ABC MADRID 25-08-1938 página 1

C Maériéf 25 de agonfo é 1938 MliiinMiiy mn i i i I I I I m- -W W- w S U S O R I P C I O N mt AÑO XXXIV. NUMERO U. Q 17. REDACCIÓN Y ADMINISTRACIÓN. SERRANO, 61. TELEFONO 51710. APARTADO DIARIO AL SERVICIO DE LA DEMOCRACIA DE CORREOS NUM. 43 LO Q U E H A N A P R E N DIDO B I E N LOS E S P A ÑOLES ANTIFASCISTAS Sia ninguna Taiiidad, sin cultivar el tonto exMMciojitsiiio de 3o s que Toccaii a cüífio sus aciertos interprerati t o s podríasnos i r reprotiiicieiííto alioi a tocia u n a serie d e artículos editorJales ai areelílob eii nuest r a s cotaiííiías íliirante el vnrso d e Jit uei r a seguros de su ríirieii fl? ncltialiilati. Seguros tajiibiéii, jmr o ra p a r t e tl que aeaso e s t a r í a n lioy p. i; is i rifijíulos toclaYÍ; en ÍÍ- 4 s ealidad españiílrx qx lo estiivieroii pQr la techa, do su puMieacíóií. Concretamente no ro; crimos en c te caso a c n a n t o iicTanios Cje ito s- oliu c In imiíltií! política del anti a -cismo e pa lol y Mtln C bus repercusiones c h tlu tie la I- -púMica, que es t a n t o COKÍO n! a úh eec utit de g u e r r a p o r eiiyo Í; O bc li iü. -i el destino d e E s p a ñ a C Jienios dielío, I ÜI ejcMiplo, que Ja eo: inmk! ad y la st. iifl rJilaií antifascista ante 3: errií y paví ía g oeara, n o podían depciuler 5 e 3 a pju íicipaciones clss ceta: 3 iisie le tiivi -scn en Ja forlaacióii miáisíoriai upTiMleaíia; ciíaiido S eguranaos qvo la iinitlad del anílfascKuio español liaMa üÍJic- pri- bacío lo- c n a d r c í ele lob partidos y de la Shic ieales pai a Piür a coiiFertii se cn feuí msmio de miiflcaeJóii clir e c í a m e n t e pracíJeaclo por los e- sisaiíoles (seles g, la libertad y a la JiKlepeiiíleneia cic MI p a t r i a y oiic ineimíbía 3 1; Í orí, anÍ 7- aelone, condiieíFse en pleno onoeimienío le esto l i e d l o cuando seAalnnios! a aKsUteucia ai 5ol JÍerno legítimo d e K s aña como un debei q n e no eníana fie o ii; aeiones ele pariiílo o g r u p o ni d e fóromlari laíiraílaí por ninguno le ellos, n i cíe api o S? aeiones ine no i! ece ta, sino que titiie sn e- Kistejic a, jnsíificíioión en Jas t b! 55? t e oiie- rlirceíah Icl ciud a d a n o p a r a con el E- tatk) í oaiído licnio í t r a t a d o estos í inas- -pTímcros e i nneslfa permaixentc pii- ocupact- óa- y ci aníio rte i l j u a n e r a loi- orientadlos eia nr c %l ro iwicio. estálsajiios scíjiirm ele raantesievnos eii la lirfectrlz jne- dii ar de la lealif aíl efpañofa. Hoy lieiie aquella serrnrklad íocla. ía ro: u ro i3 clones que lia sido capaz de tlamof la c 5: crlencia. P o r eso qnc poíl 5 ía i os reproducir aliora toíl? n n a serie tie artíenlos editoriales, apareei los en niie. íras colnmnas clmramíe el ciwso le la g: i ejT. -i, sin cJuila sob r e su eficlcníísiTiTa acíF. aiitíafl. No queremos rc- iav n a d a a la iníSaencla qtie iiaya podido ejei cei rjohre la mentali ciad y el sentimiento de lo aniijía ícistas es pañoles, p a r a 11 c varíeos Á esta depuración de s u ser político, el coisrcncbn mto de qiíc Isac e n Iioy u n a guerra q ie, ínndanienlalnicnte, 110 se c esenTnel- f cji torno a mal i aclones políticas o sociales: ¡00 en roíición úr- la iníJepctMleneia le sn paíria. P e r o no es nienor l a atriíJHÍMc a ol o roua cncunlento cnjif í Sco; q u e liicliim v. o j a? for Jo r. a. -T iracío. síes m á s i r a a s infcría w en c iúcní jír i; Taiiiático ele c a d a imo. PÍ O no? D -piTacH. p. es mínísnas, ja lograiln- y ne iK neii m pelig r o l a p r o p i a esencia tie la relseilóii. H e laos vuelto a l a etapa de la hibtorla leí m u n d o e n q u e lnclial? an los piieljlos p a r a eonijnistar, ¡p a r a conquistar! la libertad IncllvMtií l y ios dercíAo- del ííotnln c. Xada- más y p a d a m e n o s qw eso. Con íina ventíija iii- í é d c a q n e esa íi t ers a se liaco lK y, siendo tíbúos, solidarlo? -de un K iado ivtíihm íjjie sn janíoi hkid y su ptMÍei cos i dNlInte totalaaente dKtinta, a h a c e r una revoiuclÓB Y esto es lo iie ya h a n cojmjJ cnrlido Men los españoles anlü í sei- la- s. V l o qnc origina ese clima uolítico ¡me reitci adáii cní destacamos. Madrid: un mes, 3,50 pesetas. Provincias: tres meses, 12, América y Portugal: tres meses, 12,50. Extranjero: tres meses, 30 ptas. Numero suelto, 15 céntimos m comisario inspcíctor del Ejército d e l Centro, señor J i Vu a. iniíjoné al cojniíáario Molina la medalla d e Snfr i alientos í or l a P a t r i a otorgada i or el ÍJobierno al vet e r a n o antifascista. (Foto Albero y S govia. LA TRAYECTORIA POLITICOMILITAR DE EUROPA Y LAS MANIOBRAS ALEMANAS ¿ITcista dónde QS cfecth a la apai- ente serenidad con q. ue üon t bc; ei uiaa dctíd Iioiidres y desde Psirís las maniobras a l e m a n a s Uainadas de otoño? y. obre todo, ¿hapta dónde es efectiva J a apai cnto ei enidad con que son observadas desde I- Londres? H a y que hacer esta sg. lvedad, P e s d e luego, portiue parece m á s raciünal -y así se ejigo. ñan no pocos comentaristas- -suponer yue sea en París, pendientes los hombres responsal) Ies de la seguridad francesa de u n a movilización que accibará proyectándose sobre la región del Rin, doxide los nervios p u e d a n bailarse sometidos a maj or tensión, y sujetos a m á s profundas emociones. Y esto es cierto. Pero no impide ciue sea en Londres donde radica, por ahora, el punto de mayor sensibilidad. En cierto modo, puede asegurarse que las responsabilidades contraídas por $1 Gobierno inglés- -todas ellas ineludibles- son muy suptej- iores, en lo que a las p o sibles consecuencias de la movilización a l e m a n a se r e ñ e r c a las que pe an sobre el Gobierno de ii i- ancia. Jís íácilniente comprensible. Pesdie París solo puedo estimarle una necesidad, nunca g r a t a que las maniobras a l e m a n a s obliguen, por lo menos, a qxie el Ejército francés tenga que m a n i o b r a r tambiém por los Departamcnlos del Nordeste, cualesquiera que puedan ser iPiS consccuencfias de una dctcrmlnacióu de tal naturaleza. Desde Londres h a do estimarse esta n ccesidad; pero t a m b i é n o i r a que el Gobierno inglés, n e c c a r i a m e n í o adscrito a cuallquier iniciativa de aquel 5. f ncro- -y que rsn sería adoptada en Parí- sin previa contf- ulta- está (ibr. sMdd a pn sionar eil Berlín, t a n t o como cn Pras a- -jmra esa está, allí lord Ruufi i al objeto do evitar que la Imprudcncif- -por lo monos lai imprudencia- -aleiii voque una situación dentro de la cual sería ya muy difícil evitar lo a Lo jvrave cuando se moviliza, siquiera sea en el e n t e n d i d o oficial de u n a s nu no es la movilización en sí, sino el estado de á n i m o de recelo, de pÁiáco si quiere, que ella m i s m a provoca, y en torno al cual ya nadie puede prever los acuntecimlentoR m á s inmediatos. Cualquiera puede ase- íurar lioy qUe ni F r a n c i a ni Inglaterra- -acilso tampoco Alemania, nulo pr! pivia b l u f f militar que a su acción- -quieren la guerra. Más a u n que h a r á n c u a n t o eí ííé ÍÍÍI sn mano i i r a evitarla. P e r o no es éste et problema que ha llegado a lAnlearí e en las ultimas fechas, sino otro m u y distinto y Que pupdd rehumirse así: Bl el estado de general, el ambiente, la intranquilidad de s uerra, siguen siendo los quft hoy son, y a ú n se a g r a v a n por obra de la iinprudenida alemana, ¿p o d r á el Gobir- rno ingiés impedir qu? o c u r r a lo i r r e p a r a b l e? É s t a es la verdadera cuestión en su fundr. niento. Ya no cuenta lo 4- tuo cada uao quiera, ni lo que cada, uno se propon: a. Se h a ido m u c h o más allá. Lo qau i m p a r t a es lo que es da u n o pueda hací r cn el momcnio decisivo para impedir que ocurra aqueilís