ABC MADRID 27-03-1925 página 21

ías satisfacciones que er ¡Jurá la púe a; cotí cederles. 1 Es. raro, por tanto, que personas de cier- ta posición social acudan a los Tribunales para manifestar que. las han dejado plantadas pero. en los últimos días se ha visto en Londres un pleito que prueba una vez más las diferencias fundamentales existen; tes entre este pueblo y otros. La señora Lubbock, divorció a su esposo en. 1922, pues Boletín del día, A B C en Inglaterra. Lá próxima eíección pres, i- aunque otra cosa parecen decir sus retratos, acaba, de cumplir treinta años, y no s 3 deneial en Alemania. El pacto de seguridad y la cuestión del desar- opone en, teoría a la posibilidad de contraer matrimonio nuevamente. El Sr. Williams me. Notas varias de Portugal. Resumen telegrafié tiene más años y quizá más sinceridad, puesto que no se recató en decir que ha cumplido ya medio siglo; también sel Oriente de Europa, de una Polonia due- que la circunstancia de ser padre es cierto de hijas ña de Dantzig que perturba sus planes, en casadas, le. privaJba de afirmar otra cosa. el mar Báltico. Inglaterra acogería gusto- La dama es nieta de un conde y prima de sa la rectificación por arbitraje die las fronteras de, Polonia, tan, tó más... cuanto, que un vizconde; el demandado es viudo, goza de buena posición y hasta fue de Alemania, satisfecha, en el Este pqdría re- una- jauría. Se conocían desde master Un. g i a t e r r a 1911. signarse más; fácilmérite a; reconocer -con día se encontraron casualmente en un hoLa recordó el mismo Austen. Ghamber- carácter definitivo sus nuevas fronteras octel de esta corte, y el Sr. -Williams le dijo lain en el discurso que pronunció en la cidentales. a la señora Lubbock, que era la mujer, más Cámara de los Comunes el 24 de este mes. blanca del mundo- -para algunos ingleses Consiste en impedir que la misma potencia La Emperatriz Carlota la gente; cuanto más bfenca, es mejor- domine en el Continente al par que ea las, La muerte no se apiadó de ella hasta la que quería- hacerla su esposa. Para mostrar; costas de la Mancha. Esta política fue causa de las guerras contra España, contra la edad avanzada de cerca- de ochenta y cinco su seriedad, la llevó acto seguido a casa de ¡Francia de Luis XIV, de la Revolución y. años. Pasó más de medio siglo en la eter- un joyero y le. compró un anillo, y a la de- Napoleón. I, y en gran parte de la con- -na noche del espíritu, después de una breve mañana siguiente le hizo un regalo de 200 traía Alemania de Guillermo II, que soñó, época de felicidad y de gloria. A los diez y JibraS esterlinas, casi 7.000. pesetas; pregun- siete años, la hija del Rey Leopoldo I de tó, si era bastante, y la señora pidió 20 licon anexionarse Amberes y Calais- Una Francia fuerte, ligada estrechamen- Bélgica contrajo matrimonio con el archi- bras más, que le, fueron. concedidas sin diste k Bélgica y dominando en toda la orilla duque Fernando Maximiliano, hermano, del cusión. Ésto llevó al corazón de la; danía izquierda del Rhin, representaría una eter- Emperador- Rey Francisco- José, qu. e a la el convencimiento de que él Sr. Williams, na amenaza para Inglaterra, sobre todo en sazón era. gobernador de Lombardla. Dos a- su vez, era hombre extraordinariameritja liúestra época de submarinos 7 de aerov- años después Austria perdió la provincia, blanco. planos. Contra esa Francia, Inglaterra: tra- y entonces- vinieran los días. hermosos ...más í ós días después, el S r. Wüliams habló! taría de coligar las principales potencias monótonos jde lVIparria- r ía perspectiva de con su prometida, y afirmó que sus: hijas se continentales. Pero esa Francia; no existe, contemplar el Mlriáfieó n ásta la edad de oponían al matrimonio, en vista de. lo cual por la simple razón de que- Francia no es in- setenta años como se expresó en una car- deseaba poner punto a las relaciones. El dependiente desde el punto de vista finan- ta Carlota María Amalia. Su anhelo, casi deseo causó a l a dama la natural contrarié- tei eró, y 1 esa independencia ningún país enfermizo, de actividad constante, acogió, dad, y sin duda para consolarse, y, a pesar; sin capitalista puede hacer política internado- pues, con verdadero júbilo el ofrecimiento de que había aceptado ya cerca de 4.000 deja- Corona imperial de Méjico, Imperio duros, en metálico y regajos, la señora Lubnal independiente. bañado Por otra parte, Alemania ha renunciado cesó de por das: Océanos En Méjico no bock pidió al Sr. W- illiams que le- dieraaumentar, la exaltación a sus grandiosos planes marítimos. El irre- de la juvenil Emperatriz. Pero romántica otras 500 libras, a lo cual se opuso el de- el. dentismo alemán se dirige hacia sus fron- de Juáre ¿y la; decisión de Napoleón. avance mandado. Entonces lá plantada presentó lál III de teras orientales. Pasarán muchos años an- repatriar las tropas írancesas, destruyen de demanda, que dio lugar al pleito. Lo más sorprendente del caso es la de- tes dé que el Réich pueda pensar seria- repente su optimismo. El 9 de Julio de 1866 mente en la reconquista de Alsacia- Lorena, abandona Méjico para influir personalmen- fensa del denJandado. Envez de. alegar qúis 1 y muchísimos años más antes de que dirija te en la decisión del Soberano de Francia; había desistido del matrimonio para! no opo nerse a la voluntad de sus hijas, o porque su mirada hacia Amberes y la Mancha. Inglaterra está, pues, relativamente tran- pero tres entrevistas le demuestran clara- no sentía por su novia el suficiente cariño 1 queda la quila respecto a la suerte de la metrópoli, mente que no a- vacilar, menor ilusión. Su ra- o porque prefería romper un noviazgo a zón empieza y, después del fusi- pedir el divorcio más adelante, o porque y puede dedicar su actividad diplomática lamiento de su esposo en Quefétaro, los a asegurar el famoso equilibrio continen- intervalos dé lúcídéz resultan cada vez me- le daba la gana, su defensor alegó que. el tal. No se aliará con Alemania contra frecuentes. Su, última catta sensata data Sr. Williarns era uri perturbado y un imFrancia, porque no cree que Francia cons- nos 24 de Marzo de 1 SSg. Durante mjás de bécil, un irresponsable, cuyo estado natudel ral es, la. borrachera, alternada con raciones tituya para ella una amenaza seria. Pero medio siglo- la mu erte; no: -quiso á ¿4 f de, cocaína y morfina. Téngase en cuenta! tampoco se aliará con Francia contra- Ale- de la Emperatriz trágica. que la demandante no era. ninguna chiqui- manía, -porque la primera no es; bastante lla, sino. mujer hecha y derecha, con expedébil, ni la segunda peligroáamente fuerte. riencia en. estos, asuntos; y no se pierda da Lo que quiere Inglaterra- es asegurar en vista además que el noviazgo sólo duról Europa occidental el; statu quo creado por cuarenta y ocho horas, desde el 9 de Enef. o el Tratado de Versa lles; es decir, asegurar de 1524 hasta el 11 del mismo mes y año, a Francia contra una guerra de desquite, y plazo que bastó para que e l S r WiHianiáasegurar al Reich contra la repetición de la obsequiara con generosidad verdaderauna nueva invasión como la del Ruhr. Quiemente espléndida. Aunque el matrimonio re, que en el Continente reine la paz, inTodo el mundo sabe que en Inglaterra no llegara a efectuarse, nadie podrá decir; dispensable para que prosperen sus negocios. conviene pensar Jas cosas dos veces antes La spleiídid isolaiion... Inglaterra no de empeñar la palabra de matrimonio. El que perdió su tiempo. Las alegaciones. presentadas por el dequiere estar mezclada en los asuntos eu- hombre que, sugestionado por los encantos ropeos, por ningún pacto que la obligue. -a de una dama, le ofrece su nombre y se fensor del Sr. Williams, fueron desestimaintervenir más allá de sus conveniencias. arrepiente después, está expuesto a ser ci- dáspor el Jurado, que le condenó a. pagar. Ha rechazado el Protocolo de Ginebra, (tado. ante los i Tribunales para responder, de otras 500 libras en concepto de daños y perporque éste exigía una extensión- univer- su; ligereza e iridemnizár; los; perju- kios cau- juicios. Es decir, que la justicia ha dejado sal de nuestras obligaciones como dijo sados- -si- la parte contraria los demuestra amplio margen para reflexiones sobre la Chamberíain. Según Lloyd- George, Polo- y- se halla exenta, de responsabilidad- -me; inteligencia, la prudencia y el tacto del senía detenta cinco A. lsacias, y de sus 27 ini- diarite el pagó dé una- suma que puede o sci- ñor Williams; pero no. admite dudas sobre llones de habitantes, nueve millones- viven lar. entre una cifra importante y un cén- su cordura y sobriedad, virtudes contrarias. a los defectos de que él mismo procuró hadentro de sus fronteras por la fuerza de timo. Las demandas de este género han palas armas. Inglaterra no quiere compro- sado un tanto de moda, y sólo una propor- cerse responsable para que no lo. tacharan rriieíerse a garantizar las fronteras artifi- ción insignificante de los noviazgos rotos de, ligereza. Son punfos des vista raros, tan 1 ciales de Polonia. Que este, país trate de entre ingleses llega a conocimiento d, e la incomprensibles como el gusto y los caprillagar a un acuerdo con Alemania, o que Justicia; además, los pleitos motivados- por ohos. de la gente que ha intervenido en lá entre en un sistema defensivo; pero que tales inconstancias 110, gozan de popularl- comedia. Lo único que resulta claro es que haga tina cosa u otra sin solicitar la inter- dad- sino entré pe r sohas de dudoso- gusto- y los protagonistas no eran tan blancos como vención de- Inglaterra ni de otra potencia medio pelo, para quienes la horrible pers- al principio creyeron; más se acercaban al occidental. -La. Gran Bretaña no. es amiga- pectiya de eniff íe Vpúfeliccir, sús- -ás üntó s- castaño- muy obscuro: -Antonio. Luis Londres, Marzo, 192 de una Polonia instrumento. ¡de: Erancia és. i- m á s p r í í a d í POR TELÉGRAFO, CABLE, RADIO Y CORREO D E L E X T R A N j É f t Q Boletín de! Día. La Eterna Política, de I n- A B C en Inglaterra. Pala bra de Matrimonio