ABC CORDOBA 01-10-2018 página 63
- EdiciónABC, CORDOBA
- Página63
- Fecha de publicación01/10/2018
- ID0006806315
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ABC LUNES, 1 DE OCTUBRE DE 2018 abc. es cultura CULTURA 63 La Orquesta ofrece un avance de su nueva temporada en el estreno de Carlos Domínguez- Nieto como director y con el reto de mantener cautivado a su público La partitura de la ilusión POR F. FAVIER SANTOS CÓRDOBA o hicieron bien aquellos que desperdiciaron la ocasión de conocer de primera mano las intenciones de la principal formación instrumental de Córdoba y de su nuevo director: al margen de los resultados artísticos, el mayor logro de la velada del sábado consistió en devolver la ilusión a un público demasiado necesitado de ella. Sin programa de mano, el cual fue entregado a la salida del concierto, Carlos Domínguez- Nieto tomó el micrófono y tras unas palabras de bienvenida y de agradecimiento en las que no faltó el reproche a los tardones o el llamamiento a apagar los móviles, fue presentando y justificando las obras que se iban interpretar, todas representativas de lo que será la actual temporada de abono. Copland, Dvorak, Turina, Bach, Valverde, Toldrá y Chaikovski sonaron en la noche en que se abría de forma simbólica una nueva etapa en la vida de la Orquesta de Córdoba. Será una temporada variada y atractiva, cuya programación incluirá obras del gran repertorio sinfónico, entre las que destacarán especialmente la cuarta de Bruckner o La consagración de la primavera de Stravinski, esta últi- N ma en colaboración con la Orquesta Joven de Córdoba. La música religiosa representada por La pasión según San Mateo de Bach será el plato fuerte en Semana Santa, y se contará con la presencia de solistas como Benedetto Lupo o el Cuarteto Diógenes, que ofrecerá un inusual recital concertante. Quizás lo más destacable sea la especial atención a la música española, rescatando a obras y autores olvidados que alter- narán escenario con imprescindibles clásicos como Falla o Arriaga. Supo Carlos Domínguez- Nieto llevarse al público a su terreno, cautivado casi desde el primer momento no solo por sus indiscutibles capacidades comunicativas, sino también por el fabuloso nivel que logró extraer a una Orquesta que sonó como hacía muchísimo no sonaba y por las versiones de lo interpretado (difícil respirar ante la tensiones conseguidas en el Romeo y Julieta de Chaikovski) La actitud de los músicos, alegres y estimulados, contagió a una afición que lo pasó en grande y que salió del Teatro Góngora sonriente, feliz y sobre todo enormemente ilusionada ante la nueva temporada que en breve empieza. Y qué bien pinta. Carlos Domínguez Nieto, en su primer concierto con la Orquesta de Córdoba VALERIO MERINO