ABC MADRID 22-11-1939 página 7

DIARIO ILUSTRADO. AÑO TR 1 GE- SIMOSEGUNDO, N. 10.529 É 0 Jg ITINERARIO HISTÓRICO DIARIO ILUSTRADO. AÑO TRIGE SIMOSÉGUNDO. N. 10.529 f B SUSCRIPCIÓN: MAÜRED, UN MES, 3,70 PESETAS. PROVINCIAS: TRES MESES, 12,65. AMERICA X PORTUGAL: TRES MESES, 13,15 EXTRANJERO: TKES MESES, 33,65 PESETAS. REDACCIÓN Y ADMINISTRACIÓN: SERRANO, 61, MADRID. APARTADO N. o- 43 POR LAS CARRETERAS DE ESPAÑA, CUBIERTAS DE MIRTO Y DE FLORES, LOS RESTOS DE 1 OSÉ ANTONIO, ALUMBRADOS POR CENTENARES DE ANTORCHAS, RECIBEN EL IMPRESIONANTE HOMENAJE DE LAS MULTITUDES El cortejo fúnebre llega a la provincia de Albacete. Tributo emocionado del vecindario de La Encina; Hacia Almansa, en el silencio de la noche. El homenaje del Duce. y por el abre Silencio final Llanto y luto de la ciudad ñal de difuntos prematura tránsito se rosas una primavera de frescas de Villena CRÓNICA DEL ENVIADO OFICIAL RAFAEL L Ó PEZ IZQUIERDO. Noble, fiel y lea 1; renovando en. el día de llanto los títulos que la historia le otorgó hace cuatro siglos. Tillena. se ha empinado esta, mañana, desde su magnífico emplaza miento, para contemplar bien el paso del cortejo. No pudo tener hoy la Virgen de las Virtudes, su, secular Patrona, una sonrisa triste y final, para él caminante de España. -Porque su imagen la quemó el enemigo, y viudo de ella, queda allá el. Santuario, deslizándose humilde por los brazos del monte. Tampoco están en la fachada gótica de Santiago las flechas católicas de los Caudillos: que el enemigo- las mató para siempre, es- crapulosamente, con su cincel de odio. No. quedan ya los que primero se alistaron en la íe del mártir. Que sus nombres figuran, heroicos, en las piedras labradas de la iglesia. Sólo queda Villena. En. pie. El entusiasmo, el recuerdo en alto y, cara al sol, la realidad de lágrimas del gran cortejo a c tuál, numeroso, apostólico. Villena en sí. Con su castillo señoril y guerrero, vigilante el caminar solemne de sigilo, el más puro arquitecto del Renacimiento imperial. Que- k da Villena con sú gran tragedia pasada, en carne viva aún, con el tesoro de su silenció enorme. Hondo silencio de prez devota, que so mantiene, al paso de la comitiva. Hondo. silencio festoneando en la noche de luminaria y en el día tibio de los morados soles orientales. Silencio mundo de la ca- r tedral y de campamento. Milicia y rezo. Villena ha sido hoy digno hito del postumo viaje. La gran movilización de sus jerarquías y de sus milicias y el fervor recogido de sus fieles, ha pregonado y dicho de esa gran calidad de pueblo procer y- del estilo nuevo de su disciplina. Enlutada y triste, con amor tan grande por José Antor. io, salpicada de cantos de. campana, de rezos de imperio. Villena ha contemplado el paso del cortejo. Noble, fiel y leal otra Vez más. Como en los viejos tiempos de su jbistoria. Síntoma Cortejo de oración Á l á s diez y cuarto de la mañana, el cor (íejo, guarnecido y custodiado por las autoridades y milicias, de Granada; el jefe provincial a la cabeza, con las demás jerarquías y autoridades, sube la ruta de la población bajo un cielo de algodón le nube, y 1 sol dorando los riscos de San Cristóbal. Va el. féretro cubierto por la bandera roja y negra y, sobre ella, los cordones de jefe nacional. Gualdrapa austera, negra CÍMI leyenda dorada, cubre las andas, llegadas por. doce falangistas de los tiempos heroicos del Partido. En la. Losilla espera el clero parroquial del templo de San- tiag- o con las jerarquías villenenses, y después del responso ascienden todos entre la calle ancha que abren las juventudes én recta disciplina. L. XPiíejin las campanas lentanjénte en se- José Antonio ha salido de Villena para y de haces de mirtos y laureles, y se abaten, subir la escalinata última de su panteón. en reverencia, banderas victoriosas y de Dignidad y silencio le acogieron. Silencio todos los pechos salen las. oraciones. con que nosotros debemos despedirnos para La Sección Femenina es la encargada de siempre de sus restos mortales. Recogido tejer el tapiz espontáneo de esas flores fervor ante la grandeza de su propia exisdel campo de Sigüenza para el triunfal tencia y del sublime padecer del mártir. viaje, y por la calle, desde los balcones No debo decir más, pues que todos llevamos enlutados, las arrojan al paso. eri lo más hondo la realidad y- la nostalHay. un silencio de réspet- o en los corazogia de aquella grandeza. Hondo silencio nes. Tan sólo, monocorde, el- clamor des final de prez devota, como, el que cunde los pasos de marcha, airosa y férrea disen el ordenado serpear de- esa, procesión ciplina. solemne por todos los caminos de la ruta. Hemos visto a. las mujeres llorar y a Villena, 21 de noviembre ios. hombres enmudecer de respeto y de, amor hacia el gran paladín, ya en las estrellas. El cortejo asciende por la calle Antigua dé las Animas y penetra en él templo gótico dé Santiago. El funeral solemne es un alto en la, ruta, ¡impregnada del rtiejor simbolismo. Santiago, -hispanidad de hispanidades, -es su patrón, y en la Alicante 21, 9. noche. Con la carretera, cubierta de mirto y de ñores, salió de Elda fachada recia, ennegrecida por el fuego la. comitiva fúnebre que conduce los restos sacrilego, inconmovibles de grandeza a pede José Antonio. El vecindario acompañó sar de todas las barbaries, figuran los escu a la comitiva hasta cuatro kilómetros más dos y las enseñas más rancios de la Patria. allá de la ciudad. Tres kilómetros antes del 3 1 te. miplo se abarrota y por las bóvedas. E pueblo de Sax recibió el féretro la repre é crucería y la espira secular y fuerte? sentación de Granada, de la de Jaén, que de las pilastras salomónicas, asciende en se había hecho cargo de aquél seis kilónube densa el incienso ritual. metros antes, de la entrada de Elda. Las gentes vibran de dolor y fe. El temPasa el cortejo entre filas de antorchas. pla calla. Silencio. Por todos los caminos acuden las gentes para presenciar el desfile. A las cinco cuarenta y cinco dé la madrugada, con tros A la una y media, frente á la casa de la. horas de adelanto sobre la prevista, llego. Falange- -crespones negros- y. balcones iñula peregrinación al pueblo de Sax. dos- Granada, entrega a Málaga el. precioso despojo, entre rumor de pasos y toques de campanas! Bajo los. ramoá espesos de flores frescas que un avión, abriendo surcos de destreza por el azul del cielo, Sáx 2.1, 10 noche. Centenares de falanlanza sobre el cortejo, el jefe provincial dé gistas con antorchas sé sumaron a la cómU Granada se dirige al de Málaga, camarativa. Han acompañado también los restos, da Prieto Moreno, y, con voz emocionada y hasta Sax, las milicias de Petrel: Cuatrofuerte, pronuncia: ¡José Antonio! y el cientas antorchas alumbraban el camino a. último responde: ¡Presente! Después se seguir, -que, a pesar de lo intempestivo de fija el- hito de mármol negro. El clero sela hora, se halla bordeado por numerosos guidor de la Cruz de las Navas, jerarquías campesinos con sus familias. y, equipos de Milicias. de Málaga son los A las cinco y cuarenta y cinco minutos nuevos custodios, hasta que, más arriba, de la mañana hace su entrada el cortejo en el paso del monte, bajo una tarde blanen- Sax, siendo recibido por la población ca y azul, de extraña primavera fría, se engalanada y el Clero, que rezó un responrealice, con el mismo rito, un nuevo relevo. so y un rosario, acompañado por la totali- La comitiva en marcha asciende el flandad del vecindario y elementos. que forman, co de la montaña con gravedad- solemne y la comitiva fúnebre. Después de invocarse se. pierde de nuevo en los caminos eternos: el nombre de José Antonio prosigue su y universales de la vieja España. marcha el cortejo, acompañado durante un A las seis de la tarde, ya la noche subibuen trayecto por la mayoría del vecindada, Málaga entrega á Cádiz el cuerpo de rio, -MENCHETA. José Antonio. Y a las diez, encendidas las primeras hogueras que vigilan la calle de Vinalop y a la altura de la luna y de los Villena 21, 10 noche. A las once menosluceros, Córdobh. se hace cargo de las ancuarto de la mañana de hoy entra él fúnedas del paladín. Es una procesión de corabre cortejo en Villena. La ciudad está cuzones que preceden; llevan y siguen al de bierta con crespones negros, é- locados ei aquel que latió por. España con la emoción extraordinaria cantidad en balcones y. venmás viva y la mayor hondura. Sobrecoge tanas. La gente se aglomera en todas laá el sonido de esos pasos de marcha en abcalles y se oye constantemente la invocasoluto concierto: de ritmos. Marcan la dic ión, repetida por miles Se voces, de José mensión de la distancia desde e l m a r de LeAntonio. ¡Présente! -Las milicias de la ciuvante a la gloriosa ñibrieá f élipeña de El dad y pueblos de la comarca cubren la Escorial. Emociona y sorprende. Es que la carrera en tres filas. Se celebró un funeral destreza, amor y dolor comienzan a asceny se entonó un solemne responso. der, tomadas por la mano, la. gran cumbre A las tres y diez de la tarde sigue su española. -y marcha el cortejo, escoltado, por. toda, la El cortejo por tierras de Levante La comitiva fúnebre sale de Elda Hitos y viaje El paso por Sax entre luces de antorchas Solemne funeral en Villena