ABC MADRID 03-03-1940 página 15

ABC. DOMINGO 3 DE M A R Z O DE 194 Ó. EDICIÓN DE LA MAS ANA. PAG. 15. EL FUHRER HA RECIBIDO A WELLES, PERO ALEMANIA NO PRESENTA NUEVA PROPUESTA DE PAZ Los conflictos económicos de Ja guerra l a doble y angustiosa tarea que la índole de ía guerra actual impone a los beligerantes consiste eri atacar por todos los medios posibles la economía del adversario y delender la propia contra la hostilidad exterior y las dificultades interiores. Para todo el mundo, y más para España, ijue tiene planteados todavía los problemas do su postguerra, es interesantísimo seguir atentamente esa lase principal de la lucha, comparar sus resultados y la situación que vayan produciendo en cada país, y calcular, sobre, los hechos consumados y sobre los desenvolvimientos probables de la conflagración económica, el balance de poder y de recursos, los niveles do vida que reserva el porvenir a los Estados europeos, a los que pelean y a los neutrales. El enorme crecimiento de los gastos públicos, la desorganización del trabajo por lias movilizaciones, las curas formidables quo representan los depósitos para asegurar la provisión de los Ejércitos, son causas po í derosas de carestía que, inmediatamente, ocasionan l (v invalidación de salarios y rentas. Se comprende la preocupación y la. inquietud de los Gobiernos por la inestabilidad de los precios. Reglamentarlos es cosa delicada y muy difícil, cu la que se corre el peligro de entorpecer y debilitar los negocios y las producciones, y, sobre teflo, do obstruir lá regularidad do los abastecimientos, con la consecuencia de enrarecer los productos, lo que añade una causa más a la carestía. Él Gobierno de Inglaterra dejó libre el mercado desde el comienzo de la guerra; hasta que el alza do precios tomó proporciones alarmantes. Comprobó en, diciembre qTSc el porcentaje de carestía en el índico general del coste de la vida, relacio nado con el nivel de julio de 1914, habí subido de 55 a 73, y de 38 a 57 eu el índice especial de alimentación. Claro está que esto último porcentaje había influido mucho en el otro, y por esta, razón, a, sí como por ser la comida el renglón más importante de los presupuestos hmniMes, el Gobierno se der cidió a intervenir sobre los precios de algunos artículos, principalmente pan, harina, carnes y leche, pero con un sistemo, diíereiHo do las tasas: con subvenciones y subsidios destinados a impedir el alza; y el resultado es, hasta hoy, satisfactorio, puesto que el índice general ha subido poco y el fle subsistencias no lvi cambiado desde diciembre. Un millón tic libras cada semana, unos cincuenta, millones do libras al año, cuesta este sacrificio que, por ahora, conjura el círculo vicioso de la carestía, la sucesión de réplicis en las alzas. de salarios y de precios, y tras ellas, z desastre final de la inflación. Por ahora, decimos, porque el ministro del Tesoro ha declarado que el dispendio no puedo ser ilimitado ni puede asegurar el porvenir. Y íes evidente que la temida inflación surge también por otra parte cuando las cargas excesivas agotan el Tesoro, que bastante pesadumbre aguanta ya con la guerra. Habrá que combinar con el sistema de subsidios Ja imposición de restricciones rn ol consumo de no pocos artículos, y de ello habla la Prensa. Habrá qué atender, igualmente, para la defensa, da la moneda, no sólo a la estabilidad relativa del coste de la vida, sino a la estabilidad del cambio. Inglaterra es importadora de una gran Darte de su abastecimiento, y la baja de la libra ha influido notablemente en el alza de los precios interiores. Hay una gran corriente de opinión que reclama la revaJuaoión de la libra. Esto complejo problema es el qne nUora t! or- planteado ía Gran Bretaña. ¿Y hasta quó feclía podrá sostenerse el empleo de los paliativos- -no hay más que paliativos- -en los trances angustiosos de la conflagración económica? Ars longa, viti brevis ¿Será más breve la guerra que el repertorio de los arbitristas? rá todavía con el mariscal Goering, con elministro Hess v con Weizsaecker. -CESAR GONZÁLEZ RUANO. A B C en París Aviador belga muerto en un combate con un avión alemán. Barcos ingleses, destruidos por ataques aéreos. Otro desastre soviético al Nordeste del Ladoga Disparates París 2, 10 noche. (Radiograma de nuestro corresponsal. Vtista y comentada o interpretada por algunos diarios franceses- -L Oeuvre, Le Populaire, L Ordre y L Epoque- -Ja noticia de que la Gran Bretaña declaró anoche el embargo sobre el carbón que el Reich exporta por vía marítima a. Hitler recibe a Welles- Alemania ao hace Italia, compromete o en todo caso contraría, el normal funcionamiento de la neuproposiciones de paz tralidad) española. Se trata, naturalmente, Berlín 2, 9 noche. (Radiograma de nuesde un juicio extravagante de puro trazado tro corresponsal. Aunque poco, en rea- y, más que a una operación del racionalidad, se sabe de la entrevista celebradla en- miento, responde a una depuración polítitre el Führer y Welles, en presencia del mi- ca que coincide con el suavizamiento de nistro Ribbentrop, del ayudante de Hitler, la censura. En primer lugar, la posibiliBrueckner; del ministro Meissner, del secre- dad de que los barcos italianos no puedan tario de Estado, Weizsaecker, y del encar- comerciar entre Hamburgo y Genova no gado de Negocios de los Estados Unidos, tiene gravedad mayor, ni, aunque la tuvieKirie, la impresión general en los círculos oficiosos es muy satisfactoria. Evidentemen- ra, podría este incidente por sí sólo alterarte, Welles h, a encontrado, incluso en el reci- las relaciones políticas que Jos neutrales bimiento que el Reich le ha dispensado, mu- mantienen con aquéllos. Las cortapisas que cho más calor y más ceremonia oficial que Londres acaba de poner al aprovisionamienla lógica para una visita de información, to del Estado fascista no constituyen una novedad, ni mucho menos una excepción. que tiene carácter particular. Estaban previstas crean el El enviado de Roosevelt recibió la Pren- llo de una presiónyque hasta último tornisa americana y se mostró muy satisfecho respetado únicamente a Italia. ahora había de todo, diciendo que su entrevista con Rib- te, Londres- morigera a Roma Visiblemeny bentrop había sido sumamente interesante. atenuar los perjuicios consiguientestrata de Mientras tanto, la visita de Welles sigue bargo ofreciéndose a sustituir el al emsiendo aprovechada por la Prensa franco- alemán por el suyo, reduciendo el carbón precio inglesa para decir que éste llevará a París y Londres proposiciones alemanas de de éste al del carbón francés y a cambio de que Italia suministre la equivalencia en propaz ¡Todos los días, la misma historia. Aquí se tiene la impresión de que Ale- ductos de su industria pesada. Pero Roma mania, después de haber visto rechazadas stis prefería pagar con pastas alimenticias, aceite, frutas han lleproposiciones de paz de octubre, considera gado a un y vino. Las negociacioneshan roto. punto muerto, mas no se inevitable el combate en toda línea, y así oficiosos ingleses la se ha dicho bastante claro en los discursos Los medios de una solución y sugierenios posibilidad últimos de sus jefes políticos. Cada día que despachos trasalpinos indiquen aunque que Italia pasa, y cada vez que se toma el pulso, no sólo de los círculos oficiales, sino de los sen- podría importar carbón de Norteamérica, timientos populares, se llega más al. conven- el regreso a Londres del embajador del Estado fascista constituye un indicio de cimiento de que los alemanes, que nunca quisieron la guerra e hicieron todo lo posible que los contactos entre ambas Cancillerías por evitarla, creen hoy que esta guerra es abordan una fase más estrecha y más acun episodio decisivo, que será difícil resol- tiva. Es inútil, por lo tanto, que los diaver si no es con una completa, victoria de rios mencionados exageren las dimensiones la armas. De todas maneras, es evidente del incidente, que, en el- mejor de los casos, que la palabra paz suena más que nunca, no modificaría la situación diplomática de Europa. aunque no por la parte alemana. La visita de inspección que, según Le, En la Wilhelmstrasse se comenta hoy la proposición firmada por cuarenta y tres per- Temps del viernes, ha girado el generalísonalidades políticas inglesas, pidiendo a simo Gamelin a ciertos sectores de los AlChamíberlain que investigue cuáles son las pes, revistió caracteres estrictamente reglaposibilidades de hacer una paz. Después de mentarios. Si, desgraciadamente, no deja la conferencia de esta mañana con el Füh- de ser cierto que ios beligerantes permanerer, el subsecretario del departamento de cen fieles a sü beligerancia, también es verEstado americano parece que se entrevista- dad que los neutrales se obstinarán en practicar su neutralidad. Le Populaire, L Oeuvre, L Ordre y tutti quanti obran como si, humillados por el fracaso de sus pronósticos arusofoides, desearan que se cumpliera a la otra mitad de una profecía que sobre la alianza de Francia a Inglaterra y a los en función de cuatro tarde, Soviets prescribía áa fatalidad y acaso la, conveniencia de una guerra entre fronteras... -MARIANO DARANAS. A B C en Berlín por 1. vez Miguel e Molina EL ÉXITO DEL DÍA con todo su Espectáculo, en el Cómico. La guerra en Occidente Parte alemán. Los aviones atacan buques de guerra y convoyes ingleses, destruyendo, algunos Berlín 2, 2 tarde. Comunicado del Alta Mando del Ejército alemán: En el Oeste no ha habido acontecimientos de importancia. El Arma aérea alemana ha efectuada vuelos de reconocinaiento, soIbre todo el mar del ¿Norte, hasta las islas Oreadas. Aviones alemanes atacaron en diversos puntos, a buques de guerra ingleses, y a barcos mercantes armados, que navegaban en convoyes ingleses. Un barco se hun- di 6 inmediatamente y se pudo comprobar un grran incendio a bordo de otro. Otros cua. GONlÍHITA PBQUER 5. -SEMANA L A RA