ABC MADRID 16-04-1936 página 29

i. B C. JUEVES 16 DE ABRIL DE 1936. EDICIÓN DE LA MAÑANA. PAG. ag. El Sr. CALVO S O T E L O ¿Qué piensa él Gobierno respecto a la revolución? Porque pudo haber delincuencia, yo no lo creo -noblemente lo digo- en la represión... La señora itBARRURI: Ya, hablaremos de eso. No os reiréis. El Sr. CALVO S O T E L O Pero otra cosa es la revolución eñ sí. El Gobierno, respecto a la represión, ya ha manifestado su criterio; pero ¿qué piensa respecto a la revolución? ¿Es que el Gobierno cobija, sanciona y aprueba lo que se hizo én octubre en Asturias y lo qué, con lo que se hizo en octubre én Asturias, sé proponían los agentes- directores y ejecutantes de aquel movimiento? Eso es lo que España tiene que saber. Yo quiero conocer tan sólo lo que piensa el Gobierno. Puesto que tan claramente ha hablado sobré la represión, que hable también sobre la revolución de Asturias. Y, para terminar, conste bien que, con su señoría, entiendo que éste es el último ensayo democrático parlamentario que se puede intentar en la política española, y ya tiene un valor de confesión interesante, evidentemente, esa propuesta de reforma del reglamento de la amara a que su señoría ha aludido, y, más que ella en sí, la manera de razonarla y de explicarla, que es todo un responso a la memoria del buen Parlamento discutidor de antaño. Pero, si es cierto eso, y yo comparto el juicio de su señoría, ¿qués es lo que puede ocurrir si la democracia parlamentaria fracasa? Ya el señor Lago Caballero, en uno de sus discursos recientes, deducía la conclusión, diciendo: Si eso ocurre, no hay más que una salida: la dictadura del proletariado Y yo quiero decir, en nombre del Bloque Nacional, que. si eso ocurre, no se irá fatalmente a la dictadura del proletariado, porque España podrá salvarse también con una fórmu- la de Estado corporativo y autoritario. (Aplausos y protestas. nes queda el c o n s u e l o de la venganza, Cuándo trate el Sr. Azaña de iniciar su (Aplausos de la C. E. D. A. política de justa distribución de la riqueza vamos a encontrarnos muchas veces juntes. El Gobierno va a presidir la liquidación de la República democrática. No es una ameE l- S r MARTÍNEZ CARTÓN (comunista) Ya se opondrá el cerrilismo y el cre- naza nuestra, que no variaremos nuestra actitud democrática y legal, sino señalar él tinismo del capitalismo español. El Sr. GIL ROBLES: No sólo hay cre- peligro de la evolución de la masa política española hacia otros partidos de fuerza. tinismo en algunos capitalistas, sino en otros sectores. (Muy bien. Venimos a pedir apoyo en la legalidad. Por la Patria. todos los sacrificios que sean Yo no dudo del sentido patriótico del senecesarios. Es preferible saber morir en la ñor Azaña. Lo reconozco y lo, proclamo. (Rumores. ¿Pero cómo se compagina esto calle que ser atropellados. (Grandes aplaucon la actitud de grupos gubernamentales, sos de todas las derechas. que han llegado a lanzar en las calles el griSe suspende la sesión, por unos minutos. to de i Muera España! No tenemos mas remedio que ir con el Discurso del Sr. Ventosa Sr. Azaña a esa política democrática de inReanudado el debate, interviene el señor corporar a la obra del Estado a todas las Ventosa. clases sociales; pero el Sr. Azaña debe comEl Sr. VENTOSA, con escasa concurrenprender que su política no le encamina a ese cia de diputados, particularmente de los marbuen fin, sino al de favorecer la dictadura xistas, comienza su discurso; del proletariado, que es lo más antidemoAfirma que el resultado de las elecciocrático que existe. nes obliga al Gobierno, con todo derecho, y deber de gobernar, y a las oposiciones el deber de cooperar. Condenación de la violencia Exponía el Sr. Azaña los puntos esenciales del programa en el orden político y ecoDecía el Sr. Azaña que los desórdenes esnómico. tán mantenidos por elementos perturbadores, deseosos de mantener la intranquilidad. Y El proyecto de mayor importancia es el cóh habilidad ha lanzado la especie de. que de reforma del Reglamento del Congreso. esos agentes provocadores están sostenidos Lo considera necesario para que la instituy amparados por otros elementos. Dígase ción pueda subsistir. En. cuanto a la reforma quiénes son éstos, porque nuestro partido habrá de ser examinada y discutida. condena con todo rigor la violencia. El Gobiernq se muestra con ello impotente, pues La cuestión económica debe declarar quiénes son esos elementos, Por lo que respecta al tema económico, descubriéndolos, y denunciándolos. decía el Sr. Azaña palabras con las cuales El partido que presido ha encauzado grantiene que estar conforme. Con referencia al des masas por el camino evolutivo de la decambio, ha de de decir que entran factores mocracia, apartándolas de toda violencia. de orden económico, que harán referencia Frente a esta actitud legítima y moral se al desnivel del comercio exterior y sobre nos persigue sañudamente. En 1954 se nos esto nada hay que objetar. Pero lo que el quiso privar del derecho democrático que orador sostiene es que más que cuestión de nos correspondía y ahora, olvidando que las programas y de proyectos es necesario atenderechas han igualado en votos al Frente der a las realidades. El cambio está influido Popular, aun descontando las actas que se por un factor de orden psicológico, que denos han arrebatado en los últimos días; y termina las evasiones y movimiento de capien estos momentos se persigue, se aprisiotales, ante los cuales fracasaron todas las na y se asesina a todo elemento que se medidas de orden técnico. La primera realihaya distinguido en la lucha política, y así dad es la existencia de un estado de inquietud vemos que nó contarnos con. ninguna garanque no se puede atribuir a maniobras derrotía para las elecciones presidenciales. tistas. El discurso del Sr. Azaña del 3, de abril produjo un efecto prodigioso. Claro es Y en estas condiciones vemos cómo muque en España se confía demasiado en palachos vacilan ante la violencia de los conbras, pero hay que reconocer que el efecto, trarios, y hay que pensar si no será bueno sedante que se produjo fue por el deseo del pensar en mantenerse frente á esa violencia país de encontrar confianza. No hay derrosin amparo del Poder, sea como sea, justitismo, no propósitos de ello. Todos los días ficando la existencia de esos partidos, á quiese oyen amenazas de revolución y de dictadura del proletariado, y el país teme, sino una defección del Gobierno, un apoyo más o menos disimulado para romper el Frente electoral y la unidad de 1 a mayoría. Su niño se criará Y cuando el Sr. Azaña habla, en términos que debían ser corrientes y diarios, cesa el aún con derrotismo y renace la confianza. VINOS Hay un estado de excitación que en unos COSAÜ se traduce, en acometividad y agresión, y pánico entre otros. Todo ello deriva en una JEREZ verdadera lucha civil. También hay causas objetivas y: externas. Sobre el orden público ha hecho el seREFRIGERACIÓN ñor Azaña alusiones a perturbaciones provocadas o costeadas por las derechas. Las y loca es) violencias hay qué condenarlas, vinieren de JOTORES donde vinieren. Pero hay que examinar si esas provocaciones han existido y si han tenido la relación de causas a efectos con fgiéctrtcos y Diesefi los hechos sucedidos. Siempre se han publicado los mayores excesos; pero, en resumen, hay que acabar con las violencias. Suministros ecMe A. -Aü CPeftnher, 7- fifatfr? d Porque frente a la realidad de los hechos no tiene eficacia la declaración de la necesiAsí no es posible lá vida. L, a debilidad nerdad de mantener el principio de autoridad. viosa, vértigos, mareos, tristezas, espermatoSiendo inadmisible lo ocurrido, sería merrea, estreñimiento e irritabilidad se curan nor el riesgo si se tratara de enfermedad pa pronto con el NJSRVIONAI MON; facilita sajera. el sueño y la digestión y regulariza el vienPero el Gobierno, más que reparar injustre al tercer día. Pesetas 6, timbr. e incluido. ticias pasadas, lo que ha hecho es cometes TORRES. JFuencarraJ, 38; Gayoso, Eorrell, e t p é í e r a -injusticias- gresent. es. Discurso del Sr. Gil Rob es El Sr. GIL ROBLES dice que él señor Azaña sólo ha glosado el programa del Frente Popular, con él cual no puede haber, naturalmente, coincidencia de opiniones en la Cámara. Ha tenido el Sr. Azaña el buen gusto de no entablar polémicas sobre actuaciones políticas anteriores. Ha de corresponder el orador a este proceder. Lo que corresponde a la tarde de hoy es discutir una actitud de conjunto. No quiere hacerle el flaco servicio de elogiar su programa. Bastantes di- íicultades tiene con el apoyo de los grupos gubernamentales. (Interrupciones en los socialistas. La C E D A con el Gobierno en la política de salarios Nosotros venimos aquí a exponer nuestros ideales. Vosotros, los socialistas, venís hipócritamente a explotar el sentido izquierdista de las fuerzas del Gobierno para obtener ventajas en provecho propio. Doña D. IBARRURI: ¡Mentira! El Sr. GIL R O B L E S Podemos apoyar todo aquello que el Sr. Azaña presente que sea. coincidente; pero ha enunciado algo que debo recoger, y es lo referente a la política de salarios. Van a levantar protestas mis palabras, pero no he de recatar lo que piengo decir. (Rumores. Nuestro paso por el Gobierno, mi pleniiud de responsabilidad, no; nos ha permitido realizar en el orden social lo que hubiéramos querido hacer. Pero para acabar con la injusticia social, para terminar con los altibajos de las; diferencias sociales, para eso puestros votos estarán con su señoría. 1 E n la mayoría: No los queremos. El Sr. GIL R O B L E S ¿Qué importa que ño los queráis, si se los debo a mi condena felL? (Aplausos; E