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ABC MADRID 06-02-1909 página 7
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ABC MADRID 06-02-1909 página 7

  • EdiciónABC, MADRID
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A B C. SÁBADO. 6 DE FEBRERO DE i 9 og. gDLCION: 1. PAG. 7. Itos soa los tnlsinos que tie ea las Diputaciones provinciales solas; ni una línea de avance concede. ¿Dónde está la federación? qué se dice- que la constitución federal un antecedente de este proyecto? Si se n excluido las cuestiones referentes á fcoutribuciones y otros servicios del Estado, tomo los militares, ¿por qué hablar de ellos? jPero lo mejor será que lea á la Cámara el jtexto de los artículos que hacen al caso, y vamos con el 407: Cotno consecuencia de lo previsto en el artículo precedente, podrán las mancoinuaidades ser encargadas: i. De la construcción y de lajconservaCíóa de carreteras incluidas en el plan genetal del Estado, que no traspasen el territorio de las provincias mancomunadas. 2, De la construcción de ferrocarriles, tranvías, puertos, obras de saneamiento, caaaies y pantanos en dicho territorio. 3.0 Del establecimiento en el mismo de líneas telegráficas y telefónicas interurbanas. 4. a De la creación, la ampliación ó el sostenimiento de establecimientos é instituios para enseñanza ó fomento de la cultura, salvas siempre las facultades del Estado, Según el art. 12 de la Constitución y las leyes especiales á que se refiere. 5. De la erección, la ampliación, el sostenimiento ó la administración de establecimientos de Beneficencia general ó nacioJial dentro del territorio de las provincias mancomunadas. Y ahora, conocido éste, leamos su antecedente, que dice así: a xt. 406. En materia de Obras públicas, de Instrucción pública, ó de Beneficencia, las mancomunidades podrán solicitar del Gobierno que delegue en ellas servicios de los atribuidos á la Administración central, 3 proponer, cada vez, las cláusulas de la concesión pedida. El Gobierno podrá otorgarla cuando por la permanencia ó duración de la mancomunidad y por las demás circunstancias estime que es conveniente á los interases generales. ¿veis coiiio no venía á cuento el hablar de las contribuciones y del servicio militar? (Bien, bien en la mayoría. Pero lo que pasa es que se dan por ahí suposiciones tales, que hasta se llegaba á decir que el obierno no estaba enterado de lo que sucede ni del alcance de la ley, cuando el obierno, al crear las mancomunidades, ha de hacerlo previo informe del Consejo de Estado. Y además, en cuanto haya una extralimitación, será disuelta la mancomunidad. Por qué no se dice eso? (Muy bien. Bl Gobierno, si erea las mancomunidades, pondrá en la concesión las cláusulas que estime oportunas, como hace en los contratos que concierta con las Empresas nacionales y extranjeras. Y vamos á otro punto, el de los recursos de las mancomunidades. También sobre esto se ha fantaseado mucho; p. ero basta para desbaratarlo leer el texto. Helo aquí: Art. 408. X, as mancomunidades podrán contar, para sus presupuestos, con los siguientes recursos: i. Rentas de bienes propios. 2.0 Donativos y cuotas voluntarias. 3. Subvenciones de los Ayuntamientos y Diputaciones. 4.0 Recursos del Estado, ya en concepto de subvención, ya como asignación correspondiente al costo presupuesto de los servicios generales transferidos á la mancomunidad. 5.0 Arbitrios especiales, impuestos con aprobación previa del Gobierno, á expensas de particulares y entidades que aprovechen directamente obras ó servicios realizados por la mancomunidad, cuando, además del interés general, beneficien el interés privado, Prescindamos de lo que dicen ciertos pe ¿Qué tiene que ver todo esto coa la soriódicos, de las predicaciones de los após beranía y la unidad del Estado? I os tres puntos que se conceden á las toles que no han de venir, y para los cuales mancomunidades son la Beneficencia, las no hay progreso en la credulidad. E 1 ideal político sería qne todos los es Obras públicas y la Instrucción pública, todas ellas en relación, hoy como ayer, en la pañoles diesen á cono. cer su opinión en esesfera local y en la central, entre las cuales tos temas; y ya que eso no puede ser, cuando Cataluña nos na enviado á los solidarios, promiscúan y concurren. ¿Creo que no cabe dudar que el texto ha debemos oírlos, y conocidas sus aspiraciosido suplantado, falsificado, tergiversado, nes, ¿creéis que debemos decirles: I que para hablar de cosas que con el proyecto no pedís se lo concederíamos á las demás reígiones sin dificultades; peroá vosotros, no; tienen la menor conexión. (Aplausos. En 1870 y en otras épocas se han dibu- os lo negamos? ¿Eso es justo? (Grandes jado en España varias comarcas, y Cataluña aplausos. L, a mancomunidad es una institución más que ninguna, pues no se debe olvidar que las cuatro provincias catalanas forma- que ha habido muchos años en España, y el ron una Junta del Fomento y otra para com- Gobierno, con exquisita parsimonia, lo ha batir la filoxera. I entregado á la deliberación suprema del país. ¿Que el 13 de Diciembre ocurrieron cosas Ahora bien, ¿van á regir las inteipretaciones que se han hecho de la ley? (Voces eo Barcelona de gran importancia? Yo tenen los liberales: jOa! ¡oh! Grandes aplauso? go sobre esto mi opinión, pero por hoy me la reservo; para discutir acepto las dos hien la mayoría y en los solidarios. Otro peligro de que hablaba el Si Mo- pótesis opuestas. f et, el de que las mancomunidades absorban ¿Es que el mal, después de las últimas á los Municipios, es un absurdo. ¡Si la ley elecciones de Barcelona, sigue más grave? lo prohibe! y por cuanto la mancomunidad Pues eso quiere decir que el proyecto na es elección de Ayuntamientos, si éstos des- basta, y para oponerse á él no se puede peaparecen, si se van los socios, se acabó la dir el slatu quo, sino otra solución; ¿la tenéis? mancomunidad. (Risas. Por el contrario, ¿es que se considera Yo no pido más que se lea el texto de la deshecha, rota, á la Solidaridad? Entonces; ley; que se lea, y si no parece claro, estamos ¿á que las alarmas y los temores? (Bien. á tiempo para reformarlo. Pero lo que se dis I, a oportunidad en la gobernación deío cute no es la ley, es el problema político ca- pueblos es uaa substancia que si se pierde talán, es la situación especial de Cataluña; no se recobra, y es oportunidad la libertad pues vamos á hablar de ello, pero claro. moral para votar; y yo os digo: ¿la sentís (Grandes, atronadores aplausos de los con- paia dar ó negar lo que se establece en el servadores y la minoría solidaria, proyecto? (Muy bien. Se dice de este proyecto que es nocivo Por haber perdido una oportunidad caporque despierta la ambición, el deseo de yeron sobre España grandes desdichas. cosas inadmisibles para la unidad de la pa- (Rumores en los liberales. Aplausos en la tria. ¡A buena hora se viene á decir que esta mayoría y en los solidarios. ley viene á despertar ambiciones! Lo he dicho en otra ocasión y ahora le No quiero remontarme á casos lejanos; repito: Cataluña, por la fuerza, no tendrá he de traer á vuestro recuerdo los más re- nunca las reformas que consiga; las logrará cientes sólo y en forma tal que para nadie por Jas cuarenta y nueve provincias españolas en Cortes con el Rey. (Bien. sean una molestia, una recriminación. E 1 último Gabinete del Sr. Sagasta, en La normalidad es ahora, por fortuna, 1901, ya advirtió de modo claro las fases perfecta en Cataluña como en toda Españaj por que entraba la política en Cataluña, y ¿por qué aplazar la reforma? entonces, cuando aquí se trató de ello, cuanilío es posible separar la reforma provia do habló el inolvidable doctor Robert, yo, cial de la municipal porque ambas están ínque no estaba todavía en el partido conser- timamente unidas, y en Julio, cuando nos vador, pero que no militaba ya en el liberal, separamos fue con la condición de volver á dije que mis repulsas á ciertas exageradas reunimos para trabajar en la segunda parte pretensiones eran tan firmes como arraiga- de la ley. Así hemos pasado varios meses do se hallaba mi convencimiento de que era discutiendo, ¿y ahora vamos á volver atrás? impotente la ambición desmedida del cen- I as elecciones en Barcelona el 13 de Ditealismo. (Bien. ciembre no son ni siquiera un pretexto; la En 1904 faé el Rey por vez primera á autoridad del Parlamento no se puede soBarcelona; en 1905 y 1906 se promovieron juzgar por cosas así. (Bien, bien. los tristes sucesos que todos recordáis, y Hace tiempo dije que los vientos no sirdesde entonces para nadie es un secreto que ven para piloto (Risas. y en política menos, la situación de Cataluña es una grave pre- porque se fabrican. (Risas; muy bien. ocupación de los Gobiernos. Esto está fresco Vamos, pues, otra vez á discutir la ley en la memoria de todos. en conjunto, con el espíritu de concordia Y surgió luego algo muy elocuente: la que nos animó siempre; colaboremos hasta unión de los partidos más opuestos para el fin, no olvidando que puede ser tanto el afumar una entidad contra los Gobiernos error por acción como por omisión, y no condel centralismo. ¡La unidad nacional! Yo la viene perder la coyuntura que nos brinda siento como el que más, en mi corazón está esta etapa legislativa. arraigada; pero cuando las pasiones braman (Ruidosa y prolongada salva de aplausos. de ira ó de indignación, cuando se ven cierEl Sr. MORET rectifica. tos espectáculos, ¿no es verdad que se comEmpieza diciendo que el discurso del se prende que el alma nacional está herida, ñor Maura ha abarcado tres puntos princique sufre una dolencia que hay que curar? pales y ha servido para desvanecer las le (Muy bien, muy bien. yendas que se habían venido contando ea sPara remediar la situación de Cataluña todas partes. hay dos políticas. Una, la que cree que no se Estoy conforme con S. S. en cjuelas cosas debe conceder reforma alguna mientras por requieren una oportunidad, y ésa era absoalgunos se pidan cosas que todos conde- luta para que S. S. expusiese su opinión. Su namos. señoría ha hablado y ha despejado las du Hay otra, que es la nuestra, no de ahora, das. (Rumores en las minorías liberal y dede siempre: aislar á la sinrazón y satisfacer mocrática. á la razón, (Bien. Todo lo que se ha dicho por ahí se ha I, a primera, la política del recelo, la del negado desde el banco azul, y los peligros que teme el avance, no la queremos, á no y alarmas que se habían sembrado no saser que las Cortes españolas futuras pien- contrarán puerta en esta ley. (Bien eú la sen lo coatrario y lo contrario no tenga ya mayoría; aumentan los rumores ea los e, a remedio, i ños, dejos amigos- de! orador. E

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