Archivo ABC
ArchivoHemeroteca
ABC MADRID 24-02-1934 página 26
ABC MADRID 24-02-1934 página 26
Ir a detalle de periódico

ABC MADRID 24-02-1934 página 26

  • EdiciónABC, MADRID
  • Página26
Más información

Descripción

A: B C SÁBADO 24 DE FEBRERO DE 1934. EDICIÓN DE LA MAÑANA. PAG. 26. gio del Sr. Lorenzo Pardo y sus colaboradores. Discernir la mayor utilidad de las obras no es posible en este recinto. Sólo es factible desde el Poder. Si aquí quisieran señalar el plan de obras sería algo imposible. Las representaciones regionales- requerirían para ellas lo mejor y el espectáculo sería terrible. Desde la cumbre del Poder se puede discernir mejor, aun estando sujetos a error. Explica por qué fijo su atención en el señor Lorenzo Pardo, y dice que se debió a que éste aplicaba el íiri- petu de, sus conoci mientos y concepciones, no al servicio de ésta u otra región, sino al de España. Y él, que quería ser equitativo con todos, encontró en el Sr. Lorenzo Pardo lo que apetecía un hombre nacional y de excepcionales talentos. Yo creo en la iniciativa particular e in- dividüal, pero cuando ésta pone un fielato contra el Estado, ¡ah, entonces no me sirve para nada, y si puedo le arrollo! Y eso es lo que hice en algunos casos. Digo esto porque la interpelación, más que al Sr. Guerra del Río, ha sido dirigida a mí. El Sr. VIDAL Y GUARDIOLA: Ha tomado candela demasiado precipitadamente. El Sr. PRIETO: Pues siempre me ha ido bien precipitándomeSu preferencia absoluta- -añade- -es por los regadíos de Andalucía y después los de Valencia. Pero estas preferencias no quieren decir que han de permanecer irredentas otras regiones. Esas comarcas deben de ser trabajadas también. En cuanto al paro obrero, su principal característica, es la forma de hacer los cultivos. Recuerda cómo él se vio precisado a construir caminos vecinales para dar millones con destino al paro obrero. Eso hice: verter una gran cantidad de millones, casi totalmente improductivos, i Pero cómo vamos a improvisar un plan de trabajo fecundo y que satisficiese las necesidades de los parados? Estas confesiones no me sonrojan y asumo la responsabilidad que me incumba. Atendimos a los sitios en donde el paro era más intenso. Yo en esto reconozco que el dinero no estuvo invertido provechosamente. Fue un socai ro a los parados. Afirma que las obras del pantano de Cijara no se llevan lentamente, sino al ritmo en que deben ir. Las obras hidráulicas han de hacerse con tino. Claro es que las Empresas privadas proceden con más agilidad, pero eso se debe a que no tienen las trabas con que tropiezan los gobernantes ante el justificado recelo de los ciudadanos con respecto de quienes gobiernan. Con respecto a ferrocarriles, mi teoría fue siempre la de mejorarlos existentes en vez de construir los nuevos. Hay, en materia de transportes, una verdadera revolución. r. La concepción económica d- e los ierrocarriles falló, por entender sus organizadores que el capital de origen no debía ampliarse. El ferrocarril necesita unas máquinas más potentes, más costosas; necesita unos carriles más fuertes, y eso hace la existencia de un problema. Ante él yo entiendo que se debe proteger y mejorar lo existente, en vez de construir nuevas redes. No obstante, no se desamparó la construcción de las redes iniciadas por la Dictadura. Yo dediqué con preferencia mayores cantidades a los ferrocarriles más avanzados, como el de Valencia a. Utiel, Soria a Castejón, para lograr su inmediata construcción. A sí favorecíamos a la industria siderúrgica y remediábanlos el paro. Habla. de la crisis de algunas casas constructoras de vagones de Barcelona, Bilbao y Guipúzcoa; pero- entiende que sería un error del Gobierno destinar dinero a adquirir ese material cuando en muchas estaciones terminales hay centenares de unidades paradas por falta de tráfico. Hay que fomentar el progreso y riqueza agrícola de España y cuando lo logre se podrá vivir una vida de paz, tranquilidad y progreso, y las industrias podrán prosperar en forma adecuada. Rectificación de Sr, Vida! y Guardioia El Sr. VIDAL Y GUARDIOLA rectifica. Cree que el Sr. Prieto ha interpretado su pensamiento y señala que el líder socialista fue aplaudido más calurosamente cuando confesó sus errores y mando sentó teorías en franca contradicción con el socialismo de ahora y del futuro. No creo que su señoría haya dicho que tenía espíritu fenicio con ánimo de ofenderme. El Sr. PRIETO: Ni mucho menos. Lo dije en sentido. de gitanería. Además, yo soy celta y no oasa nada. (Risas. El Sr. VIDAL Y GUARDIOLA afirma que su intervención no tuvo carácter técnico ni político. Quiere tan sólo que la Cámara acoja su iniciativa y la desarrolle con un fin práctico. El Sr. Prieto ha desviado la interpelación. Y yo puedo afirmarle que mi conducta será de solidaridad nacional. No tiene afanes industriales y ha venido a las Cortes por más de cien mil votos de agricultores. Yo no he acusado a nadie. Yo acuso al sistema y por. eso entiendo que todos lo debemos rectificar. No quiere polémicas con nadie, e insiste en que sus punios de vista son coincidentes con los del Sr. Prieto, aunque el tono en que le ha contestado no era el adecuado. El pretende que el Gobierno le conteste y a su hora podrán hacer los esclarecimientos adecuados sobre el tema. El Sr. Vidal sigue insistiendo en su tesis. Reprocha al. Sr. Prieto que no haya hablado de los enlaces ferroviarios. El Sr. PRIETO dice que hay pendiente una interpelación sobre el asunto y por ello no habló ahora; pero está dispuesto a hablar cuando quiera el Sr. Vidal. El ministro de OBRAS PUBLICAS declara que en efecto. es un tema que debe tratarse aparte. El Sr. VIDAL, termina diciendo que todos deben estudiar el remedio con un elevado espíritu de patriotismo. El Sr. PRIETO: Este debate ha sido útil para los que han sido ministros de Obras públicas y los que aspiran a serlo. El estado de prevención no es culpa del Gobierno. Quizá se deba a declaraciones partidas desde esos bancos. Cuando estén apaciguados los espíritus desaparecerá. Los sucesos de Castellón El Sr. MARTI se ocupa de ¿los sucesos registrados en Castellón el 28 da. enero con motivo de la celebración de la Asamblea de obreros católicos. Aquellos sucesos no los provocaron los socialistas sino el partido radical, llamándonos una cosa que ni somos ni queremos ser: fascistas. Refiere cómo se desarrollaron los sucesos y formula su más enérgica protesta. También formula sus quejas contra el funcionamiento del Jurado mixto de Castellón, en donde hay anomalías de bulto que deben repararse. Pide que se realice una inspección. A las nueve y veinte se levanta la sesión. Acotaciones de un oyente El Sr. Vidal y Guardioia, hombre inteligente y bien preparado, que tiene su reputación en cabellera, como se diría para hablar de cierta característica de los cometas, pronuncia un discurso muy interesante, que tiende a probar que el dinero que el país emplea en obras públicas suele ser malgastado, un poco locamente, sin obtener todo el rendimiento lógico. Sentado en un extremo del banco azul- -negro el traje y blancos los papeles- -como una urraca en la rama de un árbol, el Sr. Guerra del Río escucha o finge escuchar. Vidal y Guardioia está convencido de que dice grandes verdades; los diputados, también. Y el ministro, que lo sabe mejor que él, mejor que los diputados y mejor que nosotros. Los demás consejeros han abandonado a su colega en la soledad. Ei Sr. Lara ni aún ha aparecido esta tarde por la Cámara. Desde que el Consejo de ministros acordó que, al fin, se presentas- en los presupuestos, el Sr. Lara corrió a su despacho, llamó a todos los timbres y ordenó a Sus empleados: -A ver. Hay que hacer en seguida unos presupuestos. Que sean buenos, que los ha pedido D. Alejandro. La atención de la Cámara sigue apaciblemente al Sr. Vidal y Guardioia. Pero hay. una más honda inquietud que impide entregar todo el espíritu a su discurso. Subiendo como un vapor desde el salón de conferencias, bajando como un río desde los despachos de las Comisiones a los pasillos, viene y va una preocupación representada en esta frase: El martes se producirá la crisis El martes... el martes... el martes... La crisis... la crisis... la crisis... Es todo lo que se oye y todo lo que se piensa. La crisis. Pero si esa obsesión se. acurruca temblorosa en el fondo de todos los corazones no es porque una crisis más nos amedrente. Es porque, según han dicho los periódicos, según comentan los diputados, ésta será una crisis excepcional. Porque, a lo que se dice, el Sr. Companys está en Madrid principalmente para indicar cómo se ha de resolver esa crisis, y en qué sentido. Y si así no fuese, Cataluña... Cataluña adoptaría una determinación. Cataluña y siete u ocho Municipios de Valencia. Naturalmente, esto nos sobrecoge. Hasta ahora, una crisis era un fenómeno ciertamente de importancia, pero de una importancia que de antemano podíamos conocer, calcular, fijarle límites. Caían unos, venían otros. Estos perdían sus sinecuras; aquéllos las encontraban... Pero las regiones, las provincias, los Municipios, permanecían inmóviles, señalados con los colores de siempre en los mapas de v siempre. Ahora, en este lío de reacciones desaforadas, de consecuencias imprevistas, que desde hace algún tiempo convierten la poíí- Proyectos de ley El ministro de Agricultura lee un proyecto de ley. También lee un proyecto el de Estado Ruegos y preguntas Varios diputados formulan ruegos ¡El Sr. MANSO, socialista, se ocupa. del funcionamiento de los Tribunales de Urgencia, y pide al ministro de Justicia que se remedien las anomalías con que según el orador funcionan. También protesta contra la forma con que se aplica la ley de Orden púbjico cón; los periódicos. EL ministro; de. JUSTICIA reconoce la dureza de laley de Orden público; pero esta ley la hizo el Gobierno pasado y si él hubiera sido diputado no se habría aprobado sin su protesta. Confiesa. qué hay excesivo rigor en las condenas; pero todo ello es imputable a dicha ley y cabe difícil remedio. La revisión en estas causas no cabe; sólo es posible. el indulto, y ya son muchos los casos de indulto que se inician, aunque el Poder ejecutivo tiene escasas atribuciones gara aplicarlos, y f

Te puede interesar

Copyright (c) DIARIO ABC S.L, Madrid, 2009. Queda prohibida la reproducción, distribución, puesta a disposición, comunicación pública y utilización, total o parcial, de los contenidos de esta web, en cualquier forma o modalidad, sin previa, expresa y escrita autorización, incluyendo, en particular, su mera reproducción y/o puesta a disposición como resúmenes, reseñas o revistas de prensa con fines comerciales o directa o indirectamente lucrativos, a la que se manifiesta oposición expresa, a salvo del uso de los productos que se contrate de acuerdo con las condiciones existentes.