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ABC MADRID 26-12-1942 página 3
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ABC MADRID 26-12-1942 página 3

  • EdiciónABC, MADRID
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DIARIO ILUSTRAIX O IN FORM AC l O N G El ÑERA 25 p F N T JA DIARIOTLUSTRA- DO DE INFORMACIÓN- GENERAL. 25 CÉNTIMOS KECUKKDOS DE ANTAÑO ií; r ha sido el ministro más joven de 1 a Monarquía? Lo fue, indudablemente, el s ibio jurisconsulto Ü. Manuel Alonso Martínez, cumbre del foro español. Nació en Burgos el j de enero de io ¿j. Cursó el Bachilléralo en dicha capital, comenzó la carrera de Derecho en V alladolid v la terminó cu ia Universidad Central, mostrando desde el principio decidida inclinación al ejercicio de la abogacía. Aíiliado al partido progresista, presentó su candidatura para diputado a Cortes a las Constituyentes de 1854, por la circunscripción de Burgos, en unión de D. Cirilo Alvarez, eminente abogado, que había sido su maestro, y de D. Martín de los Uleros, que ya era personaje de mucha categoría. Reunido el Parlamento el 8 de noviembre de dicho año, cl novel diputado no tomó parte cu ningún debate cu los primeros días, hasta que en la sesión celebrada cl 4 de diciembre, es decir, al mes de jurar su cargo, obtuvo un triunfo tan resonante, que le colocó a la altura de los más prestigiosos parlamentarios. Se había reunido la Cámara en sesión secreta para buscar una fórmula que a satisfacción de todos los grupos suprimiera cl impuesto llamado de puertas E r a tarca muy difícil conseguirlo, porque había de ser. del gusto de todos. Intervinieron en la discusión los más elocuentes oradores, los más peritos en Administración y los más expertos en materias rentísticas, y ninguno tuvo la fortuna de acertar. Ya se iba a dar por fracasada la empresa, cuando pidió ia palabra Alonso Martínez y expuso en un brillante discurso mi plan tan certero, que fue aceptado por aclamación. La sorpresa de todos fue extraordinaria, No se recordaba un caso que le. igualara. Aquel joven apenas conocido había logrado lo que no consiguieron las más altas capacidades políticas de la Asamblea. A los pocos dias, cl ministro de Gracia y justicia, D. Joaquín Aguirre, le ofreció la Subsecretaría del ministerio en aquellos tiempos en los que en la vida política se ascendía muy lentamente, y tuvo cl gesto gallardo, que fue muy aplaudido, de no aceptar. Meses después, cl mismo Aguirre le brindó con un puesto en la Comisión de Códigos, en la que 110 figuraban más que ios letrados de más crédito profesional y los más ilustres catedráticos, cuya elevada distinción la recibió sin vacilar. el G ele junio de 1855, es decir, a los siete meses de ser diputado y acabados de cumplir veintiocho años de edad, fue nombrado ministro de Fomento, bajo la. presidencia de Espartero, cu la vacante que dejó D. Francisco Luxán. No se ha conocido carrera política más rápida durante la Monarquía española. N o la impulsó la intriga ni ia fomentaron turbias y reprobadas maniobras. Ascendió súbitamente, merced a una señalada victoria, y después supo mantenerse cu las alturas digna y brillantemente, sin tener un iustaufe da decadencia. Desde cl día que juró el cargo de ministro basta que talleció en 13 ele enero de 1 S 91, fue astro de primera magnitud, que fulguró en e! foro, en los Consejos de laCorona y en el Congreso de los Diputados, que presidió con la mayor autoridad y c mpericia. N. viui io Rl VAS Ve la Real, Academia de la Mistoria. EL BLOOUE IBÉRICO r K locutor insigne hablaba una vez, no! hace mucho todavía, de lo difícil que cu los años actuales resulta el cultivo ONTIXUARÉ cantando para, las madres, de! trabajo manual dentro de la casa, tomacomo en cl primer villancico, titulado do COJIJO distracción después de las tarcas Maternidad, y que se proponía conhabituales. Relataba el caso de un hombre solar a la que ya no lo es sino en memoria, que construía un barco de madera en miniahasta que la Virgen ja lleve ai cielo, y le consiga la gracia de tener eternamente a los tura. Pocos comentaba- -tienen ahora el su fici- eníe vagar para consagrarse a tan nobles hijos en cl regazo. Creo que a la difusión de A B C, que, actividades, base de la artesanía. El tiempo apremia de continuo y, aunque la presencia más que el periódico, en innumerables hoen cl hogar constituya una norma de virtud, gares parece un amigo de confianza, se todos se entregan a diferentes actividades, debe que no se malograra aquel propósito, indispensables tal vez para atraer al acervo en verdad merecedor de tanta fortuna, a familiar lo necesario en circunstancias de pesar de la modestia de su origen y a desvida difícil. pecho de su egoísmo. No, egoísmo, no. Pero entregados a la Yo me atrevo a opinar lo contrario. Tomaternidad triunfante, aunque ella se condos tienen tiempo de permanecer en el hosidere purgante, quizá olvidemos la migar propio unas cuantas, horas diarias, que litante. Y de la Iglesia tomo palabras, pues, puedan ser dedicadas bien al trabajo manual, siendo la Santa Madre ¿qué nos negaría? bien a la lectura bien a estudiar con los hiMilitan las matronas uc aun encierran jos, bien a un deleite espiritual de los que en sus brazos a Ja prole, en cuanto, privado hacen buenos a los hombres porque les temy público, todavía cl riesgo amenaza a la plan cl alma en el ejercicio de las virtudes. familia. Los padres huérfanos no temen Que cu el reloj de todos hay minutos abunperder nada, después de lo que perdieron; dantes para hacer barcos de madera, encuamas aquéllos rodeados de su progenie, a demaciones artísticas y hasta leerse en tres poco se asustan, y cualquier disminución de días La Hícida, de Hornero, cerrando las lo suyo propio se les antoja merma de ia puertas tras de sí, como dice Ronsard, lo deseguridad filial. Aparte que no es lo mismo muestra el número considerable de teatros, devolverle el hijo a Dios, que verlo traído cates, cafés, bares, dancings, cabarets, casiy llevado por el mundo; pues a lo mejor ni nos, clubs, tabernas y otros lugares de perder siquiera de la vida, en su pleno concepto, el tiempo, sin mencionar la partidita de bridse trata. ¡a, de poker o de tresillo. Quede únicamente ¡Y España, que precisamente porque se para la distracción el. buen trato social, las quedó sin unos, necesita los otros! tertulias de que puede salir una Academia o No, yo no me despreocupé de la materuna institución de cultura como el madrilenidad militante, y cl no aludirla fue por ño Instituto de Valencia de Don Juan. Lo respeto, y por delicadeza. demás ¿no significa arrojar a la nada jirones ¿Cómo, además, salir de un escrúpulo del vivir que pueden ser aprovechados para inseparable de la obsesión nacional del mo- la mejor compo tura, equilibrio, sanidad momento? Tú y yo, grandes y chicos, todos ral, instrucción y riqueza sapiente de la pernosotros, rumiamos la guerra... la rumiába- sona? Cultívese la conversación de gentes mos... Tras lo de Lisboa... ¡Madre, recréaingeniosas en la manera que recomienda 111 ate cu tu hijo! dame Stael; procúrese inquirir en cl trato Invencible impulso ha sentido el Pobrecito de los amigos cl espíritu de los acontecimienHablador de correr a las plazas, gritando, tos y la psicología de las personas que les y cantando. dan curso; tomen todos por obligación acreLa gente iba y venía con sus comentarios centar el tesoro de cultura que recibieron de circunstanciales, que yo cogí al vuelo, para sus mayores en la carrera de la antorcha de legitimarlos, en su verdadero sentido: Lucrecio; pero nadie renuncie, en cl torbe- ¡El gordo- -exclamé- -ha tocado á Porllino de frivolidades que le solicitan, a esas tugal y a España! virtudes de hogar forjadoras de la raza, donCurtido está uno en omisiones y cade se aquilata, se templa, se mantiene y se lumnias. Permitidme recordar las práctiaumenta el valor de los hombres, la honesticas de los rojos. Rechazo, sin embargo, dad de ias mujeres, el respeto de los hijo? la idea de que nadie se atreva. a tildarme de a los padres, el amor y comprensión de los pacifista. Yo luchó solo, sin la menor ayumatrimonios cristianos a las crLturas de da, antes del Alzamiento; y de igual maellos nacidas, que a su lado y con sú ejemplo nera pasé a la Rusia soviética; y me lie deben educarse en cl amor a Dios y a su Iglehallado en los- tres cercos inmortales: Oviesia y también en el amor, disciplina y jerardo, Huesca y Teruel. Y por el marinerito quía de la Patria, conforme a los sanos prindel Baleares se dijo que las Charlas se hicipios tradicionales ahora en vigor. cieron carne. Pero esta posición de ahora, no- imEl caté y el club ¿no son. en último análiplica prosaísmo ni cobardía, que harto de- sis productos del liberalismo, pese al precemostramos inspirarnos en sentimientos antí- dente de las le I chas lacedemonios? ¿No lian podas de tales ruindades. Esta posición de irse limpiando poco a poco en los años equivale a humanismo, y a entereza políti- presentes los resabios liberales que todavía ca, y a conciencia patria. ¡Arriba la paz! padecemos y nos quedarán por mucho tiempo, El Niño Jesús nace cu la Península. Y porque no se deshace, ni en un par de déeaes- que acaso haya de partir de aquí, en el cias siquiera, la labor errada de dos centurias? instante de abrirse la lira de que tantísi- ¿Por qué entonces no reintegramos, con las mo se habla en la Babel universal, ¿Qué virtudes y Ins distracciones hogareñas; a la nueva Era inventaremos, que supere a la sana irndieción de Esmíin, que Franco nos implantación, por fin, de la d? Jesucristo? lia devuelto en la plenitu i de sus glorias? EEDI- KÍCO GARCÍA SAXCÍITZ (Da la lical Academia Luis ARAUJO- COSTA gundo villancico de estas Navidades) ALONSO MARTÍNEZ

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