ABC MADRID 16-11-1942 página 7

MÁORID DÍA 16 DE NUMERO DIARIO ILUSTRADO. AÑO TR 1 GEO 0 Ü 1 N T O e N, 11.458 S í SS (JK 1 PCÍON: MADRID: UN MES, 6 PESETAS. PROVINCIAS: TRES MESES, 18. AMERICA X PORTTJGAIJ: TRES MESES, 20. i3 EXTRANJERO TRES MESES, ¿87 50 PESETAS. REDACCIÓN X ADMINISTRACIÓN: SERRANO, 61, MADRID. APARTADO N. 4 S. OSIAP- ONESES DICEN QUE EN AGUAS DE GUADALCAKAL H AN DESTRUIDO LA MITAD DE LA FLOTA: NORTEAMERICANA Pétain desautoriza a Darían. Cien mil toneladas hundidas en las costas del África del Norte En el Noroeste de África, Francia, posee sino atacando en grupos; integrados por tres zairé. Los cazas aliados efectuaron operaúni- dades, que s lanzan a de noche, Argelia, que conlosjerni. orios. del Sur. se cx- -navegaudo en: superficie, la- carga velocidad, ciones de apoyo y diversión en el Noroeste de a gran tiende sobre una- superficie dé 2.204.900- kiló desde a retaguardia del convoy, Esta clase Francia. Todos los aparatos regresaron a s u base. -EFE mefrojscuadrados, o sea más de cuatro, veces de ataque obliga a uña, gran- dispersión de la extensión de España: El Protectorado de los buques de guerra de escolta alrededor Detalles de los numerosos barcos hundidos del convoy, durante la noche para obligar en el Atlántico Marruecos tiene 415.000 kilómetros. cuadrados; a loe submarinos a permanecer sumergíaos. Por consiguiente, eólo un gran acortamiencoma España sin Cataluña y Extremadura. El Berlín 14, 11 noche. Como complementó, to Protectorado de Tune z. es- bastante trias redu- una de las rutas aliadas, que redundara e n al comunicado especial de hoy el Alto Maninforma: cido; í 25.130 kilómetios cuadrados; la. cuarta te y mayor eficacia del tonelaje de transpor- do Nuestros submarinos han hundido en l él dejara libre naves de guerra, puede parte de la superficie de nuestro país. Los tres territorios juntos; tienen unos diecisiete millones de habitantes; algo más de las do s. terce ras partes de la población de España- Argelia. exporta en tiempos normales. meri Reproducimos, con verdadera sa- sión sería prácticamente inoperante siofreciétisfacción, el siguiente articuló pu- senws al inundor- -en vez de. nuestro, frente cancías por valor de. unos cinco mil milloblicado ayer por. nuestro colega nes de francos; principalmente vinos, cereales, Arriba. unido, y; por ló tanto, inquebrantable- -el trisgaiúdo, frutas, aceite, productos coloniales y te espectáculo de una. Patria incoherente, mulmetales. Francia, se alimentaba enpartehasta La- guerra elige en estos instantes lugares titudinaria: y desunida. Hoy el imperativo de s estos últimos días, de. víveres procedentes de geográficos muy próximos a las fronteras de unidad alrededor de Franco debe terminar de Argelia. Los. productos de Túnez son, en orden España. Por todas partes él hecha militar se finitivamente hasta con el más íntimo, y su- de, importancia en cuanto a la exportación, ce- levanta frente a nosotros, exigiéndonos una brepticio resquemor; hoy España exige que reales, harina -métales minerales, vivios, acei- atenta y vigilante actitud, pues en ningún modo ni una. sota vos disueñe de la común voluntad te. La inayor parte de sus exportaciones se dL la irreflexión o la confianza podrían resolver española, presta al servicio de Franco, en rigia, corno es. -natural a Francia, y el resto los delicados problemas qué la actual hora del quien las necesidades nacionales y los impe. a Inglaterra, Italia, Bélgica, Estados. Unidos, mundo, ha situado en nuestro: primer plano dé rativos históricos encuentran su actualísima etcétera. Finalmente, el Marruecos francés ex- atención. Mas ello está. bien, grabado en la con- expresión y en quien los designios plurales de porta fosfatos triga, pescado, lapa, huevos, et- ciencia de iodos lps españoles, y. ninguno de la. Historia y los intereses prácticos de Espacétera. Su Tomercio exterior se- efectúa prin- ellos puede ser tan ingenuo, como para supo- ñase anudan. cipalmente con Francia y Argelia, y en se- nerse a distancia. infranqueable de Id amenaQuien se a español ha de estar en estos mogiiñdo téfmiifQ con la ¡Gran Bretaña, Italia, za: bélica. Nuestras suposiciones: deben, por Alemania) los Eístadd Unidos, Bélgica: y otros oirá parte, reducirse a un, ünicb punto; debemos mentos al. servicio total y a las órdenes de países. Es: iéteré Mnt 4 observar qUí en las és- creer- -antes que enhebrar estrategias asustadi- Franco. La guerra está, demasiado cerca de tádísticas de 938, elJapón figura. eñ. las. itttr zas sobre los- mármoles dje los- veladores- -que, nosotros para, que sea perdonable- cualquier esportaciones con 222 millones, de- francos yi- suceda lo que suceda, él Estado español, guia- peci e de frivolidad o de polémica mas acá de nipido inrhediatamenié después de la metro- ido por. el pulso, firme de, su, Caudillo, obrará nuestras fronteras. Lo que conviene a España) e n. todo momento de acuerdo con los inás al- Franco lo- sabe, y únicamente a través de esta tos. intereses, de España, que. son los únicos fe incontrovertible podremos los españoles, conen esta ¡ocasión siderar, sin tensores ni incertidumbres, el pa A- B- ¡C- -E N G U A T E M A L A que, en definitiv i cuentan Francisco Franco, Caudillo de esta España a norama de un mundo desgarrado por la guela que. hoy más que nunca queremos unida, rra. No hay disyuntivas, ni dilemas posibles, particulares inhibición El problema de. los convoyes ha dado fehacientesr pruebaf dé: que: sV: caudi- solucion. esej, trance de a proponer, ounidad al- España. La. llaje sobre los hombres españoles marcha, sin- i fies, ante marítimos cronizado, con las mas. rigurosas y auténticas, rededor de nuestro Cátiidttó es un inapelable Guatemala 14, -g tarde, (Crónica radiote- constantes dé nuestro deslino histórico. Aho- inafidáió del Momento- Es decir, él riesgo y la íegráñca del enviado- especial de la Agencia coyuntura, ñas. dicen hoy: que sólo es factible Eté. Mientras hjasta aquí llegan las rnás con- ra, en estos instantes cargados de riesgo, sólo, la obediencia total, a; lás órdenes de Franco traáiqtorias. noticias sobre F! rancia, -África hay una denominación páralos hombres que y la seguridad plenísima en. la autenticidad de del Norte- -la Flota f ra- ncésa, él: mariscal Pé- vivimos entre elNervióñ y Algeciras: precisatain, D- arlan, Weyg and y Laval, Norteamé- mente. -la de españoles. Nadie puede ignorar ellas. Sólo así los difíciles momentos actuales rica vuelve los ojos a lp: que más directa- -qué quien se excluya de las tanderas de Fratí- podrán ser favorablemente: superados. j jnente le atañe a áus comunicaciones h cisco Franco se degrada instantáneamente de Quien quiera situarse fuera de esta, inte í ltimas. Como acaba de deci r el gen eral S E su condición española; nadie puede ignorar gración española bajo él mandato de- Fra n- aiío Smuts, lá ocupación deT. Norte de África que la realidad intangible: de España, tiene su co puede estar plenamente convencido i dé que por los aliados acortaría considerablemente M Historia le señalará como traidor y nosotros, sus rutas dé eomunicáqióp, tanto las del At- única vigencia, esperanza y plenitud en ia figu- como enemigo, y qué ni nosotros ni ía Historia ra- egregia- de nuestro Caudillo, por quien solántico como, las de: Pacificó- El por qué, -es obvio, pues la línea, de abalstecirni- entos del lamente la peligrosa, coyuntura de la. guerra le perdonaremos jamas. Pero a esta decisión Cercano Oriente quedaría. -reducida, d- e los podrá, resolverse para España de perfecto tajante de incompatibilidad la Falangf cr, éé ne 2 0.000 kllóriletrps q. u tiene l- óy. tanto tes acuerdo cop- su- s. intereses vitales, cesario añadir su consideración pptiéñsta. so, de. Norteamérica- como desda Inglaterra, a bre, la próxifna plenitud- de nuestra unidad. El inénqs de la mitad, de mqcto que, como ya ha dichOÁalgui- en, los buques, aviones y füer Hoy día la superación de todos los- egoísmos hombre español, el auténtico: hombre español, zías- de tierra empleados en esta campaña. por obra de esta fe inquebrantable en Fran- sabe dejar aún lado sus. rencillas y hacer ta; constituirían, una inversión militar que paga- cisca Franco esta, en el rigor, yven la conse- bla rasa de: su lenidad política cuando de lo ría rápidamente él capital invertido y produciría fuertes dividendos. Hay qué tener en cuéncia: de dos acontecimientos. Toda cotitin- que se trata inaplazablemente es de la salud cuenta, la enorme: carga que para los alia- -gencia, -puede (ser: prevista; inas nuestra previ- dé la Patria, E S P Á Ñ A A L R E D E D O R D É L GAU D 1 L L O dos supone la pi- ot- eec ón militar dé sus avés mercantés pára po er comprender lo que antecede. Y- ello porque l a cuestión de los C 3 nyoyes absórbela casi totalidad de las disponibilidades de navios de guerra que podían ser empleados en una acción antisubmafina. La estrategia na, val consiste eii elegir un punto, débil y operar- en, é! hasta que los dividendos; dejen de. ser buenos, memento que se elige para. el. trasl ado de la zona de operacioñes: a otro, sector; lo que obliga al Mando alia, do a establecer nuevas- bases para contrarrestar la acción. -La táctica consiste no en colocarse eri zonas angostas d. e forzoso paiso de los. mercantes para atacaVíes saliendo a la superfici. -tal como se hizo, n la. pasada guerra- permitií ¡a Iós. ali- aíd 6 s. pasar; dé la de fensiva Atlántico dos vapores enemigos que iespl- aa. la ofensiva contra los submarinos. -PE- zabají 12.000 toneladas y que formaban parNELLA KE S 1 LYA; te de un convoy, integrado por tres unida (Prohibida la reproducción. des escoltadas por. un contratorpedero. Los submarinos efectuaron e ste ataque: a pesar, de. la vigilancia ejercida Poí los aviones ad: versarios. En í í región. central del Atlántico. tres barBombardeo dW bases alemanas de. suraer- oos mercantes qve navegaban aisladamente fueron hundidos. Se trataba dé los. barcps Londres 14; 11 iroche. -Oficialmente se New Canna -de 7.000 toneladas; del, Star anuncia -que. los avio- mes norteamericanos Poiñt l, de 5.293, y del City of Ripon dé bombardearon esta, tarde ías bases alénia- 6.368. E n la zo. na. ma) ritima- dél Sur de Áfrinaá de- sufomEi, -rinos en La Palice y Ssi- n fc Na- ca, en la ruta áe El Cabo, el- barco City. La guerra en e! mar y en el aire