ntes buques que, oon más de setenta mi l toneladas de despJlaKamiento, píegonabain urna hazaña casi sin par en un crucero submarino. Hemcs traído a colación este ejemplo, porque en Has circunstancias presentes en que todios los síntomas habíala de un recrudecimiento de i a guerra submarina, nos parece adíecua. do para, sin muchas palabras, hacer una referencia coimoreta. alespíritu de Dais tripulacioneis de los submarinos alemanes y a i extraordinaria, calidad de las unidadles que manejan. Que Alemania, pese a todas las conferencias que se organicen para poner remedio a tajita catástnofe en el Atlántifo, seguirá imptertuirtebile en la senda emprendidta, es ailg- o que no pracisa ser subr yad- o, máxime cuando con. ie: l cada vez mayor desplazamiento de los Norteamérica- nos a Europa y con la dispieirsión por todo el planeta de los diversos telaitros de la guerra, este especie de guenfla navá. 1 representa el tendón de Aquiles de íes. aliados. Y Alemania tiene ya suficientes pruebas de do que sos submarinos han paralizado o entorpecido las operiaeiones en tierra, piara que no sea de esperar urna cada vez mayor intensificación de esta guerra, sobre todo aho ¡ra que va a oomejnzar la primavera. -Ernesto DEL (Prohibida la reproducción, E! tendón de Aquiles Berlín 20, 10 noche. (Crónica telegráfica- de nuestro redactor- eonrespomeal, ¡recibida eoiti retraso. Pese a Jos gran Se! S éxitos a que nos tienen acostumbrados Jos submarinos, el par! te oficial que anunciaba una grain, lucKa ¡n i, él Atlántico suponía ai ig desudado, ya que, por Mientras las tropas de yon Arnim avanzan tregua general no- suele interrumpir su nxu- sus posiciones en la región septentrional de i tismo ei gran almirante Doeditz más que para Túnez, dominando la carretera que enlaza Tadar b ríe ves noticias de híuzañas y a consum acon Beja, i das. La realidad ha venidlo justificar con barca ofensiva en los anglosajones han ypasado los central cirecea el Interés aue semejante anuncio ha- a la de la Regencia, sectores que operan merien los com; Ma, despertado en todo el mundo, ya que en dional ila víspera del comienzo oficial de, la, p, r ¿rna- binadamente formando tres grandes agrupa 1 j vena puede el comunicado habla del miayor ciones de fuerzas: una, constituida por el océxito submarino que hasta ahora ss haya lio- tavo Ejército británico, que trata de vencer grado desde el principio de la guera- a en el la resistencia de la zona fortificada de Ma ¡ataque a, un convoy. Cuando se tiene en cuen- reth- Matmata; otra, del que es núcleo esen ¡lüa Jo muoho que han progries. ado los métodos cial la primera división acorazada norteamedefensivos contra el peligro submarino, soregión Gafsa- -El mbre totío en la roítla, vital que denlos Esta- ricana, que ha partido de la direcciones, se mueve en dos dios Umiidoa va a la Gran Bretaña, y la ma- Gnetar y y Gabes, respectivamente, y lahacia 1 teryor velocidad de los buques designados paira Maknasy cera, en fin, de la cual se conocían las con esfca difícil optación de navegar en conser- centraciones en las comarcas de Sbeitla y Pi: va gozando de una aimplia proteccción a car- chón, que apunta, sin duda, a la conquista del go de numerosas unidades de la Marina de Guerra, es cucando realmente se puedia va, k -paso de Fáid, camino de Sfax. Es decir, se ¡rizar una acción coima esta, en la que no vuelve a la maniobra que fracasó hace dos sejnenog que 32 barcos, can más de doscientas manas, si bien ahora el movimiento de las comil- tarae- ladias da arqueo, han sido lanzados lumnas terrestres viene siendo precedido por fondo del mar. Cabe hablar ante esto proe- una acción aérea mucho más potente que en za- -que sube do punto si se tiene en cuerata ocasiones precedentes. i que h a sido realizada en piena lucha, durán- Sin perjuicio de que el general Kommel se ite varios días y comenzada casi a ra, íz de defienda en la faja costera centro- meridional, despegarse ei convoy de Ka costas norteamericanas- -de la más coimcluyente consagración sin arriesgar con exceso el grueso de sus tro da la táctica s at aque en grupo de los sub- pas, es posible que intensifique los ataques en 1 manimos, que no. poco án contribuido a. Ite- el sector Norte con el fin de obtener ventajas r a r a su autor, el almirante Dbenitz, al miam- territoriales que le permitan dominar el siste ¡ido supremo de la Marina de Guerra del Reich. ma de comunicaciones, que enlaza Argelia con Bn otras ocasiones ha sido logrado algún la región central de Túnez. Para ello, las van ¡resultado en ioa ataque a, loí convoyes que guardias ítalo- alemanas deberían avanzar has puedo ser comparadlo al que hoy se a a ¡la ta las inmediaciones de Zoco el Arba y El i publicidad, como, por ejemplo, en alguno Kef. Si esto llega a ocurrir, la ofensiva de los de los éxitos logrados en la. ruta de Mursobre la costa, que afecta por xnansk, más n ¡unea se había logrado, como norteamericanos Sidi Buzid- El Guetar, nó será al- frente en la, ocasión priesemite, qué la acción, triaitán- ahora profunda en virtud Se la amenaza que i ¿ose de tan alto tonelaje, se hubiese debido muy exclusivamente a jos sumerg- íblegi y sí, por puede dibujarse sobre el flanco izquierdo y re: Jo general, a la acción combinada de éstos taguardia del quinto Ejército. -V. y de la Aviación, Por esto cabe habJiair. como queda apuntado, de Ja, mayor y más brillainte prueba a que hasta ahora ñajna sido sometida la nueva táctica del ataque en gru 3 O por parte ü ¿los submarinos contra, un convoy. Y puesto que ém lo que va de mes és esta, la sexta vez en que se da un parte extraordinario de esta índole- -en totia. m J uque hundidos con más de setecientas dlef 1 Discurso del Führer en la conmemoración de los Héroes Hitkr preside los actos y es aclamado por el pueblo Berlín 21. La cioinmemoración de la Jorniada d los Héroes dej pueblo alemán en Berlín se oeíebróV a la una de la tarde, en el larsenai miilitar. El patio de homor estaba aid ornaidlo con sencillez oaptrense, ostentando su firlemte una gigantesca Cruz de Hierro fla nquelaid a par los colares del Reich, y miume: ríoeos jefes día toidlas las Armáis, asistienon al acto, asi como 309 heridos de guerra, los ministros del Reieh, seciretarilos s Estado, reichsleiters y gtaiuleiters y jefes Varios de la AdministraiciOn del Estado y de; Partido Nacionalsocialistia. El Fühure. r fue saludado en silencio al Il- egiar, sieguido por el miairiseal Reich HerJ 1 mann G ierin! g, el feldlmla r. isoal Keitel, el g- ran almirante Doenitz, rei. chsführer de las 1 S. S. Himmaer, los feMmairisoaJes Milch y Von Bock y el jefe d; a las Víctima s de la G- uerra, Oberlindobler. Después de proimunciar su discurso, el Fühn r, acpmp Badq P. op su (séctuito, yisit 6 m

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