Archivo ABC
ArchivoHemeroteca
ABC MADRID 20-08-1911 página 6
ABC MADRID 20-08-1911 página 6
Ir a detalle de periódico

ABC MADRID 20-08-1911 página 6

  • EdiciónABC, MADRID
  • Página6
Más información

Descripción

B presentarse- la popularidad de la empresa, Ja paiabra real; nada le convenció. Se cerró á la banda, y no hubo medio de apearle de aquella su obstinada negativa. Cuando ya Godoy hubo apurado toda suerte de argu mentos, dijo al Rey que ya la cosa no tenía remedio; que habían circulado las órdenes infladas. -de su puño y letra, y que la salida deía í a aí feY 4 ta $l e. r- v H í m a M a j a n t e s O í l o des- SCt 3 M 0i aIíb. c. a -rCOntesta Í) i Cail s; W ¿Despáchese un alcance árevienta caballo que de: íeng? la. salida dé la expedición. ¿Así se hizo. y v s- o DE AGOSTO NOTAS FEMENINAS EEHCf 0 íN PAü. O. Cuando llegó la noticia á Fez, recibióla Badía como, quien recibe un mazazo en la cabeza. ¡Dos años perdidos! ¡Perdido, quizá jjara siempre el único momento de agran ¡dar. la patria áT s puertas de casa! Los conjurados le apretinaban con v el. compromiso contraído... le instaban ú que se- -quédase, prescindiendo de. España. Se bastaban ellos solos. Debió- hacer, esfuerzos: -extraordinarios de ingenio para desprenderse de ellos. Su alinajsstoica. no perdió la- serenidad- en aquel difícil trance, y- valiéa- r- dose de Muly- Abduselarn, -hermano 1 dé! -Sultán, sobre- el. cual ejercía la, fascinación Hél talentoy bbtuvo. cartas para él bey de ¡Túnez, saliendo: en peregrinación á la Meca el 30 de Mayo: de i8o s El pretexto: se había convertido en objetivo: Ya tio se debía á su patria: sólo se debía á la ciencia. Dirigióse á Oriente abrumado, por. la peaa, caminando lentamente hacia Argelia. Multitud considerable de partidarios y ámios le acompañó hasta más allá del puente el Sébú. Siguió el curso tortuoso- del Inauen, remontando su corriente, recibiendo á su paso el homenaje y la adhesión de los cabiléñós del Rif. y de los Braber, que se agolpaban ante su caballo, deteniéndole con obsequios y ruegos. Llegó a Taza, situada en el último contrafuerte del Atlas Medio, n la puerta del Mogreb, en el único paso jque se abre entre el Rif- y el Atlas Medio, y allí pasó tres días admirando el cuadro dé aquella ciudad, situada en lo alto de Una roca escarpada, coronada de muros, sobre los cuales destaca como un obelisco su agutío minarete, ciñendo aquella península pefiascpsa una serie de terrazas pobladas dé. (jardines colgantes, regadas de arroyuefos y cascadas, en cuya arboleda anidan el ruiseñor y la tórtola. Cara á la Meca, camino por l a orilla del ríoMessuin, acampando en su alcazaba, yx de aquí pasó á vadear el Muluya y el Zá, cruzando el desierto de Angad, Sidi Melluk (hoy francés) descansando al fhr en IJxda. Ya en Uxda, supo Badía que Solimán Sospechaba de su conducta y era conocedor de. que había tenido conferencias secretas éon los conspiradores. No se atrevió a detenerle, temeroso de su prestigio: y recelo- só del gránmímero. dé partidarios que le Bubiéíran defendido. El territorio de Uxda estaba á medio su. blevar. Nadie obedecía á: nadie. Pretendió Bádía salir para Tremecén, y. él cheik se opuso. Badia llevaba consigo, á más de su equipaje y mujeres, dos renegados españoles, un esclavó y algunos berberiscos fieles. ¡Pistola en mano, obligó al cheik á abrir las puertas de la ciudad, y. ya se: había enteridido con los: insurrectos, proporcionándose na escolta para cruzar la frontera de Arelia, cuando llegó un cuerpo, de tropas del ultán, deteniéndole. f f V JO SE ÉSCUDER y, (Cmchiirúmíiñana. y mi juicio, marca- una orientacioa que la expropiación para paiceiar. Y tocamos ya á la cuestión principa! q me separa del Sr. Gómez Tortosa: cree ini distinguido antagonista- que la, agricultura Para las fiestas noc- es uña industria suigéñeris, sustraída, á las turnas en los gran- leyes generales del desarrollo- seconómicó; des casinos dé las pla- no puedo- admitirlo; si así: aconteciérariaa yas veraniegas es. muy leyes económicas: no lo serían; sostener esapropiado el l i n d o ta tesis equivale á, decir que la iej de la. abrigo que reproduce gravedad se da en los líquidos, pero no en e l dibujo adjunto. De- los gases. be confeccionarse con Las circunstancias que enumera el scñoi satén blanco, sembra- Gómez Tortosa- rio constituyen; graVe indo 1 dé éntéjriaéiasi. biah- conveniente para la organización agraria 1 cas y bordado con se- en grande; ni la sequía, ni los pedriscos, ni da. El forro ha de ser la multiplicidad de labores lo son. Tam- negro. poco el dueño. ó gerente de una fábrica ve -Este- abrigo sienta lo que hacen todos los operarios ea tocios muy bien encima de los- momentos de la jornada de trabajo; las un. vestido de museli- industrias derivadas (cría de gallinas, co n a b l a n c a nejos, gusanos dé seda, etc. tienen la misma Aumenta s. u: ele- razón de existencia en un latifundio que gáncia- si. se; hace de en la llamada pequeña propiedad. látela indicada, color Si en Italia existen intermediarici, quie. violeta vivó, con- len- nes arriendan; grandes extensiones de terre. tejuelas. jv cardado: -no a los dueños para subarrendarlas á los del, mismo tono. ÉÍ ca- cultivadores, rio quiere decir otra cosa, sino pr violeta es tino, de que el régimen agrario es análogo a! ¡mes. los goé haá de predo- tro; quizá peor, -pues introduce un elemento rninar el próximo In- nuevo. que consume parte, del producto. vierno. El. sombrero á pro? La distribución de los cultivadores pgr pósito para e ta. tyilette ha de ser de tama. la campiña, trabajando cada, cual él trozo ño grande, hecho con terciopelo. negro y anejo á su casa, es una situación que. obeplumas ó penacho. dece á razones tradicionales é históricas, pero que, en muy, Nada- decimos del curte; íel abrigo, por- lejos de ser elmi humilde juicio, -está rotuideal. El suelo se fue que la figura ló indica con toda claridad. Es la arreglo sencillamente, una salida de teatro de rando poco á poco; de nivelación j terrestre dé ías sinuosidades la corteza mangas amplias, rozagante, clüc, les obligaron en muchas ocasiones á vivir junto al terruño, recién puesto en cultivo; en otras, las frecuentes incursiones de ban TRIBUNA LIBRE das armadas fueron causa de que S culti- vadox. se refugiara en los pueblos, defendidos por murallas y castillos emplazados en ios lugares más altos y estratégicos; de esta Herencia se resiente nuestra vida actuaL El Sr. D. Antonio Gómez Torlosa ha te- Precisa soportarla, mejorándola en- lo posinido la bondad de leer mi artículo ante- ble; lo que no es tan lógico e tomar rior y de oponerle algunos reparos ¡contesto tales exigencias por definitivas, consideráncon mucho gusto á sus corteses: y discretas dolas idéales. observaciones. El espectáculo de las rnil blancas casitas No desconozco el pensamiento ni el al- canee que al ipismo dio el Sr. Canalejas en desparramadas por la verde campiña nos su famoso discurso: al tratar de los latifun- seduce porque á él estamos habituados, y dios; jamás, he supuesto, ni de mi artículo pintores y. poetas lo tomaron como tema. de; se deducía, -que el Sr. Canalejas hubiera sus producciones artísticas; pero si refleamenazado, con despojar de sus, fincas, ex- xionamos acerca de él, veremos qué es anátensas á. los propietarios aque, las cultivabaii; logo al descuartizamiento de una gran fácon celo é inteligencia: aÍ; dirigir sus; tiros brica de tejidos, llevando, verbigracia, los contra los terrenos dedicados z pastos ó telares á los patios de las casas de los. obrecultivados de manera, rudimentaría, pre- ros, á. los minúsculos talleres medioevales; tendiendo su parcelación y reparto, seguía nadie sostendrá que tal medida favorece éC el Sr. Canalejasr- -á mi juicio- -una direc- 3 a producción: industrial, al abaratamiento ción errónea. conseguir el progreso agrí- y difusión: del producto, al bienestar social, cola por el fomento de la. pequeña propie- en definitiva. dad. Tales conceptos en, boca, de- político, tan Convengo con el Sr. -Gómez Toríosa en influyente han 4 a- do auge á las. tendencias las dificultades que ofrece, dentro de la oranálogas, y esto es lo sensible tras la idea ganización actual de la propiedad, él aparde repartir- lo inculto ó mal cultivado vie- tamiento del jornalero del campo en que ne el deseo, de hacer. Iq mismo con, lo bien trabaja: aquí, en Zaragoza, hay campos que cultivado; y productivo. distan de la ciudad veinte kilómetros; cuan La desventaja social, originada por estar do los hombres y las caballerías llegan á las fincas enTmanos de dueños abandonados. ellos, están ya fatigados; el rendimiento ó ineptosj: quienes disminuyen él acervo co- útil de la jornada se disminuye; á esto conmún social, -no obteniendo, de sus fincas, el tribuye en grado sumo la parcelación- de la, rendimiento- que éstas son capaces áe dar, propiedad. Así, verbigracia, para la trilla puede ser. (Obviada: sin; acudir á las parcela- es- preciso llevar hasta la era, desde fincas ciones; al- Parlaniento. inglés- se presentó un minúsculas desparramadas por la cainpiña, proyecto deiey en el cual se establecía que. los fajos de trigo, consumiendo- ua caudal todo, propietario- pudiera ser desposeído de de tiempo y trabajo grandísimo- igual peusu finca, después de. indemnizado, por quién irre, por ejemplo, con la vendiniia, la recoo freciera. yí diese caución de obtener de. el! á lección de la oliva; -etc. Son los gra -isimos majiO- pes, rendimientos qtte- ios QbteiHdos. por inconvenientes de ía. -propiedad. rustica at- o. -el dueño; s utaa aplicación: novísima de la, mizada. expropíacioii forzosa por causa dé utilidad f No creo que pueda afirmarse publica. H jróyectojHgjdíg h pj- erp, á que todas Jas d l LA MODA AI. DÍA LOS LATIFUNDIOS Y EL

Te puede interesar

Copyright (c) DIARIO ABC S.L, Madrid, 2009. Queda prohibida la reproducción, distribución, puesta a disposición, comunicación pública y utilización, total o parcial, de los contenidos de esta web, en cualquier forma o modalidad, sin previa, expresa y escrita autorización, incluyendo, en particular, su mera reproducción y/o puesta a disposición como resúmenes, reseñas o revistas de prensa con fines comerciales o directa o indirectamente lucrativos, a la que se manifiesta oposición expresa, a salvo del uso de los productos que se contrate de acuerdo con las condiciones existentes.