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ABC MADRID 28-12-1937 página 2
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ABC MADRID 28-12-1937 página 2

  • EdiciónABC, MADRID
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Aadrid, 28 de diciembre de 7937 ar S U S C R I P C I Ó N a kÑO XXXIII. NUME gg IO 10.808. REDACCIÓN r ADMINISTRACIÓN: 1 M i SBSfc raü JÜ í 7 5 ERRANO, 61. TELEFON O 51710. APARTADO T JT ORGA Madrid: un mes, 3,50 pesetas. Provincias: tres meses, 12. América y Portugal: tres meses, 12,50. Extranjero: tres meses, 30 ptas. DE CORREOS NUM. 43 N O DE UNION REPÜSLÍCANA Número suelto, 15 céntimos A OTRA VICTORIA DE TERUEL LA CARICATURA DEL DÍA I EL ITALIANO DEL CARRO El periódico de Roma II Regirne Fascista publica una crónica, fechada en San Sebastián y firmada por Giovanni Artieri. El plumííero italiano conmemora ia muerte del periodista Sandro Sandri en China, durante el bombardeo del cañonero norteamericano Panay He aquí cómo presenta al heroico Sandro Sandri Sandro Sandri quería la guerra y odiaba, como todos nosotros, los perfiles integres do las casas sobre las que no había caído una sola bomba o a las que no había llegado un cañonazo; odiaba las campiñas en que no se encontraban soldados; los muros sin sacos terreros; los tejados sin fortificar, y las ventanas sin ametralladoras. En esta guerra de España, Sandro Sandri habla encontrado lo Que quería. Había vivido las principales combates de Irún y San Sebastián, con su fusil ametrallador, y quería entrar en Madrid en un carro de combate. El panegirista añade que este periodista legionario de Mussolini había pedido permiso para entrar en Madrid con los tanques que acompañaban a los marroquíes hace un año. En efecto- -confirma 11 Re- gime Fascista -los tanques italianos iniciaron el asalto a la Ciudad Universitaria, en la calle de Isaac Peral. Los defensores de Madrid no habían sido organizados todavía, y bastaba un solo regimiento para acabar con la defensa de Madrid. Pero los carros italianos llegaron hasta la Puerta del Sol, quedándose solos porque las demás tropas qu e tenían que entrar se negaron a avanzar. El periodista que tiraba con, de, en por, si, sobre el carro, pues el e xtremo queda sin aclarar, no sabernos cómo se las arreglaría para retornar de la Puerta del Sol a los dominios de Franco; puede que lo hiciera en el mismo carro en que entró, y que no vimos nadie, a pesar de lo céntricodel sitio y de que allí estaban los madrileños esperando a que Mola se sentara a la mesa preparada al efecto con la taza de café. -Destacada, bien destacada y con teda jusicio, está ya la victoria militar de la liepú ¡3 ¡ca cu Teruel. Lo mejor de ella, la técnija de quienes la concibieron, prepararon y lírigicron y el valeroso ardimiento de los ibatientes que la ejecutaron, ha dado limpiamente en el blanco de la emoción popular española y puso rúbricas de eficacia a un lado y al otro de nuestras fronteras. X una emoción inigualable- -de ello estamos segisros- -le habrá devuelto su más para, resonancia: la de aquellos españoles Y antifascistas- -doblemente españoles- -que, orzados al silencio, inermes y cen su vertiadera vida limitada a la intimidad de los ontimientos, viven aún su vida material en! a España invadida. ¡Cósno se les habrá encendido ol espíritu en el reanimo de su íe y fie su esperanza inquebrantables ante el s; iccso de Teruel! Pero hay otra victoria para ía República en la. capital aragonesa: su victoria civil. 5 cruel fca servido para reavivarnos el reÍ lerdo bárbaro y terrible de Badajoz, de Toledo, de Málaga, (le Irún y de Bilbao. Si recuerdo bárbaro y terrible de las inmoJnciones en masa, de las limpiezas sin freno, ds las ciudades entregadas al sarjiíeo al terror, de las ocupaciones extranjeras ejercitadas espeeialísimaaiBnte sobre las ririuczas naturales. Y, con el recuerdo, la satislacción- -basta el orgullo- -ds ser españoles y republicanos. El Ejército de la República ha entrado váetcrlcso eu Teruel. CombatieEdo a sus combatientes. Y, siguiéndole los pasos, toctos les demás instrumentos de función ííeí Evtatlo republicano. Donde había enemigos combatientes- -y mientras los íiubo- -el Ejército estuvo íiHí para cumplir su misión: imponer por ía fuerza de Jas armas la autoridad legítima de la República. Por donde lx d desapareciendo el combatiente enc- migo, entraron, ca plenitud de función, la Justicia del Estado republicano, representada por sus más altos magistrados; los servicios de orden público del Estado republicano; sus servidos de organización económica, de sanidad, de trabajo y de reconsí facción. El Ejército cumplió todos sus clcfc: rcs: devolverle a España un nuevo trozo lcl tciTiíorio nacional. Ü continuó su íaT roa. Los órganos de gerencia de ¡a vida civil ocuparon inmediatamente sus puestos do dirección y gestión eobre lo que a España le era devuelto. X n instrumento del EsT tado, el militar, reconquistó tierra española. Otro, el civil, terminó la rccon. nista. haciendo y republicano lo cue, neciileiiialimeníe, íiabír dejado de serlo. Movimiento lógico, r- cnciHo y hasta normal. Oicí to. Es la más pura ortodoxia eu postulados cío libertad y democracia. I- ero ¡iay ocasiones en que lo lógico, ¡o ccnciiio y hezia lo nonnnl son lo más complejo y lo más difícil. Ocasiones precisamente como ceta en que toíta esas realizaciones rtcl 3 í 7- i? o rc iiTjíinap. o y hasta todos los inc Irmrsciitos Que Ir: s ejecutaron, lian tenido auc ser creados y organizados durante diecisiete meses tío inquietud terrible y mientras toda la capacidad del pueblo español y de sus dirigentes estaba lanzada a la insaciable tarea de combatir- No es posible Jiacer paralelos, ni son aceptables aquí las comparaciones. Sin embargo, PALABRAS DE PRIETO ¡Vencimos a pesar de los elementos naturales! la República española, el Estado republicano español, puede lanzar boy a la expectación del mundo, y aun a la tibieza e incertidiimbre de Gobieraos incrédulos, el nombre de Teruel, proyectándolo, para mejor contraste, sobre la pantalla de Badajoz, de Toledo, de Málaga, de Bilbao... EL HUMOR AJENO LOS F A C C I O S O S S I GUEN ORGANIZANDO LA VIDA MADRILEÑA Los generales rebeldes continúan organizando íebrilmente la vida de Madrid... para cuando entren, que no sabemos si será 1 ara la Pascua o para la Trinidad. Después de nombrar Concejo. Directiva de la Asociación de la Prensa, Junta depuradora, tío los periodistas, etc. etc. la han emprendido con los Sindicatos obreros. Copiamos de -F. E. de Sevilla: Central nacionalsindicaiista. -La Delegación sindical de Madrid publica la si- guíente nota: Habiendo quedado constituido el Sindicato de la construcción, afecto a esta Delegación, con domicilio provisional en San Sebastián, recordamos la obligación ineludible que tienen ios madrileños de ingresar en los Sindicatos verticales de la reducción, cuborclinaJos a ia disciplina de nuestro caudillo y jefe nacional. Se convoca a todos los productores madrileños para que envíen su adhesión dentro de la mayor rapidez, por no admitir calculistas y rezagados en la gran tarea para la construcción económica de la España que amanece. serán nunca capaces de cumplir un compromiso. (De Pravda de Moscú. RELOJERÍA. Fuencarral, 112

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