ABC MADRID 27-09-1942 página 19

A B- C. TSOS IKGO 27 B E S E P T I E M B R E B E Í 942. -EDICIOJí D E T. A MACANA. PAG. 19. LABOR- PENI T E NCI A- 1 RÍA DEL GOBIERNO En la última declaración ministerial se hace alusión a la política penitenciaria del gobierno y se dice que, merced a ella, ha quedado reducida a una tercera parte la población penal española. Quizá sea la redención de penas por el ¡trabajo el más claro exponente de esta política humana, de profundo sentido social, qtte se practica por el nuevo Estado. Millares de reclusos han obtenido la libertad, tras el estudio de su peligrosidad social, con ki ¡garantía del juicio formado en cada caso por las autoridades locales; otros muchos han ¡sido excarcelados por acuerdo de las Comi siqnes informadoras o mediante el sobreseimiento judicial de sus causas. Todo esto es helio, profundamente humano; es un claro Salar de de la cristiana virtud de la piedad. Pero, con ser tan loable, esta actitud del Po der público frente al delito- ¡y qué laya de ¡delitos en tantos casos! -tiene un más hondo valor y aun una extraordinaria novedad jurídica en orden a las doctrina y práctica penitenciarias por el sentido que se da a la pena al hacerla, redimible por el trabajo. Desde Beccaria acá la atenuación de las penas ha sido obra- de un criterio, cada ves más feble, de la defensa social. Mas la pena, como entidad, tenía un carácter bien definido de punición. Cuando a un reo se le condenaba a trabajos forzados, en los países en que existe esta particularidad penitenciaria, la fatiga y el esfuerzo de su labor no eran sino parte del dolor de la pena misma y. su natural consecuencia. El Caudillo de España, por visión personal del problema, ha atinado con una nueva modalidad de la pena al hacerla, no rígida y temporalmente determinada, sino equivalente a una cierta labor. Tal es la redención de la pena por el trabajo. Así, la pena- -permítasetíos emitir este concepto, que tal vez parezca demasiado audaz- -adquiere cierta calidad de penitencia teológica y deja- de ser la pena del Derecho punitivo. Y, si bien se considera, en nada se asemeja esto a la corrección del delincuente por su tratamiento penitenciario, tan encomiado por la escuela de Roeder y demás correccionalistas. Para éstos la pena tenía, sin duda, un carácter salutífero y no de vindicta social, pero siempre encuadrada en el marco de la ley penal, rígidamente previsoras de petias preestablecidas y no redimibles; o, cuando más, por la, buena conducta. Equiparar la pena al trabajo; hacerla depender del trabajo útil del penado es una novedad, de magníficas perspectivas para el mejoramiento de la futura sociedad. ha peligrosidad social del delincuente es otro extremo al que implícitamente se alude en la nota- ministerial al relacionarla con el extraordinario número de excarcelaciones que se vienen produciendo. Las escuelas positivistas de Derecho penal vieron siempre en la pena, no un Castigo en ecuación del delito, sino un servicio de eliminación o aislamiento del su jeto temible en sociedad. Sin disputa, un sabio criterio oportunista ha presidido la política penintenciaria a que, se refiere la nota ministerial. Los reos han sido liberados en tantas ocasiones en consideración a su no peligrosidad, a su fácil adaptación a la vida honrada; lo que habrá- exigido una especie de traTümiento psicológico para cada caso. Con ello, armoniosamente, cohonestado- con el sistema de la redención por el trabajo, se ha logrado devolver a la sociedad a muchos delincuentes, que lo fueron Por ofuscamiento o error de lavoluntad, o que cometieron trasgresiones de lio extraordinaria trascendencia, y también se ha producido un aquietamiento de las pasiones y. de la larga cadena de los odios que, desdichadamente, existían en nuestro ambiente; obra compleja y meritoria, que sólo plácemes LA PROS CRA SITUACIÓN DÉLA HACIENDA PUBLICA INTERESANTÍSIMAS DECLARACIONES DEL SR. BEN 1 UMEA La conversión de Jos Tesoros. Contribuciones e impuestos en alza. Situación norma! próspera. Finales del desbloqueo. Cifras elocuentes El actual ministro de Hacienda, D. Joaquín Benjumca, es hombre de gran capacidad y extraordinaria competencia, bien probadas en los dos años casi cftie lleva regentando la cartera. Posee, además, esa tenacidad para el trabajo que envuelve, forzosamente, una constante laboriosidad necesarias en toda obra de empeño y más en estas materias de orden ecoatinadísimas disposiciones, y según se inanifiesta en la recaudación de las contribuciones e impuestos, conforme se ve por las declaraciones exprofesatnente hechas para A B C, que publicamos a continuación. El ministro ¿le Hacienda, Sr. Benjufnea, que viene tr atando serena y acertadamente les problemas de la Hacienda española, plasmados después en disposiciones oficiales publicadas po. r el Boletín del Estado tiene el semblante Jel hombre de gobierno- -cuando IB saludamos ayer en su despacho del ministerio- jue ha podido desechar una grave preocupación y resolverla felizmente. 1 Tal es el caso de este ministro ante la icperacióñ crediticia consolidadora de los 4.485 millones de Tesoros 3 que se emitieron en dos etapas durante ei mes- de octubre de 10 Ü! y iue vencen el l.o del mes próximo. CLa solución propuesta por él y aceptada por ei Gobierno Hev! a las tres características que. es dable establecer para que s- e mantengan los- derechos de ios tenedores de papel emitido por el Tesoro y, por tanto, para que el crédito de éste y la confianza del ahorro es- pañol conserven el grado y el tono que per- sonalizan a un Estado y a un país que so desenvuelven con serenidad dentro de las dificultades impuestas p ¡or la situación bélica del mundo. La operación, señalada para el lunes y martes de la sem ana venidera, está asegurada por- el éxito, que se percibe previamente al conocer las resoluciones de l. as entidades que tienen los Tesoros vencederos el 1. de octubre, de las Cajas de Ahorro- -la Postal entre ellas- l- as instituciones de Previsión y el publico poseedor del 1.55 S. CIOO títulos que comprende el capital hoy circulante. Y al hablar de este trascendente acontecimiento y congratularnos ante el ministro de que se pueda registrar tan señaladas previsiones, recae la conversación sobre la marcha de la Hacienda pública y a nuestra pregunta responde, seguro y satisfecho, el señor Benjume a: N o puede ser mejor. Desde enero a fin Don. Joaquín Benjumea de agosto últimos el aumento de recaudación nómico y financiero, en las que tienen que ir es de 1- 000 millones de pesetas, y aunque no hermanadas, la sabiduría de los problemas y siga el mismo ritmo, es ya halagadora esta la constancia que recomendaba Necker a los cifra que, desde luego, ha de crecer hasta diciembre. Cierto que en fin ministros de Hacienda para que su obra fue- tantes gastos al aproximarsede año h ay basla. liquidación, ra fructífera. Y no cabe duda de que la del se- pero también hay ingresos que los compensan. ñor Benjumea lo es, por cuanto en el tiempo ¡Nosotros le decimos que si los cuatro meque regenta la cartera de Hacienda hace una ses que quedan por transcurrir para la recaud ación, se mantienen al tono de los ocho labor callada pero eficaz, según registra y anteriores, correspondería, a su término, 1.5 00 declara el Boletín Oficial del Estado con sus millones de alza que neutralizarán los créditos extraordinarios aprobados hasta hoy, Los cuales representan suma equivalente b, la anotada. Y el ministro admite que se pueda llegar, y aun exceder, dicha cifra, pero advierte que la, de créditos extraordinarios no es comput able en su totalidad al presupuesto en curso, porque hay partidas que deben invertirse en dos o en tres años. ¿Ya ha revisado usted el suyo? ¿Tie Casi todas las contribuciones e impuestics ne que hacerse algún abrigo, algunos- -sigue diciéndonos- -están en alza: unos, por trajes? No lo difiera demasiado porque, el desarrollo natural de la vida de trabajo a medida que avanza la estación, se del país; otros, por haberse establecido deacumulan los encargos y es mayor el rechos de Aduanas sobxe artículos anteriormente exentos; otros, la Inspectrabajo en los talleres madrileños. Este ción General cread a en gracias a la finalidad 1941 con es el momento oportuno. de mantener un constante conocimiento de la situación real de los servicios y un elevado rendimiento de sus organismos ejecutores; y otros debidos a la reforma tributaria de diciembre de 1340. Estos últimos represen- tan alrededor de la cuarta parte de incre han recibido ahora para usted una sementó. El caso es que el impuesto del Timbre, las Aduanas, la ley de beneficios extra ¡eecionadísima variedad de bellos paños ordinarios, la General sobre la Renta, la de de abrigo y para trajes de entretiempo Usos y Consumes, el impuesto de Derechos Reales y hasta los de la Ca- mpsa, aunque pay de invierno que le interesaría ver en rezca extraño dadas las dificultades de abassegukla. Estamos, como siempre, a su tecimiento de petróleo, se pronuncian en alza, servicio. siendo lo más satisfactorio, para un gobernante que d- ese a la prosperidad de la Hacienda SECCIÓN DE CABALLEROS pública, que esas alzas de recaudación son alzas normales y su valor intrínseco es esta regularidad que se observa en la vida de la Hacienda con relación a los tributos y nada hay preferible ni más envidiable para un ministro de Hacienda que hallarla eñ sitúa- ción normal próspera. Primera y segunda enseñanza. Externos, internos y medie- pensionistas. Y h ablándole nosotros, como término conIIESMANOS TEECEKO. 7 -uersa. aor. ña los íntimos extremos 3 e la, les! El hombre elegante