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ABC MADRID 14-07-1936 página 39
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ABC MADRID 14-07-1936 página 39

  • EdiciónABC, MADRID
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CICLISMO Gañardo y Berrendero llegaron a Aix- les- Bains en el mismo tiempo que el vencedor de la sexta etapa, Meulenberg. Ezquerra sigue a la cabeza de la clasificación del Premio de Montaña (Servicio especial de la Agencia Noti- Sport para Á B C. Aix- les- Báins 13. Después de la sexta jornada, todos los españoles lian dado sensibles avances en la clasificación general. En verdad, qué algunos dé ellos se han beneficiado en parte de los últimos abandonos; pero también su adelanto se ha debido a la aceptable carrera que realizaron en el trayecto, desde el balneario de Evian hasta el de Áix- les- Bains. Por una paradoja análoga a las que se registran con frecuencia en las pruebas ciclistas, el routier que más se ha destacado en la jornada de hoy ha sido el menos beneficiado al final. Nos referimos a Federico Ezquerra, que ha revalidado su extraordinaria calidad de trepador al ser el primero en el puerto puntuable del día: el col de Los Arávis. Luego hablaremos de la forma en que el vizcaíno realizó su hazaña. Por ahora queremos consignar que ha avanzado tres puestos tan sólo, debido a una desgraciada caída en el descenso de la montaña en que había sido líder al coronar. El resto del equipo español ha mejorado sus posiciones sensiblemente. El más retrasado, Molina, ha ganado siete puestos. Alvaréz ha conseguido adelantar ocho. Cañardo, nueve, y Berrendero, que también ha confirmado hoy su clase de escalador, once. La labor de Ezquerra en la subida de Los Arayis le vale permanecer a la cabeza de la clasificación del Premio de la Montaña. Otros dos españoles se distinguieron en esta subida: Molina y Berrendero, que llegaron a la cima en tercer lugar, a continuación de Silver Maes y acompañados de los buenos escaladores belgas Vervaecke y Neuville. En la subida al col de La Tamie, no puntuable, las posiciones de los que marchaban en cabeza se mantuvieron. Entre ellos figuraron en puesto de honor Berrendero, Molina y Cañardo. Ezquerra no pudo participar en la lucha de esta subida por haberse rezagado a consecuencia de la caída que dejamos hecha referencia. También Mariano Cañardo, que continúa siendo en la lista el primero de los españoles, ha hecho hoy una excelente carrera, sobre todo al tirarse valientemente los descensos, y le ha cabidp el honor de llegar a Aix 4 es- Bains, en el mismo tiempo, que el primero, Meulenberg, y acompañándole en el ex cequo honorable, dé- novenos, su compatriota Berrendero. v Siguen produciéndose bajas en la lista, que ya no comprende más que 75 hombres. Antes dé partir de Evian se da cuenta, de que se ha retirado el turista Beck y de que sólo- toman la salida 78 corredores. Después, en el curso de la prueba, abandonaron el- afamado trepador francés Vietto, considerado un día como el rey de la montaña que corría este año como turista, y que se marcha, seguramente decepcionado de su forma actual. El también turista Beliart y el germano Bautz, al que, cuando se hizo la selección del equipo catalán, se nos hab i presentado como un fenómeno. Tiene interés echar una mirada a la clasificación general y, como consecuencia, a la de naciones. Bélgica continúa en el primer puesto, a poco menos de dos minutos de Francia. Mas lo que ríos interesa destacar es la buena posición del equipo mixto: Luxcmburgo- España, que en tercera posición, tienen un retraso de unos ocho minutos con relación a Bélgica y de seis respecto a Francia, dándose la circunstancia de que los tres hombres que ahora puntúan para el equipo mixto hispanoluxemburgués ocupan en la clasificación individual lugares tan destacados como el cuarto, séptimo y octavo, manteniendo un estrecho codo a codo de puestos y segundos con los demás rotüiers enclavados en la primera decena de la lista, y que si la suerte sigue acompañándoles pueden dar lugar a un vuelco de consideración. La sexta etapa se lia caracterizado por su rudeza, habiendo tenido nosotros la satisfacción de ver cómo los españoles seguían el violento tren que se marcaba. Para el equipo i elga la jornada no ha sido precisamente de éxito. Le ha salvado tener varios hombres de repuesto en los primeros lugares para poder contrarrestar el retraso de R. Maes y Dañineéis. Además, la indisciplina sigue teniendo algunos brotes. Así hoy podemos ver como vencedor a Meulenberg, el solitario, al que se había relegado a la obligación de actuar de servidor, sin. discusión, de sus compañeros. Pero el muchacho, que tiene clase, como lo ha demostrado hoy en el sprint finalj ha querido hacer su hazaña como hace unos días Wierinekx. Vio dudoso que su compañero Neuville- -el hombre más regular y peligroso por ahora del equipo belga- -resultase vencedor en el violentó sprint y prefirió ser él d que ganase i en la etapa adelantando a Magne y Mersch. Wierinckx, con Siiver Maes, también estuvieron a punto de la llegada. La lucha para el puerto de Los Aravis se inició en cuanto se presentó a la vista el pueblo de Rumilli, colocado en las estribaciones de aquel col. Atacaron en primer lugar Salva- dor Molina, el voluntarioso muchacho dé Valencia, y el holandés Van Schendel. En las primeras rampas, de poca dificultad, el levantino consiguió distanciar al holandés. Llegó a tener treinta metros de ventaja el valenciano sobre el grupo inmediato formado por Vietto, S. Maes y Gianello. Entonces comenzaron a trepar Ezquerra y Berrendero. No muy lejos venían Magne, Cañardo y Alvarez. A la altura de Glusa, en donde Los Aravis empiezan a ofrecer pendienets violentas, seguía en cabeza la pareja Molina- Van Schendel, seguidos de cerca por los dos mejores escaladores belgas: Vervaecke y S. Maes, que querían sacarse hoy la espina del bailón de Álsacia. De pronto, con coraje, Jízquerra dio un empujón a su máquina y logró separarse de los que le acompañaban, Siguió apretando y pasó a Verva- ecké. Entre tanto, Silver Maes había adelantado a Molina y quedó entablado un cerrado duelo entre el favorito belga y el famoso escalador vizcaíno. En un dem arrdgefinal, de extraordinaria energía, Ezquerra sobrepasó a Silver y llegó a la cima el primero, con cuatro segundos de ventaja sobre el belga. El buen tiempo reinaba cuando comenzó la carrera, pero para, que la etapa de boy no estuviese falta de las molestias que han teni- do las anteriores, también al final la lluvia molestó a los roútiers. Hoy, buena jornada para los grimpeurs del equipo mixto, ha sido el preludio de la que tendrán que librar mañana. Les aguardan los famosos, y temibles cois del Galibier y del Telegrapli. Hace dos años, Federico Ezquerra coronó el primero el col del Galibier y batió el récord de la subida, establecido desde antes de la guerra. Esperamos que mañana repita su hazaña. Recordemos, por último, que en la séptima jornada, hasta Grenoble, que. se disputará en él día. inmediato, encontró la muerte al año anterior el infortunado español Francisco Cepeda Lo que fue la carrera Repuestos en sus fuerzas los corredores después del día de descanso tenido ayer en Evian, a la hora de salir el público se aglomera en las inniediaciones de la meta de partida. El. comienzo de la prueba lo hacen los routiers con tranquilidad; la mayoría se reserva con vistas a los cois. Hay unos conatos de escapada que no son a fondo y que no prosperan. Se inicia la lucha al llegar a Los. Aravis. Es coronada en primer lugar oor Ezquerra, y con relación a él se registran- los siguientes tiempos de otros corredores: a 4 s. Silver Maes; a 16, Molina, Vervaecke, Neuville y Berrendero; a 27, Wale; a 30, Gianello; a 44, Van Schendel; a 50, Vietto. a i m. 3 s. Ivon Marie, Mersch y Amberg; a 1 m. 30 s. Tanneveau y los hermanos Clemeins; a 1 m. 58 segundos, Grgac, Danneels, Archambaud y Venoverberghe; a 2 m. Funke, Magne y Kint; a 3 m. Cañardo, Alvarez y Mit houard; a 3 m. 30 s. Galateau, Speichér y Levei. Y después, con ligeros intervalos, los demás corredores. En el descenso se aprieta la marcha. A los pocos metros cae Ezquerra. Cuando se repone y continúa la carrera sufre un retraso que no ha de permitirle volver a tomar contacto con los del grupo de cabeza. Las. posiciones ya. ria. ri rápidáme nte. ¡Se distinguen Neuville y Archamb atid. Se corre a fondo para llegar en buena posición a Albert Ville, al objeto de iniciar la ascensión de La Tamie, que. no ofrece grandes dificultades, bien, colocados. Se forma un grupo que marca el tren, en el que van. Archambaud, Magne, Vervaecke, S. Maes, P. Clemens. B. érrendero y Molina. Cerca, viene también. Cañardo. Neuville, con Ámberg, Vervaecke y el yugoeslavo Grgac intentan una fuga violenta y logran adquirir, alguna ventaja sobre el grupo inmediato, en el que figuran. Archambaud, Mag. ne, Berrendero y Debruyckere pasa a estos últimos, y se pone a la rueda. de Néuvilíe, ísujefándolé; Y éstos dos hombres, con Pjerre Clemens, ruedan en primer lugar al pasar por. Anency. E s ahora cuandp se registra la baja áe Vietto, a la que siguen las otras dos mencionadas. Tambiéu Veryaecke intenta escapa y. es

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