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ABC MADRID 21-01-1906 página 4
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ABC MADRID 21-01-1906 página 4

  • EdiciónABC, MADRID
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ABC. D O M I N G O 21 D E E N E R O D E 1906. P A G 4 E D I C I Ó N 1 públicas el pronto despacho del expediente relativo á la instalación de una bomba para la toma de agua que surta los barrios de la Prosperidad y de la Guindalera. X 3 as subsistencias. Después de ser informada por la Comisión, se va á publicar la moción de la Alcaldía presidencia, moción que se traduce en un bando castigando á ¡os defraudadores, en la calidad y en el peso, de los artículos de orimera necesidad. La cláusula que disponía fijar en los establecimientos multados por defrandar al público un cartel avisándolo, ha sido suprimida por iniciativa del Sr. Iglesias. dad, no dejará escapar de sus labios ni el más tenue reproche contra los hombres y el destino... Y esta suprema enseñanza de vida, esta entereza, esta españolísíma y castiza dignidad, este profundo y maravilloso respeto á sí mismo, es esta leal amiga, es este fino acero, es esta espada quien se los ha proporcionado. Y esta es la tradición más alta, más insigne, de nuestra España, que nosotros sentíamos surgir ayer en una sala de armas y que deseábamos ardientemente el no ver extinguida. AZOR 1 N cuencias desconsoladoras, porque ellas nos han hecho ver que puede llegarse á perder la fe en ia lotería, y como es una de las poquísimas cosas en que creemos y esperamos los españoles, si perdemos esa fe, ¿qué va á quedarnos? Las noticias de Algeciras trajeron ayer su algo de satisfactorias p a r a nuestro amor propio de españoles; pero está en desgracia ese trascendentalísimo acto de política y diplomacia internacional. Otras sensaciones más profundas embargan ¡a atención de nuestro pueblo. Un día es la cogida de Bombita en Méjico; otro es el T ío en un sorteo de la Lotería Nacional. Terminó el juicio oral sobre la causa seguida al niño homicida. El jurado no tuvo compasión para el precoz reo. Como se ve, los hombres del día fueron ayer niños. Otra especie de juicio oral fue la sesión del Congreso, donde el diputado Lerroux actuó de fiscal, haciendo salir de su boca acusaciones tremendas y enumeración de delitos, como pocas veces se oye en el Palacio de Justicia. Sino que esta vez ¡os acusados están lejos: en las pequeñas Repúblicas americanas, á las que, como es sabido, tienen poco que envidiar, en punto á desbarajuste, nuestras populares corporaciones municipales. Ei interés político estuvo en el Senado, y no ciertamente en la sesión, sino en una de las secciones, donde Maura había de informar sobre el proyecto de ley castigando Sos delitos contra ia Patria y el Ejército. Hizo el jefe de los conservadores un notabilísimo discurso, que asombró por su elocuencia, pero que desilusionó, porque lo esencial, lo que todo ei mundo esperaba que dijese: su opinión sobre la jurisdicción que ha de intervenir en dichos delitos, se la reservó. Es decir que de la charada que trataba de descifrar, reveló algunas de las vocales; pero se caSió otras, y con ellas el todo que era lo que la gente y el Novejarque autor de ia charada querían saber. P o r i a noche inauguró el curso ¡a Academia de jurisprudencia, y Canalejas, con este motivo, leyó un discurso hermoso, como suyo. Menudearon Üos acontecimientos teatrales. En el Real primera de Manon y debut de la Gsachetti, con gran éxito. En la Comedia estreno de una en dos actos, deber, que acogió bien el público; en Lara presentación de dos adivinadores notabíes que todo lo adivinan, menos dos cosas, de seguro: lo que va á suceder en Algeciras y el punto donde van á verse pronto dos novios de quienes todo el mundo habla estos días, y aparición de 3 a Cleo de Mérode en la Zarsueia, cuyas danzas artísticas, y todo Jo que se quiera, no acabaron de deslumhrar, porque esa artista necesita, como marco para lograr ese resultado, una mise en scene, una troupe numerosa que la secunde, y, sobre todo, A yer tarde, una multitud de discretísimos caballeros españoles se reunieron en una estancia amplia, limpia, cómoda; había allí periodistas, literatos, parlamentarios y hombres de mundo. Un ilustre maestro de la espada- -Sanz- -conmemoraba el traslado de su antigua sala. Y esta muchedumbre de caballeros que se congregaban allí nos recordaban á la heroica España de otros días. La tradición, la historia surgía ante nosotros: veíamos los viejos armeros de Toledo- -los Sahagún, los Baena, ios Vargas, los Horta- -metidos en sus tiendecillas y en sus talleres sombríos, atronando con sus golpeteos sonoros y con ios carraspeos de sus limas la estrecha y retorcida calleja, por donde tal vez avanza una buena vieja con sus tocas ó un hidalgo con sus mostachos retorcidos y su ¡arga capa; veíamos también aquellos teorizantes y dialécticos de la espada, acaso un poco locos- -como los que pinta Quevedo en el Buscón- -y que quizá una noche ó una tarde en una venta perdida en la estepa castellana, dan una sutil lección de esgrima ante los viajeros fatigados, que se han detenido allí un momento, y quizá también después de esta lección cuentan sus aventuras en Flandes ó en Italia y proponen una nueva manera de tomar tal ó cual plaza inexpugnable; veíamos, en fin, la cohorte délos viejos hidalgos españoles- -substancia de la raza- -sufridos, callados, duros, altivos, audaces. Y entre ellos descollaba un hombre cínico, extraordinario; este hombre lo ha retratado el autor desconocido de la Vida del lazarillo de Torates; este hombre es la figura más representativa y más admirable de nuestra historia y de nuestras letras. Ya le conocéis todos: es un hidalgo que vive en un vetusto caserón de Toledo; no hay en ia casa sillas, ni mesas, ni paramentos, ni tapice ni arcaces; no tiene este pobre hidalgo por todo menaje más que un débil cañizo cubierto con una raída manía. Esta es su cama; en ella se acuesta cuando llega ¡a noche. Y de que es venida la mañana, él se levanta, se viste sus gregüescos y su jubón, se ciñe el talabarte y coge ¡a espada. Este es el momento supremo, capital en su vida; él ama sobre todas las cosas de! musido esta hoja toledana; él no come; él no tiene ni siquiera un maravedí en su bolsillo; pero él coge con un amor indecible esta espada, tienta su empuñadura, acaricia sus filos y exclama en el colmo de su éxtasis y dirigiéndose á un criadillo que tiene: ¡Oh, si supieres, mozo, que pieza es éstaí ¡No hay raarco de oro en el mundo por que yo ia diese! Y luego se la pone á su izquierda y se marcha por la calleja arriba, lentamente, con un cabo de la capa echado sobre el hombro y el puño derecho en la cadera. Y acaso no coma en todo el día; quizá- -como el autor nos cuenta- -se vea en el trance doloroso de quedar corrido por falta de recursos ante unas damas; pero él- -tenedlo bien presente- -no contará á nadie sus desdichas, no se apesadumbrará, no mostrará en su rostro la más leve contrarie- El próximo día 23, San Ildefonso, celebrarán su santo los duques de Mijar, Aliaga y Oporto; marqueses de Nájera, Puebla de Rocamora, Corvera, Caicedo, Rafal, Atalayuelas, Valeriola, Alquibla, Yillanueva de Valduezas y Casa- Saltillo; condes de Torre Arias, Cabra y Heredia Spínola, y Sres. Coello, Mendoza, Esteban, Aguirre y Carcer, Queipo de Llano, Pidal y Bernaldo de Quirós, Ahumada, Alvarez de Toledo, Aguilar, Bascaran, Bermejillo, Caro y Arroyo, Ekrmúdez Puente, Aranda, Pidal y Chico de Guzmán y Valderrábano y Dusmet, entre otros. Muchas felicidades á todos. El 24 del corriente, Nuestra Señora de la Paz, celebrarán sus días: S. A. R. la infanta doña Paz; marquesas de la Garantía y de Viilanueva de Valdueza; condesas de Múnter y del Valle de San Juan; señoras de Sánchez de Toca, O Shea, Gordón, viuda de Méndez de Y ¡go y la señorita de Ayguavives. El 25, festividad de Santa Elvira, será la fiesta onomástica de las marquesas de Alboloduy, Arenzana, viuda de Alhama y Alonso de León, condesa de Cerragería y vizcondesa de La Gasea. Ha dado á luz con felicidad una niña la se ñora de D Francisco Muruve. LA LOTERÍA DE AYER En el sorteo de 3 a Lotería Nacional verificado ayer ocurrió un incidente extraordinario que pudo producir un conflicto. Nada menos que tres números diferentes resultaban agraciados con el premio gordo. Ello fue como sigue: realizábase la operación con ias formalidades y la tranquilidad acostumbradas, cuando el chico encargado de los números cantó el 33.974. Su compañero se distrajo y no cantó el preraío de 5oo pesetas que le correspondía. Sin darse cuenta de ¡a cnisión el primero de los niños cantó otro número, que fue eí 23.220. Entonces el chico encargado de ¡os premios cantó ei de 1 60.000 pesetas. Advirtió el público el error. Protestó de que se hubieran cantado dos números consecutivos y un soio premio, que fue el gordo. El chico encargado de ¡es números quiso subsanar la omisión de su compañero, y dejó el número 23.220 en el platillo de cristal cuando ya había cardo en dicho platillo un tercer número, el 25.542, que fue el que tomó al querer nuevamente coger eí 23.220 que antes había dejado. En este instante la confusión aumenta, y se suspende el sorteo, resultando que se habían cantado tres números consecutivos y un soio premio, el de 1 Ó 0.000 pesetas. El presidente mandó desalojar la sala, y e! Sr. Antelo, por encargo del tribuna! tomó un coche y fue á consular el caso con su jefe el director del Tesoro público. Este resolvió Que, teniendo en cuenta la EL L 3O DOES LOS PREMÍ GORDOS un París. AEMECE NOTAS MUNICIPALES L a cuestión del agua. Pro y Mazzantini Los concejales Sres. van á gestionar cerca del ministro de Obras

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