Archivo ABC
ArchivoHemeroteca
ABC MADRID 06-07-1917 página 3
ABC MADRID 06-07-1917 página 3

Descripción

DE TODO EL MUNDO, POR CORREO, CABLE, TELÉGRAf O Y TELEFONO jg EDITADO POR LA PERIODÍSTICA cPRENSA ESPAÑOLA ABC wWi fí! r í lá i DE TODO EL M U M DO, POR CORREO; CABLE, TELÉGRA FO Y TELEFONO EN EL CIRCULO LIBERAL DE MADRID ASAMBLEA DE DIPUTADOS Y SENADORES QUE ACATAN LA JEFATURA DEL CONDE DE ROMAXONUS, VERIFICADA AYER TARDE. (FOTO DUQUE) CUESTIONES DK ACTUALIDAD F U E R Z A S T Y RESERESPAÑA VAS ORIGINALES DE Proposiciones de estos artículos: Primera. La neutralidad española representa, entre otras cosas, una enérgica reacción contra el extranjerismo y la negación üe España. Segunda España tiene fuerzas y reservas originales que es preciso aprovechar para emprender ana política rebueltamente nacional. Voy á tratar de demostrar, lo mejor que sepa, estas dos proposiciones. Y lo haré mezclando desde luego su contenido y las razones que se me alcancen para establecer rotundamente la tesis, porque, en realidad, estas dos proposiciones no son más que una y pudieran condensarse en el epígrafe de la segunda. Hace unas cuantas semanas reproducía El Imparctal unas bellas páginas de José Enrique Rodó, en que el escritor americano muerto recientemente dedicaba un ardiente del novelista venezolano Díaz Rodríguez, en que aparece una idea henchida de persuasión y de esperanza; una idea honda y preciosa- -esei ibe Rodó- que me ha quedado en el alma prend da como una estrella, ragiéndomela de luz y diciéndeme- por- lo T ajo cosas- de cansuek y- de fe jlt i Qué cosas son ésíis que inspiran á Tíf k tan vehemente, tan coetico comentaelogio á un libro- -Camino de perfección- rio? Es un vaticinio de poeta. Piensa Díaz Rodríguez que en vez de pueiblo degenerado como tontamente proclaman algunos, del pueblo español puede afirmarse más bi n que es un pueblo primitivo Así nos lo dice alquella sensación que el pueblo español nos produce de una reserva intacta de fuerzas. Y añade Rodó: Abramos el corazón á este vaticinio que viene de poeta. Acaso la defensa de una gran originalidad latente, que aguarda su hora propicia, imprima hondo sentido á esa resistencia, aparentemente pedagógica, contra el europeísmo invasor, predicada hoy (predicada ayer, me permito yo intercalar) por el alto y fuerte Unamuno. A esta idea, á esta confianza en las fuerzas y reservas originales de España, tengo yo, tenemos muethos españoles abierto el corazón hace mucho t empo, y sin esperar á que el escritor americano escribiera su poético vaticinio. Vaticinio que no es suyo, ni en el fondo ni siquiera en la forma. Rodó, cuando se entusiasmaba tanto con la originalidad del pensamiento de Díaz Rodríguez, no recordaba, sin duda, que otro poeta, nada menos que Chateaubriand, había lanzado muchos años antes el vaticinio, la profecía que el escritor venezolano no hace otra cosa q. ue copiar: ...Habíamos atravesado la Iberia de los antiguos cristianos en el momento en que exhalaba, po ¡decirlo así, su último suspiro, antes de la invasión de Bonaparte, v nos liabíamos aficionado á esa valerosa nación, tanto por nuestros recuerdos como por la s ngular profcc a aue habíamos hecho de su resurrección en él Genio del Cristianismo, cuando dijimos: España, separada de las demás naciones, presenta á la Historia un cafáoter más original; la especie de estacionamiento en que reposa le será útil algún día, y cuando los pueblos europeos estén gastados por la corrupción, ella sola podra aparecer con brillo en la escena del mundo, porque la esencia nacional, el fondo de sus costumbres, habrá seguido subsistiendo en ella... Guerra de España. Sin haber leído á Díaz Rodríguez y sin necesidad de tomársela prestada á Chateaubriand, que á su vez la tomó de otros muchos historiadores antiguos y modernos, nacionales y extraños, esa profunda fe, esa ciega fe en las fuerzas originales de España ha estado siempre tan arraigada en mi espíritu, que ella ha sido constantemente la propulsora de todas mis modestas, pero tenaces campañas periodísticas. Por eso no puedo menos de reírme, que es más cómodo que indignarse, cuando por esos periódicos de Dios, ó del diablo, incluyendo el viejo y sesudo Times, me zarandean á propósito de mi germanofil h. Lo que ocurre es que, habiéndose estimulado y avivado ferozmente el extranjerismo de ciertos escritores españoles con motivo de la guerra, mi nacionalismo, mi españolismo, ó como quiera llamarse, que no es otra cosa que esa profun dp y ciega fe en las fuerzas vitales de España de que antes hablábamos, se ha esti mulado y avivado tamhién. Y una observ i ción antes de continuar. Nadie ha repuse do tanto como rTo, al escribir, el empleo H 1 T- ni uñera nersona. Muchas veces he r.

Te puede interesar

Copyright (c) DIARIO ABC S.L, Madrid, 2009. Queda prohibida la reproducción, distribución, puesta a disposición, comunicación pública y utilización, total o parcial, de los contenidos de esta web, en cualquier forma o modalidad, sin previa, expresa y escrita autorización, incluyendo, en particular, su mera reproducción y/o puesta a disposición como resúmenes, reseñas o revistas de prensa con fines comerciales o directa o indirectamente lucrativos, a la que se manifiesta oposición expresa, a salvo del uso de los productos que se contrate de acuerdo con las condiciones existentes.