ABC MADRID 14-05-1936 página 17

MADRID DÍA 14 DE M A Y O DE 3 9 3 6 NUMEgO SUELTO 15 CEJ TS. g g SUSCRIPCIÓN: MADRID, UN MES, 3,50 PESETAS. PROVINCIAS: TRES MESES, 12. AMÉRICA Y PORTUGAL: TRES MESES, 12,50. EXTRANJERO. TRES MESES, 30 PESETAS. REDACCIÓN Y ADMINISTRACIÓN: SERRANO, 61, MADRID. APARTADO N. 43 ABC Enlormaciones y noticias culminantes del presente número DIARIO ILUSTRADO. AÑO TR 1 GES 1 MOSEGÚNDO. N. 10.287 g g R E: G I M E N DE SlíLENClO -Sin motivo que lp justifique y sin la menor dificultad, por -parte de los que reclaman y de los qae ofrecen ritmo acelerado para la tarea legislativa pendiente, las Cortes prolongan hasta el martes la vacación que les impuso la crisis. Será en la Diputación permaReunión de los jefes de minonente donde con más expedición y corías con el presidente de las modidad obtenga el Gobierno la próCortes. Suspensión de sesiones rroga del estado de alarma. Y, a la vez, hasta el próximo martes 21 los partidos de la mayoría, los revoluEl primer Consejo de ministros cionarios principalmente, se ahorran el del nuevo Gobierno 22 enojo de votar, contra sus principios y sus predicaciones, una medida que En Francia se teme que la actitud de Italia tan sólo favorezca a siempre han condenado como abomiAlemania 30 nable. Verdad que a ellos ahora no les estorba, no les priva de ningún ejerLucha anticomunista en el Paracicio, y rriás bien los protege. Las traguay y la Argentina 40 bas que la Constitución opone a los reCañardo vence en la etapa Almetursos excepcionales, con el propósito ría- Alicante de la Vuelta a Esde que sean así, excepcionales e infrepaña Paginas deportivas. cuentes, han quedado en pura teoría y letra muerta. Las prórrogas pasan como una seda. Para eso hay Cirineos en las fáciles y obscuras deliberacio- mentó funciona. Debería inutilizarlo la nes de la Diputación permanente. El tribuna parlamentaria con la fiscalicaso es que desde la instauración de la zación amplia y eficaz que se impide a República, nacida de la protesta y de la Prensa. Desgraciadamente, no es así. la revancha contra una dictadura, lo Es mucho y de trascendencia lo que, normal en España es el régimen de ex- contra su deseo, tiene que callar la cepción. En todo el quinquenio han sido Prensa y lo que deja en silencio la deescasos y fugaces los períodos de ple- sidia parlamentaria. nitud constitucional, con unos u otros Gobiernos, derechistas e izquierdistas, aunque en éstos resulte más inconseTEMAS VARIOS cuente y vituperable tal política. Asi son, si asi os parecen La perpetuidad de la interdicción constitucional, si no se quiere que sea Mientras llegan ocasiones de copiar otras abuso de poder y hábito de arbitrarieRusia vamos imitando dad, supone la perpetuidad del des- cosas de Solamente que allí se sus diarios murales. colocan en orden. las escuelas y las fábricas, para que los es- acongoja de quien hizo caer a unos agentes de la autoridad, por ejemplo, o puso tinas bombas, o incluso cometió otros delitos comunes, pero conectados con aspiraciones de índole social carecen en la cárcel del confort a que tienen derecho. Ello no puede significar, naturalmente, que su sensibilidad no esté dividida en corPartimientos estancos. Que en los diez primeros años de régimen bolchevique fueran ejecutados en Rusia 1.700.000 rusos- -militares, sacerdotes, campesinos, obreros v empleados- no les ha arrancado l- a menor protesta. Que más cerca de ellos hayan pasado cosas a las que no es posible referirnos, les parecen reacciones naturales, pero que nunca comprenderán en el adversario. si, en nombre de un partido, tienen que opinar oficialmente, en una consulta para resolver una crisis, estos sentimentales opinan, como el comunismo lo hizo anteayer, que procede el exterminio de cuantos ciudadanos no esten afiliados al Frente Popular. Todo como una seda El martes nos lo decía, confidencialmente, uno de los diarios más calificados que sirven al Frente Popular. Como cada hombre de izquierda, por el hecho de serlo, puede aspirar justamente a regir un ministerio y a ocupar la presidencia, la dificultad provendrá de elegir entre tantas capacidades. Pero los que no sean elegidos hoy pueden serlo mañana, y ellos, desinteresados por naturaleza, disciplinados hasta fhrecer autómatas, esperarán tranquilamente. Ahora todo irá como una seda. Pero este panorama primaveral comienza a obscurecerse y el mismo diario nos lo advierte, a las veinticuatro horas justas de habérnoslo descubierto, en plena euforia. Si en la formación del Gobierno se hubieran producido discrepancias, no ya doctrinales, sino de índole personal, no esperemos que se produzcan escisiones gravísimas en determinados sectores, que tuvieran como consecuencia el levantar banderas o atribuirse jefaturas qué, de todos modos, serían efímeras e inconsistentes por su condición personalista. Nadie se declare tampoco vencido político para tratar de erguirse después en personaje. Parece que no todos tienen la paciencia, que les atribuía el citado periódico y que algunos no quieren esperar ni aciertan a ver esa floración de capacidades en competencia. Ni siquiera el aludido periódico debe de encontrarlas tan a mano, pues si quiere- creer que en la elección de les ministros existe un acierto técnico y político no debe lograrlo con la necesaria firmeza, ya que a continuación considera que es necesario, imprescindible, incorporar a tales funciones activas y técnicas a aquellos hombres que, aunque no aparezcan inscritos en organizaciones partidistas, tengan probada su capacidad y su ideología izquierdista en los distintos aspectos de la vida pública De este modo se evitarán ciertos retraimientos y, sobre todo, el espectáculo lamentable de la ineptitud Como una seda, verdaderamente. Pero los tres o cuatro señores aludidos deben estar ya ausentes hoy jueves del Paisaje idílico que el martes se nos mostraba. Lea usted ABC El abuso de poder aparece en la preferencia que los Gobiernos dan a la censura sobre las demás medidas de excepción, aun sobre las que sirven tontra la organización y la ejecución del desorden. Más de una vez- -no diremos ahora- -se ha mantenido el estado de alarma sólo para mantener la censura. El empleo de la censura- -nosotros lo sabemos y el público lo nota perfectamente- -suele exceder a los límites que le señala la ley, que son las necesidades del orden público, y cae sobre temas que, si pueden contrariar o desagradar al Gobierno, son de lícita discusión en cualquier caso, y claramente inofensivos para los únicos efectos vedados por la ley. No se tomprende que prevalezc. a este dañino Régimen de silencio cuando el Parla- tudiantes o los alumnos expongan sus observaciones o sus anejas, y aquí sus quejas v sus amenazas llenan las calles, impresas preferentemente en papel rojo. Son anuncios de huelgas, noticias de su solución, explicaciones que dicen ha dado tal o cual entidad para convencer a sus obreros de que no tenía la significación política que se suponía Modo discreto de que no olvidemos ni un momento que vivimos bajo itna República de trabajadores de todas clases. A estas noticias de puro interés sindical vinieron a juntarse pronto los anuncios de mítines y reuniones pro Thaelman o pro la supresión inmediata de la enseñanza religiosa. Especialmente los anuncios de actos en favor de las víctimas del fascismo se multiplican. Porque nuestros comunistas, nuestros anarquistas, imitan también en esto a sus compañeros de todo el mundo. Los cuales- -recordamos lo que a este propósito escribió Fierre Gaxotte- cuando se enteran de que un actuante ha sido detenido, tiemblan: cuando saben que ha de comparecen ante la justicia, vibran; v al enterarse de que ha sido condenado a una pena prevista por el Código, explotan Son gente de una exquisita -sensibilidad, que se