ABC MADRID 29-03-1938 página 2

Madrid, 2? de marzo de 1938 S U S C R I P C I Ó N A Ñ O XXXIV. NÚMERO 10.866. REDACCIÓN Y ADMINISTRACIÓN: SERRANO, 61. TELEFONO 51710. APARTADO DE CORREOS NUM. 43 Madrid: un mes, 3,50 pesetas. Provincias: tres meses, 12. América y Portugal: tres meses, 12,50. Extranjero: tres meses, 30 ptas. ÓRGANO DE UNION REPUBLICANA Número suelto, 15 céntimos Nos ei- eenios oMigaelos a registrar- -satisfecíios- -las reacciones que se advierten durante esíos días en amplios sectores del anitifaseisnio español. ¿Las esperábamos? Las esperábamos, desde luego. X no necesitaremos escribir muchas palabras para explicar el por qué. Son la exteriorización- -y esto os ledo- -de un estado de ánimo que nunca dejó de existir. E n el transcurso de la guerra han sido muclias- -demasiadas- -las oscilaciones que registró el frente antifascista. Oscilaciones de superficie casi siempre. Pero, más de una vez, oscilaciones d e fondo también. Discrepancias, rozamientos, recelos. Todo ello por otea de un soló agente: la política, de partido o de grupo. Donde la hubo y cuando la hubo, el frente antifascista osciló. Donde no la hubo nunca, el trabajar y el combatir tuvieron siempre el rendimiento adecuado. Quiere decir esto qué mientras el vínculo fuerte, indestructible- -la necesidad de hacer la guerra y de ganarla- -ocupó por manera exclusiva las preocupaciones dé todos, el frente antifascista se mantuvo sólido y compacto. Que las reacciones ante una o varias políticas de partido o grupo fueron una cosa, y otra muy distinta las provocadas por la guerra en sí. Que la. reacción ante los episodios de l a guerra- -tanto más cuando fueron más adversos- -tuvieron siempre tónica idéntica; decisión de unidad y de lucha hastia el fin. Decisión de trabajo en máximo rendimiento. La guerra es el vínculo: más fuerte a mayor dramatismo, más inquebrantable a mayor adversidad. lodos, combatientes y trabajadores, tenemos contraída una tremenda responsabilidad con el pueblo español. Tanto como decir jué la tenemos contraída con nosotros mismos y con aquello que aún vale m á s con el porvenir de España y de las nuevas generaciones de españoles. La tremenda responsabilidad de los combatientes- ¡no lo olvide nadie! -tiene, sin embargo, consecuencias que no alcanzan al trabajador de la llamada retaguardia. No necesitamos puntualizarlas aquí Sabemos todos también que oscilan entre su cumplimiento del deber o su castigo. Pero la tremenda responsabilidad de los trabajadores de la Samada retaguardia es de tal naturaleza, que ninguna deserción dejará impune. Como que habremos de castigarla hoy nosotros mismos o será el enemigo quien ejerza mañana su represalia. Y ¿podemos dudar, puede dudar nadie, entre una posibilidad y la otra? Las dos centrales sindicales que el pasado domingo se manifestaron conjuntamente en Madrid y con un claro sentido del momento, de la responsabilidad y de su misión lo hicieron, acusan una reacción tan alentadora contra toda flaqueza a la espalda de nuestro Ejército, que no deja opción para aquella duda. Su proclamación es concluyeme: ni flaquezas, ni deserciones en el trabajo. Y también nos sentimos oblig a d o s a registrar- -satisfechos- -esta misma reacción. Satisfechos provisionalmente. Pero seguros de que habremos de estarlo por manera completa y definitiva. No es el primer caso que se produce. Pero en el pueblo de Poyos, donde un grupo de metalúrgicos acaba de dar lecciones de españolidad, h a brotado oportuna l a gran ense fianza plena de realidades. Que toda l a España libre sea una proyección ampliada del espíritu de Poyos. Que el sacrificio de hoy- ¿porque n o otra cosa significa- -estte Ja LA CAMPAÑA CONTRA LA POLÍTICA LA ESCLAVITUD DE MAÑANA SE IMPIDE CON DE NO INTERVENCIÓN ENTRA EN SU PERIODO CULMINANTE V. EL SACRIFICIO D E HOY Entra en su período culminante la. campaña que viene practicándose en Inglaterra y en Francia contra la política llamada de no intervención. Se hace muy difícil juzgar ahora mismo sobre la capacidad de su eficacia. Y aun discriminar la. que aisladamente puedan tener, en si mismos, los movimientos que en Londres y en París se están produciendo. En Francia lleva el peso de la ofensiva la Unión Parisién de Sindicatos, apoyada por un amplió sector del partido socialista (el identificado con la tesis de Zyromsky sobre la guerra de España) y por el partido comunista. En Inglaterra coinciden laboristas y liberales. Y tiene tal profundidad el movimiento inglés contra la no intervención, que ha producido ya una cituación política muy pocas veces, y sólo en ocasiones gravísimas, registrada en la historia de Inglaterra: que las oposiciones -como ahora ocurre- -se concierten para una lucha a fondo contra el Gobierno en cuestiones tan delicadas y que de tal modo demandan la mayor cautela, como las concernientes a la política exterior. Sobre todo, cuando ese concierto se Hace nada menos que con este lema: Llegar a tiempo para evitar la catástrofe a que nos conduce el Gobierno. Pudiera parecer, conocidas las dificultades de diverso orden; -interior no pocas- -cuya acción embaraza la marcha del Gobierno francés, que contribuyan estos movimientos a hacer más embarazoso su trabajo. Y no ocurre así. La situación de Francia va agravándose de tal manera cada día, por obra de la invasión de España, que es precisamente aliento popular, decisión popular, lo que su Gobierno necesita para poder sincronizar su conducta con el curso de los acontecimientos. Y otra ayuda requiere su situación: la material y moral que pueda llegarle desde Inglaterra. Y en la posición actual de uno y otro Gobierno- -el dé Londres y el de París- tienen un sentido inequívoco las entrevistas que estos días celebran jefe del Gobierno n 1 francés y el ministro de Negocios Extranjeros con políticos ingleses, como Lloyd George y Winston Churchill, cuya trayectoria y cuyos puntos de vista sobre la guerra de España son claramente conocidos. Por si fuese poco- -y aunque más discretamente- se registra la presen- cía en París de míster Anthony Edén. Otras: entrevistas, a las que asistió un caracterizado representante de la República española, se han celebrado en los últimos días. En plazo no muy largo podremos saber, pues, hasta dónde llega la elasticidad de resistencia en la. política dé no intervención. Registremos hoy la envergadura de la ofensiva que contra lia se desairolla. -r- Juan DE AGTHREE. EUROPA ANTE EL PROBLEMA ESPAÑOL cuestión del Mediterráneo, y da informes escía- ritatl de mañana. PREOCUPACIÓN UNÁNIME DE LA relativos a las negociaciones del Gobierno PRENSA INGLESA... de Chamberlain con el de Müssolini. Londres 28. La atención de; la Prensa La Prensa derechista refleja el inglesa se concentra esta mañana en la que el conflicto español termine deseo da prontamente, para de esta forma evitar conflictos internacionales que están en el ambienLA CARICATURA DEL DÍA te. En los periódicos derechistas se expresa que Francia no tardaría en adherirse al acuerdo angloitaliano, lo cual, desde su punto de vista, alejaría el peligro de guerra, de igual modo que ha desaparecido al liquidarse el amenazador asunto de Austria. La Prensa liberal, por el contrario, duda de las promesas italianas, y cree que el acercamiento angloitaliano servirá, a Mussoiini. para que tengan más éxito sus intervenciones en España y sea un mito la conservación de la paz. El Times vuelve a tratar de loe bombardeos sobre poblaciones abiertas, condenándolos por inhumanos. El News Chronicle publica un artículo, u en el que dice: Las victorias del. rebelde Franco san una cuestión de muchísima importancia para Müssolini y Chamberlain por las siguientes razones: porque Müssolini quiere terminar el acuerdo con Londres antes del 3 de mayo, fecha de la visita de Hitler a Roma, y porque Chamberlain desea que las tropas italianas se retiren de España antes de la firma del acuerdo. En el mismo periódico se publica otro artículo, firmado por en el que se muestra inquieto po. r la acogida de la Prensa italiana a las palabras de Chamberlain sobre Italia, y reproduce la parte en que Gayda se felicita en el órgano de MussGlini de que Chamberlain haya reconocido que Italia seguía fiel a los comproi Los trabajadores ingleses tienen la misos del Comité de no intervención palabra! Agrega que se eanrpréiwiei tal i