ABC MADRID 06-01-1931 página 51

EL CAMPEONATO DE LIGA ENCHAMARTÍN, EL REAL MADRID VENCE AL DEPORTIVO ALAVÉS POR 1 0 El Arenas aplasta al Barcelona en Ibaiondo y el Athletic de Bilbao pierde ante eJ Europa. Es derrotado, el Racing de Santander en su propia salsa por la Real Sociedad Resultados Arenas de Biibao- F, C. Barcelona R. Unión- Irún- Deportivo Español Deportivo Europa- Athletic de Bilbao; ¡Real Madrid- Deportivo Alavés Racing- Santander- Real Sociedad 5- 0 6- 1 2- 1 1- 0 2- muchachos rebotados, víctimas de la vehemencia que ponían en el esfuerzo. Las fases salientes, los rasgos brillantes fueron de García de la Puerta. Este jugador, frío, sereno, supo imprimir al ataque una viveza que hubiera tenido mejores resultados con que se decidiera a. rematar las jugadas. Pero a él le falta ese valor, y los compañeros, desorientados, no logran compenetrarse con él. El interior izquierda, discutidísimo, es un futbolista muy desigual, un atacante por rachas, que tan pronto parece decidido a todo como semeja adormecido sobre el terreno. El juego siguió, por tanto, esta orientación imprecisa, cómo la figura de su conductor, y los avances blancos, caracterizados por el individualismo, fueron brillantes cuando García de la Puerta les dio color, y fuertes, vehementes, impetuosos, cuando los demás llevaban la iniciativa. Los alaveses no nos mostraron nada nuevo. Una defensa magnífica, a la que favoreció el juego alto, y unos medios, entre los que Antero destaca su colocación y su clasicismo. Pero en el ataque carecen de dispai- adores, y Olivares, a juzgar por las muestras últimas, es el peor de todos. Clasificación de a primera división J. G. E. P. P. Real Sociedad Real M a d r i d Deportivo Alavés Racing Santander Deportivo E u r o p a Athletic Bilbao F C. Barcelona Deportivo Español Real Unión Arenas, de Guecho 53 43 52 52 52 52 51 5. 2 42 52 1 0 I I O 2 O O O 7 6 2 5 5 2 5 34 24 34 24 34 I I Real Madrid, 1; Deportivo Alavés, o Dificultades. -De ios primeros estilistas del. combinado- argentino y de la precisión de los pases de los húngaros volvemos otra vez- al campeonato liguisía. Pero al regresar las huestes- están diezmadas. En aquellas peleas de exhibición se quedaron algunos- muchachos, que, unidos a los que ya formaban parte de la lista de hospitalizados, dan por resultado esta alineación madridista: Vidal; Torregrosa, Quesada; Bqnet, Esparza, Lebncito; Uríetavizcaya, Eguía, Gurruchaga, García de la Puerta y Olasov. -Enfrente, el Alavés, con su tropa mejor: Beristaín; Ciríaco, Quincoces; Fede, Antero, Urquizu; Arsenio, Játiregui, Olivares, Albéniz y Lecul. No es raro, pues, que el Madrid, no sólo se encuentre desorientado sobre el terreno, sino que, aden. ás, menudeen esos cambios de puestos, que son consecuencia obligada de las circunstancias difíciles del momento. Por estas razones, el último encuentro de Liga, del que los merengues han obtenido un triunfo por los pelos, tuvo escasa importancia. No servirá para valorizar al Madrid, porque su equipo ha de ser otro tan pronto- como los hombres se repongan; no nos mostró un Deportivo Alavés brillante, que pudiera aprovecharse de la oportunidad y facilidad, y no sirvió siquiera para catalogar a García ele la Puerta, que hizo un match mitad y mitad. Seguimos, pues, donde estábamos... pero con dos puntos más en el haber madridista. tiempo ofreció fases alegres, brillantes si se quiere. La línea de ataque, llevada por García de la Puerta, tuvo momentos magníficos; pero faltaron los rematadores. Por otra parte, obstinados los centrales en jugar por alto, la labor- de- la parejVdefensiva inter- naciona, l se vio muy facilitada. Se endureció la lucha, sin que ningún motivo lo aconsejara. Ño fue, empero, un x i itboi incorrecto, sino, sencillamente, duro, demasiado fuerte. Las jugadas, a falta de habilidad, eran bruscas, y en todas las 5 a Voéos los choques, caían varios Impresión del match -Sólo el primer Tan sólo un tanto se marcó en el ctTiY í del match, y fue una mezcla curiosa de los dos temas que se ofrecían: el centro de Eguía, después de un esfuerzo impetuoso, fue a la cabeza de Gurruchaga. El centro pudo rematarlo, pero, en un. alarde de vista, prefirió engañar a la defensa con el salto que parecía preparatorio para dejar a García de la Puerta, que sólo tras él, esperaba el esférico la ocasión mejor para colocar la pelota en la red. Y entró así, imparablemente, el tanto del triunfo madridista, a los cuarenta y dos minutos del primer, tiempo. En la segunda parte, el juego valió menos. Careció de los rasgos de García de la Puerta, y no tuvo en los impulsos de los demás un alarde siquiera de acierto. El Deportivo se limitó a defenderse; a la espera de lograr, en una arrancada, el ansiado tanto del empate. Pero no llegó, porque la defensa y Vidal estuvieron acertadísimos, y porque en. la línea media, Bonet y Leoncito se replegaron hábilmente, marcando a los delanteros contrarios, por otra r parte, inofensivos como artilleros. Sin rigor. -En época de epidemia no sería justo censurar a los voluntarios que substituyen a los. enfermos. El Madrid, grupo de inválidos, tuvo que. formar como pudo su equipo, y merced al entusiasmo y a la buena voluntad, se apuntó un triunfo, que facilitaron los contrarios, entre los cuales sólo Ciríaco y Quincoces siguen siendo figuras indiscutibles. De los demás, Antero en los medios, y Lecue y Jáuregui algunos ratos; pero muy desacertados todos a la hora de disparar. Por eso no se apuntaron un triunfo, o siquiera el empate, que por el brioso alarde de coraje, no se hubieran merecido los centrales. -Juan Dep. or tista. ZL, GOAL DEL MADRiryqUE REMATO GARCÍA DE LA PUERTA, (DIBUJOS DE ANTONIO L MADRJI JUE ¡CASERO,