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ABC CORDOBA 01-11-2015 página 17
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ABC CORDOBA 01-11-2015 página 17

  • EdiciónABC, CORDOBA
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ABC DOMINGO, 1 DE NOVIEMBRE DE 2015 abc. es opinion OPINIÓN 17 VIC EL ESTILITA JAVIER TAFUR EL EJE La nadería política convertida en categoría. La venta de humo municipal permanente P PRETÉRITO IMPERFECTO diz o Jaén. Donde la miopía del catetismo ha sembrado prejuicios entre unos y otros. Es por ello que el llamado eje estratégico que han auspiciado ahora los alcaldes de Sevilla y Málaga en primera instancia sea, cuanto menos, un gran avance frente a esta dinámica autodestructiva. Que sean los regidores de las dos ciudades más pobladas de la región española con más habitantes. Que los polos administrativo y económico oficiales se atraigan y no choquen, desde partidos distintos y arropados por sus empresarios- -los que tienen más claro, en general, el efecto negativo de este virus localista- -y una parte influyente de su sociedad civil. Córdoba quiere unirse y crear un triángulo estratégico, donde, según hemos sabido en trazo grueso, se produzcan intercambios y esfuerzos comunes en materia cultural, investigadora o económica. Es la tercera ciudad en población y el vértice más débil. El AVE no llegó a Córdoba, pasó por ella. Sí lo hizo a Sevilla en 1992 y a Málaga en 2007. No perdamos de vista esa metafórica referencia. El empeño de la alcaldesa de Córdoba por conformar este clúster geopolítico es obligado y pidamos que no sea una mera estrategia por aparecer en la foto logrando un sitio para la ciudad que no sólo se consigue con estas apuestas que circulan más en lo etéreo que por lo sólido. Sus repetidas palabras por devolver su lugar a Córdoba y por mostrar firmeza y brazos en jarra frente a la Junta que habitó hace apenas un año son dos buenos test para demostrar hechos y no promesas. Hubo carta para Rajoy por el mordisco en las cuentas del Estado para la provincia, aún esperamos la misiva para Susana Díaz tras el puntapié en las espinillas de los presupuestos andaluces. Ese sitio, este triángulo estratégico, a quien de verdad compete liderarlo es a la Junta de Andalucía, quien desde hace años y años arrastra una deuda histórica y seria en infraestructuras y dotaciones con las tres urbes y las otras cinco. Las carreteras, el transporte, los equipamientos culturales, la estructura universitaria o la maquinaria de justicia que faltan en una, sí están en las otras, o viceversa. La realidad es otra: la región con más tasa de paro y que peor aprovecha sus millonarios fondos de formación según la UE (bueno, según se mire, algunos sí los han aprovechado y bien) El verdadero eje estratégico debe ser Andalucía en un todo que sea la suma de sus magníficas partes. FRANCISCO J. POYATO EL EJE ESTRATÉGICO La iniciativa de Sevilla y Málaga a la que quiere llegar Córdoba es ya un avance en la dinámica autodestructiva localista A base de confundir de manera intencionada la parte por el todo, el PSOE andaluz se ha erigido en las últimas décadas en el gran entrenador de los localismos en Andalucía. Cual si fuese su propia estructura de partido: feudos provinciales cuyos gallos de pelea tienen que conquistar sillones de influencia y acumular efectivos en una doble pirueta de lealtad y fontanería con el líder supremo en la mesa alargada. La Junta le daba luego carta de naturaleza materializando la correlación de fuerzas internas en el presupuesto que ahora disimula. La traducción es un mapa geopolítico andaluz de capitales que se miran de reojo y juegan al enroque o la trinchera. Obviando alianzas, como en una familia huérfana, cada polluelo ha tenido que sacar la cabeza y buscarse la vida para sobrevivir. Si eras bueno, comías. Si no, debías sobrevivir haciendo más sólida la insolidaridad. Y no es que nos falte a los andaluces una idea compartida. Ésta sería más un lugar común de vitalidad festiva, emocional, que un proyecto de sociedad civil catapultado por una arquitectura institucional a su servicio. Divide, y vencerás, que pregonaban los romanos- andaluces. En este peligroso terreno pantanoso es donde se han fraguado filias y fobias. Donde la rivalidad entre Sevilla y Málaga ha llegado a saltar por los aires. Donde el victimismo ha servido de coartada a Córdoba o Granada, envueltas en su pátina histórica como paraísos del olvido. Donde la lejanía de Almería se ha hecho más distante aún. Donde ese aparato de poder ha mantenido a raya la rebeldía de Huelva, Cá- OR escasamente cosmopolitas que sean ustedes, sabrán que en estos días los niños anglosajones van por las casas ofreciendo truco o trato como ingenua amenaza para conseguir golosinas. Tal vez por ello, en esta semana cordobesa ha abundado más el truco que el trato. Jalogüín se ha convertido en una fiesta ya tan hispana, tan entrañable y tan asumida por la administración que a poco será cierto el panorama que ayer nos anunciaba Vic en su viñeta. Desacralizar las fiestas viene casi de propina en los políticos, viendo la banalización que hacen de su propio oficio. Lo de Ambrosio, no obstante, merece un comentario. Que este ayuntamiento nació muerto lo sabemos todos y más sus responsables, que intentan gobernar con 11 concejales mal avenidos una corporación de 29. Incluso los 14 de la oposición, que ya han firmado algo más o menos consecuente, formarían un tripartito que estaría en mejor disposición de dar respuestas medianamente consistentes a los requerimientos municipales. Porque los de Ganemos o Podemos o como quiera que el azar les depare llamarse en el futuro se sitúan obligadamente al pairo de toda actuación sensata. De la alcaldesa, por tanto, nada serio debe esperarse, un poco por sí misma y otro poco por su circunstancia. Pero, aún así, sorprende que haya pretendido vendernos tanto humo sucesivo y con tanto descaro en tan breve tiempo, es decir, una oferta a Cosmos digna de Cosmopoética, un congreso internacional sin espacio donde celebrarlo y una asociación de ciudades previamente asociadas. Porque esta es la realidad. Le ha dicho a una empresa que le busca una parcela a cambio de arruinarla. Ha convocado un evento cuando acabamos de cerrar el mínimo recinto que podía acogerlo. Y ha propuesto, a estas alturas de la historia, un eje regional, un acuerdo de intereses con Sevilla, luego con Málaga, más tarde con Granada, sin olvidar a Jaén y Almería, y por ende- -es de suponer- -con Cadiz y Huelva, según las perspectivas de los propios alcaldes encartados. Lo cual indica que van a reinventar Andalucía. La Junta tendrá algo que decir ante este disparatado desafío a su competencia territorial. Aunque lo mismo la cosa no se detiene en estas lindes y se continúa con todo aledaño que se encuentre: la Extremadura, la Mancha, el Levante... ¡Y al cabo reinventamos España! A lo mejor es esta la solución federal que plantea Pedro Sánchez. Y la verdad sea dicha, no estaría de más que volviéramos a organizar lo obvio, sin intermediaciones indeseables, o sea, las provincias. Desgraciadamente no llegará a tanto doña Isabel. El puesto le exige comparecencias cotidianas y su situación en él le impide pergeñar siquiera un discurso coherente. Ella busca un eje con otras ciudades porque no puede encontrar el eje de su propio ayuntamiento, que sin duda descubriría con sólo mirar a su derecha. Por eso se abandona a los abracadabras de la nadería política, que parecen casi oportunos en estas fechas. Pero los trucos decepcionan a la postre. Sólo los tratos cumplidos generan confianza.

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