ABC MADRID 20-01-1935 página 53

DOMINGO DJEX. A; MAÑANA; PAG. 5 3 fe una coTEATROS, GINEMATOGR AFOS Y CONG 1 ER- hermanos José y Jorge de la Cueva carácter media de ambiente anda- luz y de popular, É Ñ ESPAÑA Y: Étf EXTRÁN ERO Valeriano León, a Cervantes Informaciones teatrales. Victoria: La Papirusa? Informaciones musicales. Guía del espectadoííé Cartelera madrileña Informaciones y noticias teatrales En Madrid -V i c t o r i a La Papirusa Aunque en los carteles figura Lo Papiru: sa como comedia, en su autocrítica hablan lds. padres de la criatura de melodrama y corn. 0 tal melodrama figuran los ecos de su éxito en Barcelona. De melodrama tiene bien poco esta obra. El melodrama sey caracteriza p o r u ñ a acción de gran inten- afilad, las más d e las veces terrible o violenta, y en que la lógica viene sacrificada a los, agrandes efectos. Es tradicional en el melodrama, desde que perdió la música, un tenia fuertemente sentimental, en el- que haya buenos perseguidos y malos triunfantes, hasta que al final el autor hecho P r o videncia castiga el delito- -aquel famoso traidor de melodrama -y recompensa la virtud. ¿Recordamos los modelos del géífe r. ó? Aquel Lázaro el mudo, aquella Huérfana, de Bruselas, aquellos Pobres de Madrid; aquellos; Dos fefeí; y: tahtást- obras- que err él ultiirío tercio del 1 siglo pasado fueron traducidas o fusiladas del francés, verdadero, introductor- de estas gallinas melodramáticas. La Papirusa no tiene ninguno de. los requisitos que por definición y por abolengo corresponden al melodrama. Más bien pue de suponerse que esta clasificación se le dio al encontrar los autores la obra con determinadas licencias que no encajaban en la comedia. Del melodrama sólo tiene. La Papirusa el sentimentalismo desatado que quiere apretar el corazón de los espectadores, y que. a v, eces; lo logra, pero siempre por caminos tiernos y nunca por. la violencia, puñal, veneno, malos tratos, traiciones, etc. En caso de aceptarlo como, melodrama, es u n melodrama refinado, culto y de buenos 1 sentimientos. Eíi esta comedia. sentimental. se fía todo la habilidad del comediógrafo, a su co nocimiento del. oficio. La trama, con emotividad de folletín, va a ser desarrollada de modo que interese al espectador. Y los personajes van a entrar y salir hábilmente para que ese interés crezca en los finales de acto. Ya esta habilidad es un gran valor en el teatro, porque no hay que olvidar, por muy real que se le quiera hacer, que el. teatro es siempre ficción. ¡Ay, si algunos de nuestros grandes literatos dé: la, esc, en, i reuniesen. a la miel de sus diálogos. esta -habilidad 1 carpinteril para complicar la acción y dotarla de interés! ¡Ay, si los muchos autores españoles que tienen habilidad para mover los muñecos supieran conducirlos con hilos de dialéctica y de literatura! En La Papirusa; repetimos, se fía lo principal del éxito al conocimiento del inéúer, aunque los autores sientan la pequeña vanidad de creer que han hecho esta vez más labor de; pensamiento, y; J e retórica que en o ras anteriores: Concedido; pe. ro no basta, para fundamentar el éxito en esa labor. El confeccionador, puede más en. Lg, Éapiriiía, Para el próximo día 31 del corriente está fijada la reaparición del papular actor ante su público madrileño, en el teatro C e r v a l tes. La velada inaugural será con el estremadre que fue mala. en su juventud y que no de una comedia de autores argentinos, que en Buenos Arres 3i a obtenido un insóli; luego- quiere ver feliz a su hija en su casato éxito, y en la que Valeriano León intermiento. Ésta madre es La Papirusa, que preta un papel semidramático, con el que quiere decir mariposa en un modismo ameestá muv encariñado. En la Compañía no ricárto. La Papirusa- surge cuando sé va a casar. su hija con un hotnbre que s ólo la hay modificación alguna. quiere, por su dinero; y todo el afáii de la madre es convertir en bueno al mal marido. Hay. un personaje fundamental mejor pintado- que- el- de- la- heroína, y es el gallego Antón Laurido, tan acabado en los detalles y; tan magníficamente interpretado por. v Op? ra Miaña, -Wi Madrid? Mariano Asquerino. Elena, lar Papirusa, está fiada; a; Irene López Heredia, que encuentra Cumplimos la promesa que hicimos ayer de completar la imprecisa información soun gran papel, de mucho esfuerzo y compli 1 bre una próxima y breve temporada de ópecación, que le permite gran lucimiento. Pero la falsedad de muchas situaciones en que in- ra italiana en Madrid. Se trata de una generosa y plausible tenterviene resta al papel eficacia. E n cambio, tativa de resucitar aquellas noches del teala verdad, la naturalidad del Antón Laurido tro Real, en las que todo era magno, desd da a Asquerino ün continuado triunfo Tan la- actuación de grandes cantantes hasta la pronto aparece él en. escena sube la calidad concurrencia de la mejor sociedad, a las lode la obra y pasa de la comedia sentimencalidades preferentes y del mundo fervorotal y llorona, del seudo- melodrarna a una co- samente filarmónico a las galerías altas. Una ausencia del espectáculo dignó. 3 e medía firme y recta. Madrid acabaría por reducirse a la categOn Denlos otros personajes, la Carmela que ría de recuerdo para gran parte del públihace María Isabel Pallares y la Luisa; de co y de algo desconocido para el elemento María- del Pilar Lebrón; son los que tras- joven, que ha 3 ta ya perdiendo J hábito de cienden un poco a humanidad. Los demás vestir de etiqueta para asistir a veladas esenhguran seres convencionales para cooperar cialmente artísticas. A tornar a aquella época tiende el- esfuerzo de unos cuantos artisa que cunda la vena del sentimentaíisíno. tas, todos ellos primerísimas figuras en Jai Todos, sin embargo, fueron interpretados í con fervor, debiendo ser citados preferen- escena lírica y todos ellos españoles. Ayer citábamos los nombres de algunos, temente. Pascuala Mesa, Antonio Armet y y por ser incompleta la información, según Gabriel Algara. consignábamos, omitimos involuntariamente. Los autores, K A doifo Tprrádo y. don al insigine divo Hipólito Lázaro, que en estosmomentos canta en el Liceo, de Bareelonaí Leandro Navarro; salieron- a escena, a plauque con Angeles Ottein, los tenores, Cortis. y. didos con entusiasmo en todos los actos, más veces en. el primero que en los dos res- Lara, el barítono Aguirresarobe, el notable, tantes. Porque su habilidad de comedfogra- bajo Olaizola y el popular y simpático carií Carlos del Pozo, constituirán el cuadi p fos es mayor al empezar la obra que é n el catolos principales cantores. de curso de ella, y porque el Antón Laurido La orquesta la pompondrán profesores, tiene más intervención en los comienzos. no de la Sinfónica ni la Filarmónica, sino No obstante, hay en el segundo acto runa de los que formaron la del teatro Real, W gran escena, una escena de autor con dia- elementos corales de la misma procedencia. léctica y literatura, de autor que sabe talgo formarán los coros en las próximas repremás que la carpintería escénica, y es aquella sentaciones, de las que será director y cori- certador el que también lo fue del. repetida- escena en que discute el esposo aristócrata con el Antón Xaurido, su suegro quejoso. mente citado Real, popular e ilustre maestro, Ricardo Villa. La escena, muy bien puesta por BatuVy La serie de funciones con la que se in: Victorina Durári. -A. C. tentará el resurgimiento de la vida opería- Informaciones musicales Lola Membrives, en Madrid La eminente actriz está enü e nosotros. Con su llegada adquiere el curso teatral de este año su máximo interés. Lola Membrives descansará unos días de su. larga- y fructífera campaña en América, y seguidamente luego. de orientarse para la reorganización de su Compañía, hecho el acoplamiento de todos los puestos- -le bastará, también, una cuartilla y un lápiz- comenzará su actuación eti Madrid, si- hay teatro disponible, para, lo cual ya se han iniciado las oportunas gestiones, que parece llevan- buen camino, O en provincias, para donde ha recibido ya numerosas ofertas. La eximia actriz ilustrará, su artístico programa con la. valiosa aportación de una comedia de Marquina, En el nombre del padre: otra, sin. título aún, de Jacinto B navente, -y. la de. (Jarcia Lorea, rotulada tíoiia Rosita- igfeo. Lola Membrives- dará a conocer una de- las más itnpsrtantss obrai del teatro argentino, del. día, hoy en- pleno í- ES. urgisniíntpde procí- acciári. y- algunas no: q u e e lc r e a d o r veííadás. ds láVeícéna exí ráiTJera. La creación se reduce al desvelo de una Para la gran actriz escriben también los tica que fue gloria del arte lírico y tradición brillante en la vida madrileña se compon- drá de tres funciones, que se realizarán los días 4, 5 y 9 del próximo febr. ero, cantándose por este orden: Traviata Rigoletto y El barbero de Seyilla de las que serán tenores Antonio Cortis, apenas conocido en España, porque le retienen: l.o s. grandes teatros norteamericanos, especialmente el de Chicago, el genial Hipólito Lázaro, que sigue en la plenitud de- sus facultades asiom. brosas, y Lara, que a las series. de sus éxitos tiene que añadir los recientes en el Liceo, barcelonés; el barítono será, cómo queda dicho, el imponderable cantante, aplaudido y admirado por los públicos de España, Italia y- Francia, Aginrresarobe, y la Violeta, Gilda. y Rosina, la eminente cantatriz da rango internacional; Ang eles Ottein, sobevana de su arte y de casi- tóelos los auditorios europeos. En la realización, de este plan no existe e, mp. resa ni ansias de lucro. Es una inicia- tiva; 4 e los mencionados- artistas en u jusío y patriótico anhelo de restaurar e. iadr. ii un cult? artístico que- fue siempre ga a lc! i capital dé. E spafta, y si responde el pübííc ¿a tal- esfuerzo eá. ese abono a tres audiciones- a l precio regulad. o.i- de 15 ¿esbia. i butaca, rn 0 recel: á biep del arte y; del nombre de Madrid la noble- tentativa de ese nú ¿leü. de admirables artistas! -A. M. C,