Archivo ABC
ArchivoHemeroteca
ABC MADRID 30-05-1942 página 3
ABC MADRID 30-05-1942 página 3
Ir a detalle de periódico

ABC MADRID 30-05-1942 página 3

  • EdiciónABC, MADRID
  • Página3
Más información

Descripción

DIARIO ILUSTRADO DE INFORMACIÓN GENERAL. 25 CÉNTIMOS M T A R R E GA DIARIO ILUSTRA DO DE INFORMA CI ON GENERAL. 25 CÉNTIMOS J l EL MASA 1 E Lope de Vega fue desterrado a o sé de una señora que, deseando yecoconsecuencia de sus sátiras contra Elena brar su perdida esbeltez, se sometió Ossorio, la bella hija- del autor VeL 30 de mayo, sobre los castillos de p adurante varios meses a un tratamienlázquez, eligió por sitio de destierro la ciudad to intensivo de masaje con el siguiente reta, emblema del Arma de Ingenieros, de Valencia. Fue consejo de otro autor bien 1 sultado: que ella se quedó como estaba, pero surgirá invisible el nimbo de la tradicelebrado en aquellos días, Gaspar de Porres, su masajista perdió cinco kilos, de f eso. Desempresario a la sazón de las comedias del Féción; aureola científica, glorias guerreras, nix La determinación obedecía a que, des- de entonces, la buena señora le niega al ma- abolengo de lealtades, virtudes militares y pués de Madrid, a fines del siglo xvi, era Va- saje toda virtud terapéutica y, si nos- cololencia el lugar predilecto de comediógrafos y camos en su punto de vista, no tendremos ciudadanas, toda la corona ideal de una cocomediantes. En aquella espléndida floración más remedio que darle la razón, pero tam- lectividad que empezó siendo Cuerpo limitateatral actuaba de pontífice máximo el insigne bién tiene razón el masajista cuando afirma do por muralla de fórmulas matemáticas y canónigo Francisco Tárrega, uno de los fun- que el masaje es el mejor sistema de adelha ido convirtiéndose en Arma de combate, dadores de la Academia de los Nocturnos. gazamiento que existe en el mundo ¡Evidentemente, el masaje constituye un con su? zapadores de vanguardia, sus patruA no ser por las calaveradas de Claudio Conde, íntimo amigo y acompañante de Lope de gran ejercicio. En cierto modo, y hechas to- lleros minadores, pontoneros de asalto, y esos Vega, que obligaron a los dos a huir precipi- das las salvedades oportunas. podríamos comtadamente de la ciudad del l uria y alistarse pararlo a la equitación, gracias a la cual lo- heroicos enlaces que van pegados a las fueren la. Armada (que los extranjeros llamaran gran los jinetes conservar siempre en for- zas de choque para ligarlas, con la red de los Invencible) a buen seguro que el creador de. ana a sus caballos, o a. la caza, que contri- hilos telefónicos, a los puestos de mando. Su la comedia española afincara en Valencia por buye, de una manera tan poderosa. a desmuchos años. De aquí que, algunos adelante, arrollar los músculos de los conejos. Cuando Santo Patrón, el- conquistador de Sevilla, moy desligado de Conde, volviera con su esposa, el masajista se pone a trabajar las grasas de délo de humildad y. de valor, oirá desde el doña Isabel de Urbina. sus clientes al modo de un panadero que es- Cielo las- preces de? íqs soldados de IngeniéPorque no sólo aventajaba el arte valen- tuviese trabajando la masa, del pan, realiza ros que en el hermoso templo madrileño de ciano en la esfera de lo regional, sino que va- un esfuerzo muy beneficioso, sin duda, para los Jerónimos, y en las iglesias de todas las rias comedias de aquellos ingenios eran escrisu propia salud, pero yo no veo por qué regla guarniciones de España, suben hasta su trotas directamente para los corrales de Madrid, para é del Sol primero, para el ¡delPrín- de tres ha de beneficiar ese esfuerzo la salud no celestial pidiéndole conserve, lozanas siem de ninguna otra ¡persona. En general, y así cipe y el de la Cruz ¿espués. Conoció Lope a Francisco Tárrega y supo como la masa del pan se hincha y se dilata pre, las ramas de laureles- y robles que cir ¡apreciar su talento. Era Tárrega hombre de en manos del panadero, así se hinchan, se di- cundan el símbolo de los castillos. extensa cultura, doctor en Teología y escritor latan y aumentan de Volumen muchas veces Día de tradiciones son estos en que las cooriginal y elegante. Miguel de Cervantes Saa- en manos del masajista las grasas de la per, vedra aluda en una ocasión (prólogo de sussona sedentaria que aspira a quemarlas con el lectividades militares celebran la fecha en Ocho comedias) a su discreción y abundancia ¡esfuerzo ajeno, y sí esto tuvier una moral, que la Religión glorifica la advocación de la de conceptos. Su teatro, que anticipa el de su sería la siguiente; íamoso paisano 1 Guillen, retrata magistral- Hay trabajos que todo el mundo puede na- Virgen o el recuerdo de aquellos Santos, bajo D. mente la vkla y costumbres valencianas. Mo- cer por nosotros; pera nadie será capaz de cuya égida se han puesti los Ejércitos espadelo en su género es El Prado de Valencia. Pero no se circunscribe a lo típico y local, substituirnos nunca en el trabajo de trabajar. ñoles. La tradición es la médula, el alma, el sino que supo ele rarse a lo universal con susCuando nuestro trabajo tenga un fin fuera ele vigor, la potencia de las tropas, y en ella está dramas. Dos comedias suyas, El cerco de Ro- sí mismo, muy bien que se lo encomendemos incrustada la fe. Hace luengos años, cierto das y La sangre real de los montañeses dea cualquiera, pero, cuando no tenga más fin Navarra, se aplaudirían hoy mismo, si el arte que el de quebrantar nuestro egoísmo, nuestra poeta de Infantería lo explicaba ante una muno estuviera convertido en mercadería y se comodidad y nuestra poltronería, entonces chedumbre de soldados de Ingenieros reuniestrenaran, por esos teatros de Dios o del no habrá más remedio que apechugar direc- dos en la vieja ciudad de Guadalajara- -antidiablo cosas más dignas de nuestra estirpe. tamente con él, prescindiendo de toda ayuda gua cuna. del, Cuerpo- reproduciendo una No he visto representar obra alguna de Tá- más o menos mercenaria. Una máxima, que conversación entre un gigantesco zapador y rrega, y al lector le habrá ocurrido otro tanto: todos hemos aprendido en la niñez dice que para nada figura su nombre, como no sea en el trabajo ennoblece y dignifica, mientras un corneta de c izadores; preguntaba éste al el campo reducido de la erudición; empero otra, más utilitaria, lo presenta como la base facultativo; quien quisiere de veras gustar de un arte ex- de todas las fortunas, y es indudable que cada- -Oye tú, ¿sabes por qué: quisito y ponderado, de comedias llenas, de si- una de estas máximas se refiere a una clase cual si fuese un alojao, tuaciones felices, interesantes, emotivas y ga- de trabajo muy diferente de aquél a que alutiene cada Cuerpo armao llardamente combinada de una dicción flui- de la otra. Para ganar dinero, lo mejor, evisu Patrón? v da, matizada de sorprendentes imágenes; de dentemente, es hacer trabajar al prójimo, -SI aue lo sé- UH verso robusto, rectilíneo, contundente y re- pero, si queremos que el trabajo nos en- -ei ingeniero decía dondo, coja al azar cualquier obra de Tár. rega noblezca, que nos dignifique o, simplemenmirándole bajo el codo- -r y se dolerá del olvido injusto en que yace. te, que nos adelgace, forzoso nos será realihombre, aquí se explica todo; i Gira nuestro teatro alrededor de unas cuan- zarlo nosotros mismos con el consabido sudor verás: -en el firmamento tas producciones sobresalientes, cierto; pero hay un Patrón o Fatrona sobadas y resobadas, y parece llegada la hora de nuestra frente. En una palabra, amigo ector. Si afg que al que aquí es güeña presona, desairearlo, de exhumar otras joyas del tiempo gtó ño ceden ante las más ce eb 4 értón as. Re- 4 í se pone usted demasiado gcfHo- -IB ÍÍ J e ofrece el alojamiento; C UANDO Y FERNANDO Ul, E L SANTO E t pilíbíéi por ejemplo, La ftfvoraVl é s peco probable en estos qufej e citada con elogio en elt Quijote, o La d 0 tfe- (recobra ¡su 1 línea, no se haga iisted dai teasa constante, y se verá cuánta es la excelen- saje- -nmguno. Al contrario. Busque a otro cia de Tárrega y corno el tiempo no ha pues- gordo y convénzalo de que se deje masajear to en estas extraordinarias comedias una sola por usted, arrufa. J u n o CAMBA- fiisboíi es un muerto en campaña éñlra, man que sea corneta. 1- -i Sin boleta? í -La boleta és un grito: ¡Viva Esp aña!

Te puede interesar

Copyright (c) DIARIO ABC S.L, Madrid, 2009. Queda prohibida la reproducción, distribución, puesta a disposición, comunicación pública y utilización, total o parcial, de los contenidos de esta web, en cualquier forma o modalidad, sin previa, expresa y escrita autorización, incluyendo, en particular, su mera reproducción y/o puesta a disposición como resúmenes, reseñas o revistas de prensa con fines comerciales o directa o indirectamente lucrativos, a la que se manifiesta oposición expresa, a salvo del uso de los productos que se contrate de acuerdo con las condiciones existentes.