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ABC MADRID 03-04-1936 página 56
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ABC MADRID 03-04-1936 página 56

  • EdiciónABC, MADRID
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Hizo del juego de pala un puro malabar rismo afiligranado de defensa por seguridad y, vista; de ataque, por la audacia con que buscaba el sotamano. Y ya le tenemos a Roberto hecho un pelotari excepcional, que, por fin, ingresa, en un. cuadro tan lucido e. importante como. el. PAÍS VASCO de Recoletos, de Madrid. Ya ha gustado un poco de la popularidad; Desde los tiempos, un poco alejados, de con las nuestras en el aprendizaje ingrato de algún diestro de postín Le Mardura, Elíceg ui, Beloqui, Irún y tantos de la difícilísima y brillantísima especia- alterna conuna cena en Marichu. Le aplauconvidan a artistas de la chistera corta que caso mo- lidad. sus entradas fantástinopolizaron la atención del público madrileño Otro tanto ocurre con los remontistas, den con entusiasmosus fallos le dicen i de espectáculos, no se había seguido en el cuya plana mayor deleita hoy a los afortu- cas... le chillan (aludiendo aly torero que Como el otro país la campaña de sus pelotaris en la ex nados aficionados madrileños. creó el mote con que se le conoce) cuando Corte con la atención e interés de ahora. Pero en esta íntima comunicación con que no le acompañan la suerte y el acierto. Cierto que, para que así ocurriese, han el aficionado de aquí asiste y comenta, las triste que se asomó tembloroso tenido que desplazarse en pleno los dos incidencias y manifestaciones de su juego unEl niñolas puertas de Euskalduna pidiendía a grupos de remontistas y palistas que han si- favorito, liay un coin de cocuy para el Ben- do le admitieran como pinche para que judo, con pequeñas alteraciones circunstancia- jamín de los palistas, para el mínimo Roberpudiera desarrollar les, los que han llenado en estos veinticinco to. Roberto Esteban, a quien los plumífe- gara un poco y es. ya todo un artistasu fráconstitución años los programas obligados de pelota de ros (pinches, de escoba) que alternaban sus gil gran porvenir en su profesión. y con servicios de auxiliares y pinches dé Euskai- unNo están los frontones de nuestras capitales. aqueduna con sus eternos y alborotados ensayos llos de sus muy lejos todavía los díasde peEl remonte en Pamplona y San Sebastián, de servidor pusieron de mote Cagancho, en atención al lotas e n los funciones cuando desde un palco y la pala en Bilbao, tienen el arraigo ori 7 partidos, giiyirio de haber nacido en estos sitios; de preciosismo que apuntaba en sus prime- le llovían, como del cielo, unas perrillas, que ros pasos. de aprendiz y relacionándolo con haberse desarrollado en ellos, con espléndieran la envidia de sus compañeros, que, exda floración artística, y de haber dado efec- el del torero. trañando aquella constante dádiva que caía tivamente, jugadores extraordinarios, con No es raro el caso del pinche o habitual impensadamente le preguntaban: ¿Por. qué personalidades muy acusadas, con caracte- del frontón, que destaca su habilidad con ge- te tiran esas perras Es mi sueldo les rísticas distintas, como para ofrecer el cua- nialidades, que son la mayor parte de las contestaba Roberto... dro completo y variadísimo de exponentes veces infiltración de la técnica del juego, Le hemos, tenido unos días de tertuliano dé un magnífico conjunto de juego. por una saturación de experiencia, que re- en el palco aquel de donde le llovía el suelHeñios hablado ya muchas veces del caso quiere mucho más tiempo de captación, para do de otro tiempo, y al donante y a sus que plantean en el país las simpatías v adop- el que no tiene a mano la ocasión constante amigos le parecía que nos alcanzaba algo que se les ofrece a estos muchachos, de ciones que otorga la afición a los distintos del éxito de Roberto Esteban, a quien. los quienes se dice, sin mucha exageración, que plumíferos de Euskalduna pusieron por juegos. han nacido en un frontón o han aprendido mote Cagancho. Cuando menos, lo celebráSiendo el de chistera grande o cesta punta el más difundido y organizado in- ¡a andar en él, sirviéndose de la pala como, bamos con la íntima satisfacción de un suceso gratísimo esperado y confirmado. dustrialmente, y el que, por lo tanto, repre- de andador. senta como medio de vida de mayor númeFue un asombro en su tiempo el famoso IRIGOYEN i ro de dedicandos, nn razonable ingreso y fa- palista Chistu I (Jaunito Aboitiz) que de cilidad de colocaciones, no por ello solicita muchacho encargado de los números del Los partidos de ayer ni retiene la atención afectiva, que. el pú- tanteador, pasó, y con bien poco tiempo inblico otorga a los de mano, pala y remonte. termedio, a jugador extraordinario. El excelente programa del joeves atrajp El primero, que tiene su medio de vida en Roberto empezó a moverse en Euskaldu- al nuevo Frontón Recoletos una gran cantilos pueblos, rebasa ahora sus límites y des- na, sin que apenas pudiera aguantar el peso dad de público, que tuvo ocasión de ver en borda en las capitales, donde logra éxitos, de la pala. Desmedradillo, depauperado, por acción a los ases del remonte y la pala. que no le parecían reservados, en compe- una infancia triste, se avispó, y entre el Primero, a remonte, Izaguirre y Erretencia con los juegos largos de remonte y bullicio, de aquella bandada de escobistas zábal (rojos) 40; Mugueta y Salaverría II pala, mejor, aclimatados y de largo tiempo a las órdenes del canchero Felipe, que so- (azules) 29. Partido de calle; con decir que en as canchas ciudadanas. ñaban con eclipsar las hazañas de Chiquito Errezábal no se manchó, no hace falta pun. El remonte en Pamplona y San Sebastián de Gallarta, en plazo lál- go, y con captarse tualizar más lo que fue el encuentro. Jugó y la. pala en Bilbao, han tenido siempre una simpatías y propinas de los pelotaris, ex- mucho Izaguirre, que sacó con su dureza asistencia entusiasta, no sólo por parte de cluyendo el más listo o diplomático, al más de siempre y un mayor acierto que otras los habitantes de las capitales, sino de toda torpe, en la obtención de estos rendimientos. veces. Le ayudó bien Errezábal, muy segula provincia, que se consideraba honrada, Y de término de todos los afanes, a la can- ro en su juego, sin necesidad de revolcarse asistida y representada por alguno o algunos cha; a romper pelotas de ensayo, a jugarse por el suelo. Anduvo a. Ja deriva, Salavede los buenos pelotaris de la especialidad. las perrillas en partidos de desafio, que rría II, que extrañó horrores la cancha. CanNo es de extrañar ahora, la avidez con más de una vez terminaban con declaracio- sado Mugueta, no se movió con su ligereza que la afición asiste, desde aquí, y controla nes de insolvencia, compromisos de pago, con de otros partidos y aquello no tuvo color las actuaciones de sus jugadores preferidos, garantías que no aceptarían en ningún Ban- para los azules. Otra vez será. procurando estar al día, de sus alternativas co, y las más de las veces con el cobro en Segundo, a pala, Araquistáin y Campos d juego, comentando cada resultado, como sopapos e insultos del crédito derivado (rojos) ganaron por 45 a 39. a los azude la superioridad demostrado en el par- les Amorebieta II y Perea. Sobre el papel si realmente se jugaran aquí mismo los tido. partidos. era un partido de grandes dificultades para Este público ha aguardado con impacienCagancho- -digo, Roberto- -aprendió pron- Araquistáin. Luego, en la cancha, resultó fácia la reaparición de Juanito Araquistáin, to aquello de que los partidos deben ga- cil. Cosas de la pelota. Sigue Juanito empacuya lesión le ha tenido como en ascuas, narse antes de quitarse la chaqueta y con lando con facilidad y sacando mucho. Apepor lo que venía a retrasar, eso que ahora su poco aparato y presencia y su mucha hanas necesitó que le ayudase Campos para se lleva con rigor, como índice comparativo, bilidad llegó á ser el- tragaperras dé aque- imponerse a la, fuerte pareja que tenia eny que llaman línea establecida Por fin llas alborotadas tropillas de muchachos. frente. Ha bajado algo Amorebieta II, que llegó Juanito a salir a la cancha y realirealmente tuvo un par de semanas Aprendió á voltear la pala con- soltura nales, y Perea sigue sin sentirse a excepciozó uno de sus admirables partidos, prodigio incomprensible para su constitución y escagusto en de técnica de especialista, de una manera sa fuerza. Afinó su empale, soltó sus brazos la cancha de Recoletos. Algún palazo suelto única en el manejo de la pala. Con eso y con holgura y fue el asombro de todos, em- y ninguna regularidad en su juego. El triuncon tener en primera línea al gran artisfo de los rojos hubiese adquirido caracteres ta Chiquito de Gallarta y al pequeño Zá- pezando por el dé los pelotaris que r eía n an- rotundos sin una arrancada final de los azute el atrevimiento, de Cagancho, que se co- les, que redujo un poco las distancias. De rraga; con eme Amorebieta e Izaguirre y locaba á los trallazos de un Unamuno o de Unamuno valoren su vitalidad extraordina- un Gallarta en los ensayos y devolvía pe- todas maneras, allí no maridaba nadie más ria Pachico Quintana, lu? ca su sobrebrazo: que Araquistáin, que cada vez va más para. últimos grandes pegadas Perea; Jáuregui y Pa- lotas de los direccióncuadros con seguridad arriba. de empale y portentosos. say; sus malabarismos Abasólo y BegoTercero, a remonte, Ábrego I y GoicoePero Cagancho ni crecía ni engordaba, ñés III, ere el público bilbaíno- -creemos to (rojos) 45; Iturain (azu su desarrollo; mientras es dos- -que estamos en Madrid muy bien re- retenido en a dquirían el tipoyde jóvenes sus. chea 35 j Era la deAzpiroz e tarde de bene- i compañeros; pe- l) presentados por esa embajada de artistas, lotaris, él quedaba en niño, con expresión ficio para los rojos. ayer una salió con. la; Pareja que que se han hecho ante nosotros, cruzan- de inteligencia y picardía, que acusaban toda faja roja, pareja que se- llevó el triunfo con do todos los citados y algunos más sus palas su experiencia de la vida. tranquilidad. Jornada de entera satisfacción PELOTA VASCA REFLEJO- MADRILEÑO VÍSTO DESDE EL

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