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ABC CORDOBA 29-11-2018 página 16
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16 OPINIÓN PERFIL DEL AIRE JUEVES, 29 DE NOVIEMBRE DE 2018 abc. es opinion ABC A LOS CUATRO VIENTOS Campaña elecciones andaluzas PACO ROBLES GLORIA Y ESPERANZA El Reino Unido, esa nación que no entendemos los españoles de los eternos complejos patrióticos ONFIESO que sentí esa mezcla de admiración por lo ajeno y de carencia propia que se suele denominar con una palabra muy fea: envidia. El relente de la noche caía sobre Londres cuando nos acogió el espacio inmenso, cálido y sonoro al mismo tiempo, del Royal Albert Hall. Es un lujo escuchar a la Royal mientras la música amanece con la luz tibia, delgada, sutil y nórdica de la suite de Grieg. O cuando se estremece esa misma música con las flores de Tchaikovsky mientras el patio de butacas se llena de bailarinas que acompasan el vals a la longitud de sus pasillos. El concierto se denomina Classical Spectacular, y es un gozo para los ojos y los oídos. Los grandes de la música clásica convertidos en un auténtico espectáculo sin esos silencios impostados ni esas rigideces tan propias del género cuando los melómanos de boquilla le dan al postureo intelectualoide. Música para vivir, para divertirse, para disfrutarla como si fuera lo que es: la vida misma. Y en medio del concierto, para cerrar la primera parte y para rematar el final, la composición de Elgar que lleva un nombre tan hermoso como certero: Land of hope and glory. Tierra de gloria y esperanza, que al traducirlo viene mejor cambiar el orden de los sustantivos para que el ritmo de la frase se haga, también, más musical si cabe. Tierra de gloria y de esperanza es el Reino Unido, esa nación que no entendemos los españoles de los eternos complejos patrióticos. No somos capaces de cantar nuestro propio himno porque no tiene letra. Eso es algo impensable para los que se desgañitan pidiendo a Dios salud para su Reina. Sea en un partido de fútbol, en un desfile militar o en un espectáculo musical. Al escuchar la vibrante marcha de Elgar, uno sintió la necesidad de empuñar esa banderita que nos ofrecían al entrar en el soberbio edificio donde tocan los rockeros y cantan los tenores. Pero con esto del Brexit y de Gibraltar era imposible. ¡Qué le vamos a hacer! En realidad, lo que sentimos en el alma fue que no tuviéramos nuestra banderita a mano. Sin estridencias. Sin utilizarla como arma contra nada, ni contra nadie. Como lo hacían los espectadores que la flameaban al mismo compás que los componentes del coro. Con naturalidad, mientras caían los globos rojos, blancos y azules en una apoteosis pacífica y partriótica que tenía, por qué no decirlo, ese puntito friki que impide la degeneración de la emoción en algo agresivo. Allí se puede vestir un barítono con la bandera inglesa como chaleco del frac, o revestirse literalmente con ella. Aquí es imposible que eso suceda sin que los demagogos te censuren y te tilden de facha. O de fascista, si la cosa se pone fea. Los mismos que defienden las dictaduras sin cortarse un pelo de la melena... o de la coleta. En la nación donde se inventó la democracia moderna, el patriotismo forma parte de sus vidas, de sus símbolos, de sus domingos por la tarde en una sala de conciertos. Aquí no pasa de los balcones donde compite con el independentismo que quiere retrotraernos al pasado feudal. ¡Qué pena de gloria ausente! Y de esperanza perdida... Calvo aterriza con retraso La vicepresidenta del Gobierno de Sánchez, la cordobesa Carmen Calvo, se ha convertido hasta ahora en la otra gran ausente de la campaña socialista para las elecciones andaluzas desde Córdoba. Curiosamente, Calvo ha participado ya en Granada en un acto público de apoyo a los cabeceras de su partido, pero no se le ha visto el pelo desde que comenzó la campaña por su circunscripción. Hoy sí, se incorpora. Conocido es el apoyo a Pedro Sánchez desde este tiempo a atrás, en contra de las tesis susanistas Además con meridiana claridad, no como otros dirigentes que intentan disimularlo para no salir damnificados. Muy seguros deben estar en el PSOE de Córdoba o de poco les vale éste y el apoyo de la primera alcaldesa socialista de Córdoba, Isabel Ambrosio. Llama también la atención que Ambrosio, aprovechando el parón electoral, pues pareciera que la ciudad también se para (o sigue parada) está desplegando su particular precampaña municipal con reuniones sin convocatoria y sí con foto y nota posterior por todos los sectores posibles. Durán, número uno por Córdoba al Parlamento, tiene claro que como Susana Díaz, nadie. C Carmen Calvo EP CARTAS AL DIRECTOR No nos abstengamos El problema de la abstención en nuestro país (sean elecciones locales, regionales, nacionales o europeas) es muy grave, alarmante. Concretamente en las pasadas elecciones generales alcanzó la cifra de 9 millones de personas que no votaron: ni físicamente, ni por correo, ni tampoco en blanco. Es falso decir que están en su derecho, no. Es todo lo contrario, pues constituye un sagrado deber ejercer esa responsabilidad de ir votar (por correo o físicamente) incluso en blanco. Quiero adelantar mi visión contemplando esa cantera de personas que conforman esa gran cifra de la Abstención; las cuales no entran en el juego democrático, (perdón por emplear esa palabra juego) Para servidor, esta abstención la forman tres clases o grupos de contribuyentes: (A) El de los bien situados: grupo de aquellos as que se consideran fuera o por encima del sistema. Y no votan. Olvidándose del futuro, de nuestro futuro y evidentemente del suyo también. (B) El de los desencantados: que acoge e integra a todas os los ciudadanos desencantados as de la gestión de sus representantes políticos de ideología conservadora. Nunca son de ideología de izquierdas (si me apuran mucho, muy pocos o algunos de izquierdas muy puros) Y por último... (C) los extremistas: este grupo acoge a quienes ven y comparan lo prometido, lo vivido y lo que tenemos y al comprobar sus incoherencias y consecuencias... tampoco se molestan en votar, ni incluso en blanco. Conclusión esta numerosa abstención se nutre como vemos, de personas de creencias y valores y principios reconocidos como de derechas o conservadores. Nunca esta cantera la forman personas de la ideología de izquierdas. Sencillamente porque las izquierdas todas... sean socialistas (antiguos o modernos) neocomunistas o populistas, como nacionalistas o independentistas... cierran filas siempre acuden las urnas, y nunca se quedan en casa. Son más fieles a la llamada cuando convocan. Esto debe quedar claro y actuar en consecuencia... luego no nos quejemos. No tocar este tema de la abstención... es en sí un grave problema no debatido ni estudiado, que comparte y se extiende también a nuestros medios de comunicación. MANUEL ARMENTEROS CÓRDOBA escupe, no se hacen guarrerías, y, en general, no se realizan gestos y acciones que puedan dañar a los demás. A la vez también se nos educa en cuidar nuestras expresiones y no insultar ni ofender al prójimo; y afinando incluso se nos llega a reprochar que manifestemos ideas u opiniones que pudieran considerarse como políticamente incorrectas. Ahora se ha armado gran revuelo porque un diputado de ERC, al tiempo que abandonaba el hemiciclo, parece que escupió a un miembro del Gobierno. Ante tan sucio gesto, mientras unos del propio Gobierno se hacen el tonto, otros lo consideran como la peor acción que se ha visto en el Congreso. Mas sin negar que escupir esté muy feo, tampoco deberíamos escandalizarnos demasiado, porque en absoluto es lo más grave y dañino que llevan haciendo algunos desde que ocuparon- con legítimo y democrático derecho- su escaño parlamentario. Esto sólo ha sido una mera consecuencia de las ideas políticas que vienen escupiendo contra gran parte de españoles. MIGUEL ÁNGEL LOMA CÓRDOBA Escupir está muy feo, pero... De las primeras cosas que nos enseñan desde chiquititos es que no se pega, no se dan patadas, no se muerde, no se Pueden dirigir sus cartas al director por correo ordinario a C San Álvaro, 8, 1 3. 14003 de Córdoba. E- mail a cartas. cordoba abc. es. ABC se reserva el derecho de reducir los textos cuyas dimensiones pasen el espacio fijado.

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