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ABC MADRID 05-09-1942 página 11
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ABC MADRID 05-09-1942 página 11

  • EdiciónABC, MADRID
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Á B C- SÁBADO 5 DE SEPTIEMBRE: DE 1942. EDICIÓN P E LA MMAKA. PAG. I I LOS ACTOS CONMEMORATIVOS DE OVIEDO EN L O M A S ALTO DE LA CATEDRAL ONDEA LA GLORIOSA BANDERA DEL ASEDIO Lo que fue, vuelve a ser: 842- 1942 Llegada de personalidades y re ¡Oviedo i, 12 noche. (De nuestro enviado espepresentaciones xiáh) A los mil cien años la espiritualidad re- tó; 6 jefe de Estado Mayor y ayudantes. V Fue recibido por- el comandante militar de la plaza, en cuya compañía visitó la ciudad. Seguidamente se trasladó el edificio del Real Club Asfiur de Regatas, donde fue delicadamente obsequiada. En la Comanld ancda recibió ía visita del alcalde de Gijón y del tefe local de Falange, con quienes conversó sobre diversos asuntos de carácter linda! tratando también de las fiestas conimemto ratavas cíe Gijón. que ha ¡n. de celebrarse él 21 de octubre próximo, aniversario la liberación de 3 e la ciudad. Al anochecer, el capitán señera! emprendió el viaje de regreso a Oviedo. -CIFRA. J surge potente. Entonces, como ahora, un Caudillo Una alocución del alcalde. En Jo alto de Llegada del nuncio de Su Santidad ¡alentó las encías unitarias de su pueblo, Negru. la Catedral ondea h gloriosa bandera del Oviedo 2, 12 noche. A las diez y medía ras y tormentas idas. Odios. Maldad. Horror rede la mañana saíió d e Le 6 m el nuncio de Su asedio solución clavada sobre Oviedo, mártir como de Santidad, aocimipañado del obispo, de aquella una garra execrable azuzada por todo lo malo, Oviedo 4, 6 tarde. El alcalde, LV Manuel diócesis, con dirección a Oviedo. ¡no conseguísteis más que poner una laureada en García Conde, ha dirigida una alocución a L as autoridades, formando caravanas de cada piedra y más fervor en cada corazón 1 los ovetenses con motivo de los actos que automóviles, se trasladaron desde esta capi Yo no. quiero hacer ahora tina exaltación apa- han de celebrarse en conmemoración del tal a San Esteban de las Cruces, donde r e sionada. Basta con un reflejo fiel y rápido: de undécimo centenario de Alfonso II, el Casto cibieron oficialmente al nuncio. esta conmemoración que va a celebrarse en la y la consagración de la Cámara Santa. En lo Figuraban en la comitiva, además del obis ciudad gloriosa. Porque ya el hecho en sí tiene alto de la catedr al y para, presidir estos ac- po d; Oviedo, el capitán general de to región, resonancia gigante en el plano religioso- -que es tos, ondea ya la bandera que figuró durante gobernador militar, general Recas; Tribunal lo nacional- -í en el católico- -fewe es lo univer- el cerco y asedio por los rojos a Ja capital eclesiástico, jefe provincial de Falange, comi! sal- -ai ser solemnemente consagrada a todo rito y que recuerda el valor histórico de la mis- siones de fies cabildos catedrales de Oviedo y Covadctag a y otras personalidades. la Cámara Santa, profanada un día entre ver- ma. -CIFRA. Después de las presentaciloties continuó via guenza y humo de pólvora que al estallar desEl general Aranda acogido en la capital je a Oviedo, donde le rindió homoíes un r trozó el relicario. Se derrumbó materialmente y Infantería de cayeron hacinadas piedras qué el arte creó. Pero con entusiasta manifestación de simpatía compañía del regimiento deretirándose lueMiláirt, c n bandera y musida, no el espíritu que levantó grandezas tantas, que Oviedo 4, 8 tarde. Esta tarde llegó él ge- gd a la residencia 1 del lO bisipo, en la que s s permaneció fiel, mátt fiel que nunca, luchador neral Aranda para asistir a los actos de atojará durante los días oue permanezca éa y altivo en aquel caos octubreño, ensayo maldito consagración de la Cámara Santa. Paseó por esta capital. -MEN. CHETA. de algo que vino después para dolor y gloria la ciudad y fue objeto de constantes maniAsistirán varios Ayuntamientos de Oviedo, de Asturias, de España y de Europa... festaciones de simpatía y cariño por parte ¡y es que el espíritu no cae. Firme sigue y segui- de ios ovetenses. Poco después llegó el gey Diputaciones rá como esta torre mutilada de la fábrica ca- neral Reca, también defensor de Oviedo. Tam. Oviedo 4, Í 2 nicfche. Durante el día de tedralicia, que ahora el amor de España recons- bien llegaron los obispos de León, Mondoñe- hoy han anunciado su. llegada a Oviedo retruye con paciencia de años. Y si la unidad se do. Calahorra y Coria, y los abades mitrados presentaciones de los Ayuntamientos de Bildisgrega y se arrumba inforrrie, como se demo- de Somos y Silos. -CIFRA. bao, Burgos, León, Paim piliona, Salamanca, lió por el odio y la violencia esta Cámara SanIloulouse, Zampra y Santander; representaVisita a Gijón del capitán general ta, joyero incalculable de valores, pieza a pieza, ciones de las Diiputaéiornes de Lugo, Falencia, se unió con mimo de enamorado; brizna a brizna Santander y Guipúzcoa; rector de la Univerde la séptima Región se la va reconstruyendo como se reconstruyó la sidad de Safemanra, comisión de los cabildos Gijón. 4, 12 n ojohe. El capitán general de de Santiago y León, director general ¿e la Patria- -vota, chafada- en tres años gloriosos y la séptima región, general Solchaga, que ha Guardia Civil, director general de Enseñanpara siempre. Por eso en Oviedo hay algo más que lo mera- llegado a Oviedo. para asóstir a los actos con- za Superior y Media, director general de Bemem orativote que se celebrarán estos díais, se mente conmemorativo, que lo puramente consa- ha ¡tr. asiladla. d: o a las siete de la tarde a Gijón, llas Artes y otras muchas personalidades; Vienen con maceros los Ayuntamientos de grácional; hay un símbolo. Pero no un símbolo donde ha pasado unas hOiras. í e adoimipañaetéreo, sino corpóreo, geométrico, tangible... Y ban el gobernador militar, general Abriat Can- León, Bilbao, San Sebastián y Vitoria. MENCHETA. España toda, puesta en pie de amores, está pendiente de este acto, como ninguno triunfal, en el que todo el boato del rito y todo- el esplendor religioso va a tener su lugar, y la gran pompa religiosa las mejores solemnidades. Porque los Míos de dos etapas gigantes del espíritu se anú, dan fuerte por la mano de Franco, reconquistador y Caudillo. En un reinado, que excede del medio cordobés. Reavivó leyes toledanas, es decir, Y, Oviedo, capital del Principado, joyel de verde siglo, el segundo Alfonso, llamado el Casto, de los Concilios, y con ello obtuvo la nueva paisaje que- le dan, placidez a los centros fabriles inicia la expansión del Reino astur, que va regla de vida para la sociedad nueva que que son esfuerzo, se prepara como nunca á prea convertirse muy pronto en el Reino ga- se formaba, extraída de los viejos ordenasenciar: -nio, presenciar no; que es pasivo; a laico- leonés. Es un fuerte varón de aquella mientos góticos. Es decir, enlazó armoniosaactuar con su fe, que es afán- -este acontecimienalta Edad Media, en que empezaba a formente el pasado nacional con su futuro, y to vertical de grandeza. Oviedo en estos días es jarse esta Cultura que un pensador alemán en el pasado halló las raíces jugosas para un ascua de plata a los pies del Naranco, laurel ha llamado faústica es decir, la de la nutrir los venideros frutos; especie de mieterno de verdor que corona la ciudad? toda Europa medieval cristiana, de las que no sión y de alianza, que se asemeja, a través ella engalanada, toda ella iluminada. Tanto que son sino hijas y consecuencia la edad renade once siglos, con la de esta hora de Esen la noche un reverdor sube como humo de centista y la del espíritu moderno. Es un paña, bajo el signo de Franco. ¡Duro y herlámpara votiva al cielo, donde está el Señor de Rey bellido, bien barbado, como cuadra a moso Rey, el que llevaba el burdo sayal señores. Gentes venidas de todas las capitales todo Monarca de medallón antiguo; es to- frecuentemente por debajo del arnés! Toda de España dan, con su asistencia, acto de fe davía un godo; o, por mejor decir, porque sú vida fue religiosa al par que militar, a la gran fiesta del espíritu que en la catedral ésta es su máxima gloria, es un restaurapero su milicia lo era en nombre de Dios. ovetense, mutilada gloriosa de dos odios distindor y continuador del sentido formativo de Logró dar este carácter de misión religiosa tos, en lo cronológico e idénticos en lo político España y de lo hispánico que tuvo la épo- a su fuerte brazo de guerrero, y con ello se va a celebrar. ca gótica. De ella vive Alfonso; por su ya señaló una tendencia y un valor de Ya esperan las piedras reconstruidas. Ya está reviviscencia lucha. X la logra. Así reanilo hispánico para futuros y duraderos sila Cámara con ansias de albergar su tesoro de ma las clases sociales de la Monarquía visiglos. Este sentido de su vida, que lo difeveneradas reliquias. Los apóstoles que llevia ha gótica; el Clero, depositario de la ciencia rencia del primer Alfonso, netamente miliconcebido ahora con paciencia monacal en cuay de la identidad nacional- -una nación que tar, y de otros muchos monarcas absorbidos tro años de esfuerzo gigante y de pericia inmeya es; que tiene un perfil característico y por lo que hoy llamamos lo político aunjorable, en sus pedestales románicos esperan... que comienza a parecerse a sí misma que se tratara de una conveniente política Ya a llegar el tesoro, va a volver todo a ser lo la nobleza militar; los hombres pecheros, nacional, es lo que más hace señero y único que fue. La gran unidad espiritual va a celebrar, dotados de aquella libertad de modos, de a este caudillo entre la larga lista de los se entre clamor de órgano, volutas de incienso, aquella seguridad de estirpe que hemos reyes medievales. No hay espacio, ni pluma musitar de labios luego de admirar en ellos a través de los apta para producir el símil, que. por otra restantes tiempos medievales. Siglos antes En Oviedo, a los mil cíe años de la muerte parte, sería aleccionador, de este Rey con de que exista siquiera el nombre de Cas- Alfonso el Batallador de Aragón, o con el de Alfonso II el Casto, caudillo de ardiente estilla, él es ya nuncio y arquetipo de lo cas- gran Don Sancho de Navarra. Ño saldría píritu guerrera y religioso, las piedras góticas de esta catedral, altivo florón religioso del Es- tellano y del castellano. Esta es, quizá, la perdidoso el Soberano astur. Fue, en fin, tilo más puro, todo lo que fue volviera a ser. La mejor valoración de esta señera figura hisfavorecido por el milagro, cosa no rara, ya tórica. En este buen Rey de los breñales vida sigue triunfando sobre la muerte. Ya la que su vida era carismática y muchas de astúricos y de un puñado de vasallos, están Cámara Santa, que dos toneladas de dinamita sus empresas parecen milagrosas, s a l v o ya, como en semilla presta a futuras exderrumbó convirtiéndola en horrible montón en cuando, enfrascado en políticas demasiado pansiones, las virtudes todas, y aun los de- mundanas, tuvo complacencias con Carloel que plateaba dolorida al Arca Santa, vuelve fectos, la energía impulsiva, ei sentimiento a tener la misma bóveda sencilla de doble camagno y querellas con sus nobles. El arca ñón, la misma ventana con columnillas en el tes- patrio ceñudo e irreducible; el carácter todo, sagrada, llena de verdaderas reliquias, vino en suma, que después han de definir lo a sus manos; los ángeles le labraron una tero, idéntico arco evocador sobre las dos coespañol. Educado en un claustro de monjes, lumnas con capiteles seuüocoHntios, igual antecruz de maravillosa orfebrería, en la que delante de una imagen de Cristo, a cuyos cámara cuadrangular, gemelos muros con columgemas casi irreales transparentaban no una pies residía lo poco que entonces quedaba pias soVre cuyos fuertes resaltan las grandes esluz solar, sino una luz cerúlea, del otro y de España, toda su vida fue el penitente tatuas apostólicas de escuela compostelana y mejor mundo; en su tiempo fue el hallazgo y el hombre de cogulla, aunque revestido del sepulcro del Apóstol. En todo se adverlos capiteles historiados parece que sonrii de la armadura. Hizo notables algaradas las postas con sus florones están ya como estatía, en lo temporal y en lo espiritual, la hasta el Sobrarbe, hasta Lisboa, y ganó ban antes. reformación de España, la reconstrucción de aquella gran victoria de Lutos, verdadera España, después de la gran catástrofe saTodo igual que fné. Dos etapas de grandeza hazaña de una escasa hueste de guerreros rracena. ¡Sea ahora la misma cosa, ya que espiritual van a ser unidas con el lamo fuerte montañeses frente a las cohortes bien orga- i a través de tantos siglos hay una indudable de lo, fe. Lo hace el Caudillo. nizadas, pero con menos alma, del emir I manifiesta similitud entre dos épocas. Como siempre, el espíritu, sigue triunfante su ruta de siglos hacia la. eternidad que espera, L CONMEMORACIÓN DE ALFONSO 11 A EL CASTO E N R I Q U E XfB t CORRAL.

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