Archivo ABC
ArchivoHemeroteca
ABC MADRID 09-02-1909 página 4
ABC MADRID 09-02-1909 página 4
Ir a detalle de periódico

ABC MADRID 09-02-1909 página 4

  • EdiciónABC, MADRID
  • Página4
Más información

Descripción

A B C, MARTES 9 DE FEBRERO DE 1909. EDICIÓN 1. PAG. 4. Llegó leí Eerrityoat y salimos para Catana. s El Sr. Pérez Caballero visitó en Catana al cardenal Francisca Nava, y distribuyó entre el Comité de socorros, el arzobispo y el alcalde unos 25.000 francos. jBendita sea la caritativa España! los veinte años y un día... Y el agua, huyendo por el arroyo, al borde de las aceras, despreciada é inútil, se precipita en sucio caudal en las alcantarillas, donde halla su tumba todo lo que sobra... Boletín Meteorológico de que estuvimos á vaPero, en fin, para que podamos quejamos rios grados bajo cero... Recreándonos en el de la lluvia, es necesario que se presente cielo azul limpio de nubes, nos sorpren- Por eso la pedimos en las épocas de sequía FRANCO FRANCHI. dieron las terribles estadísticas de la Pren- alarmante, que luego vuelven á formar parRoma 3 Fsbrero 1909. sa médica; y al saber que el aumento ae la te de nuestros ideales en los días lluviosos. enfermería tuvo por causa la sequedad del La vieja Penélope debería tener también NUESTROSGRABADOS ambiente, sentimos deseos de salir á gritar un paraguas para abrirlo y cerrarlo sucesien medio de la calle, como en nuestra más vamente. No seria, en verdad, el símbolo I a bailarina Truhanovra. tierna infancia: ¡Que llueva... ¡Que llue- menos exacto de la vida humana. Por separado damos cuenta del debut va... ¿Por qué no habrá llovido... ¿Acaso ANTONIO PALOMERO de la bailarina Truhanowa y de su compa- se seguirá por los espacios la misma polítilero Paul Frank, verificado anoche en el ca hidráulica que practica en la tierra el seteatro de la Zarzuela. ñor Sánchez de Toca. ¡Venga á nos el agua QOPLAS DEL MARTES Nacha Truhanowa es una de las más de las nubes, aunque sea con contador! LOS TRES MARIDOS BURLADOS notables artistas coreográficas que han pifin llovió... Y á las primeras gotas sado los grandes escenarios europeos. Mí- no ¡Por faltado entusiastas que lanzaran un Asistí al bautizo, han mica de primer orden y creadora de danzas ¡viva la lluvia! tan sincero como elocuenpor ser raro el caso, originalísimas y sugestivas, entre ellas el te. Y este ¡viva! fue un grito nacional. ¡y vaya un estreno el del Pasadizo, baile de Salomé, en París siempre ha sido Nuestros pulmones respirarán gozosos, con dicho sea de paso! acogida con estusiásticos api a 11- os. la grata humedad necesaria para su vida. Ya es arduo el intento: Los árboles remojarán con júbilo sus secos explosión en nn polvorín. coger un tesoro Oportunamente dimos noticia del si- brazos y su viejo tronco antes de engala- y llevar á Eslava un clásico cuattto slestro ocurrido en el laboratorio de mixtos, narse con las pompas primaverales. Se esdel Siglo de oro. en San Carlos, población inmediata á San ponjarán las semillas en su lecho, donde ¡La obra peregrina aguardan su momento de triunfo al recibir Fernando. de un fraile fecundo... 1. Fue su origen habérsele caído al carpin- el agua salvadora. Y los? pobres labradores tero de cureñas Juan Martínez un proyectil sentirán sus recelos desvanecidos, mientras ¿Qué diría el pobre Tirso de Malina desde el otro mundo? Jqne trasladaba de un sitio á otro) y que al vuelven á recitar la fábula de la lechera. ¡Que llueva, que llueva... Y el caso es caerse estalló, matando en el acto al infeliz Pasaría un susto que, con más ó menos firmas, esta solicitud breroy produciendo el incendio. de marca mayor. Las sucesivas detonaciones que empeza- se presenta casi todos los años por la mis- ¡Pero vaya un cuadro... ¡Qué hermoso y que ron á escucharse en la población alarmaron ma fecha. Y apenas la vemos atendida, ya de forma y color! al vecindario, que en gran parte se trasladó quisiéramos no haberla presentado. No es en los campos, naturalmente, donde sienten ¡Lectores amados: á la población de San Carlos. á Eslava hay que ir! Las autoridades técnicas dictaron las los espíritus esas oscilaciones acusadoras portunas disposiciones al objeto de que la de su eterna inquietud y de su permanente ¡El ver á Tres podres maridos burlados siempre hizo reír! catástrofe tuviera menores proporciones, desasosiego. Es en las ciudades, cuyos ha pues á las diez de la mañana las explosio- bitantes no Saben nunca lo que quieren, ni ¡Qué luz... ¡Qué alegría quieren tampoco lo que saben, puesto que ses continuaban en aumento. ¡Qué gracia de asunto. J Jnnto al polvorín en que las explosiones saben poco y quieren mucho menos... ¡Que ¡con unos romances que los firmaría se sucedían existe otro que se encontraba llueva, que llueva! decimos ahora en Mael fraile difunto! abarrotado de granadas con espoletas de drid, un poco alarmados por las amenazas de algunas infecciones. ¡Viva la lluvia! heLos reventadores distintos y grandes calibres. fueron los burlados, Se temía que allí se comunicase el incendio, mos gritado también en cuanto cayeron cuatro gotas. Mas, seguramente, si el chaparrón y los de la suerte fueron tres autores; y ya se desistía de salvar el material, esperán ¡lostres aclamados! dose nuevas y más terribles complicaciones, se formaliza, empezaremos, como siempre, á osando el comandante de Artillería D. Juan murmurar del agua y á esquivarla y á comEl triunfo me explico batirla, temerosos de los peligros que pueda Lózaga, provisto de una piqueta, se decidió del principio al fin: á abrir la puerta del polvorín, y secundado originarnos. ¡Nada hay como la higiene en ¡Chócala, Vicente Chócala, Perica 1. con temerario arrojo por el tercer condesta- las ciudades para amargar las horas de Chócala, foaquín ble de la Armada D. Francisco Fernández quien quiere ceñirse á sus rígidos y saludaPastoriza y otros de su empleo, cuyos nom- bles preceptos! Galana y sencilla ¡Que llueva, que llueva... Recién agrade feres lamentamos no conocer, en aquellos la música hermosa. momentos precisos, y del redactor de La cido el beneficio, buscaremos un sitio no ¡Qué sabor antiguo, y qué tonadilla Correspondencia de San Fernando, D. José Luis beneficiado... El agua azota el rostro, y esto tan jacarandosa! Jiménez Guenv, penetraron, empezando á molesta. Nuestros miembros reciben con la Todo muy bonito retirar con actividad los proyectiles, deposi- humedad las caricias del reuma, y una trisy todo inspirado. teza verdaderamente invernal se apodera tándolos en lugar seguro. del espíritu, que ya saltaba de gozo acos- ¡Vaya un intermedio! ¡Vaya un numento tumbrado á las caricias del sol... ¡Antipátiel del afeitado! íQUE LLUEVA! cas horas... ¿Quién, sin necesidad, las vive ¡Eres un valiente por la calle, expuesto á sus horrores insu ¡QUE LLUEVA! fribles... ¡A casita, que llueve! Cabe los rojos ¡Eres un ¡Eres un gachó! Vicente... maestro, querido T isfrutamos un invierno cruel, con apa- troncos que irradian suave y confortable ¡Vicente Lleó! riencias de bondadoso... El rey terri- calor, en compañía de nuestros recuerdos ó El libro está lleno ble de las barbas blancas pasa, disfrazado, de nuestras esperanzas, ¡con qué placer nos de frases discretas. por nuestro rincón, acaso convencido de que enteramos de que está lloviendo... Y si si nos asusta le huiremos y no podrá ejer- nuestra curiosidad nos empuja un poco, ¡Vaya un trabajito acabado y bueno el de los poetas! cer su tiranía. La lluvia, la nieve, el viento sentados junto al balcón, á través de los huracanado, todos los personajes simbólicos cristales, veremos cómo pasa la gente sorRépide dio al arte que figuraban en las clásicas alegorías in- teando el peligro por que clamaba. todo su caudal, Hombres y mujeres cruzan de prisa, en- y además Dicenta, que puso su parte, fernales han- desaparecido de la presente por respeto, sin duda, á las ideas modernas, fundados en sus impermeables, calzados los como es natural. que predican el odio al centralismo, Ello ha protectores chanclos. Sostenidos por nermotivado también la falta de aquellas esti- viosas manos, los paraguas, chorreantes, Sin dulce guayaba, mables crónicas donde una pluma cálida describen en el espacio caprichosos signos ni tiples resueltas, maldecía de las crueldades del frío. Los para evitar encuentros... Corre que se las se chupan los dedos de gusto en Eslava viejos clichés literarios que dormían en la pela quien no tiene coraza protectora. Los ¡No hay que darle vueltas! imprenta esperando la llegada del invierno perros también aprietan el paso. Los coches El ingenio rico van como centellas... Solo, de tarde en tarsiguen durmiendo hasta nuevo aviso. triunfará por fin. Y, sin embargo, ahora más que nunca, es- de, una pareja insensible al mundo exterior Vicente! ¡Chócala, tarían en su lugar las maldiciones y las pro- camina despacito bajo nn solo paraguas, ¡Chócala, Chócala, Joaquín! Perico! ¡testas. Ese sol que ha lucido sin interrup- como Pablo y Virginia bajo la misma hoja JosÉJACKSON YEYAN ción todas estas tardes contribuyó con sus en la estampa que todos hemos admirado á falsos esplendores á la crueldad invernal, tanto más dolorosa por cuanto se ha producido de una manera solapada... ¡Qué hermoso día! exclamábamos disfrutando del engaño... -Y al siguiente nos enteraba el

Te puede interesar

Copyright (c) DIARIO ABC S.L, Madrid, 2009. Queda prohibida la reproducción, distribución, puesta a disposición, comunicación pública y utilización, total o parcial, de los contenidos de esta web, en cualquier forma o modalidad, sin previa, expresa y escrita autorización, incluyendo, en particular, su mera reproducción y/o puesta a disposición como resúmenes, reseñas o revistas de prensa con fines comerciales o directa o indirectamente lucrativos, a la que se manifiesta oposición expresa, a salvo del uso de los productos que se contrate de acuerdo con las condiciones existentes.