ABC CORDOBA 24-09-2015 página 20

20 CÓRDOBA JUEVES, 24 DE SEPTIEMBRE DE 2015 cordoba. abc. es ABC IU certificó en 2006 la compatibilidad de quemar residuos en Cosmos con el PGOU Urbanismo emitió ese año un dictamen en el que se basó la Junta para autorizar la incineración de residuos junto a las viviendas de Fátima R. RUIZ CÓRDOBA La Gerencia Municipal de Urbanismo, con Izquierda Unida en el poder municipal, jugó un papel clave para que la empresa entonces llamada Cimpor- -hoy es Cosmos- -recibiera el permiso de la Junta de Andalucía para quemar residuos no peligrosos como una forma de alimentar sus calderas- -la producción de cemento exige de altísimas temperaturas- Una lectura detallada del documento de 2007- -firmado por el entonces delegado de Me- dio Ambiente, el socialista Luis Rey- -explica que el Consistorio (la alcaldesa era Rosa Aguilar Rivero y el teniente de alcalde de Urbanismo era Andrés Ocaña) permitieron expresamente que el proyecto recibiera la aquiescencia de las autoridades ambientales. Urbanismo emitió un certificado de compatibilidad urbanística. Recientemente, el Ayuntamiento de Niebla (Huelva) donde existe una cementera muy cerca del casco urbano, denegó esa solicitud directamente. En el caso de la localidad onubense, la Junta ni siquiera tuvo que estudiar el ex- pediente. Se limitó a archivarlo. La razón es que el informe de compatibilidad urbanística es, según una ley de 2002, condición sine qua non para la obtención de un permiso ambiental. En el caso de Cosmos, Urbanismo, que ahora quiere dejar la fábrica fuera de ordenación, dijo sí. La lectura de la autorización ambiental- -que sigue vigente, según una determinación de la Consejería de Medio Ambiente- -explica que la entonces propietaria de la fábrica cumplió todos los requsitos. De acuerdo con la legislación, la propiedad (Sociedad de Cementos y Materiales de Construcción de Andalucía SA) comunicó al Consistorio cuál era su proyecto mediante una memoria comprensiva. La sociedad dueña de la cementera rea- lizó hasta dos veces la consulta a la Gerencia de Urbanismo. El 20 de febrero de 2006, la empresa pidió oficialmente por primera vez a la Gerencia de Urbanismo que se pronunciara sobre esta cuestión. La primera decisión del Ayuntamiento fue no contestar. Los servicios técnicos de la Junta, sin embargo, recibieron copia oficial de la decisión del organismo municipal durante los primeros días de mayo de ese mismo año. ¿Qué es exactamente lo que Urbanismo certificó? Pues que no hay ningún problema en que haya una cementera con capacidad para 2.000 toneladas al día- -la empresa pretendía una ampliación de 500 toneladas- día- -que alimente sus calderas con una alternativa a un derivado del petróleo. En concreto, ruedas usadas, lodos y basura urbana mezclada y tratada previamente y residuos plásticos como embalajes. En total, unas 30.000 toneladas métricas anuales de residuos a quemar generando ingresos a la propiedad de la factoría. La calificación del suelo de Asland no ha cambiado desde 2006 porque es la misma desde que se aprobó el Plan General. Es suelo industrial de tipo tres. Según el PGOU, existen cuatro categorías en función del tipo de empresa. La que ocupa la cementera es incompatible con viviendas -dentro de un mismo sector urbanístico- -y se fundamenta en que no manejan materiales especialmente peligrosos que aconsejen que es preciso llevárselos muy lejos del casco. Nuevo enfoque Lo que la Gerencia de Urbanismo plantea ahora es dejar fuera de ordenación la industria a raíz de la decisión de quemar residuos. Es decir, contradice expresamente el documento que el organismo municipal aportó en su momento para argumentar el permiso ambiental de la factoría. Y solo cabe considerar una instalación de estas características como una industria de cuarta categoría que son aquellas que son totalmente incompatibles con un entorno urbano. Según el catálogo que señala este tipo de instalaciones, parcialmente derogado, se reserva esta categoría a centrales térmicas o nucleares, lugares donde se almacen o traten residuos peligrosos, equipamientos de tratamiento de basura (como los vertederos) o las refinerías de actividad petroquímica. En definitiva, todo aquello que resulte o pueda resultar peligroso para los vecinos. La apelación a esta norma implica, de forma directa, la obligación de trasladar estas industrias a una distancia considerable del cualquier casco urbano de forma que no generen interferencias con la vida de la ciudad conforme a unos intervalos señalados en la legislación sectorial y urbanística. Instalaciones de Cosmos, junto al barrio de Fátima V. MERINO LOS EFECTOS EN EL ENTORNO Grupo Puma, expectante ante el informe sobre la cementera P. C. CÓRDOBA A pocos metros de las instalaciones de Cosmos se levantan las del Grupo Puma, una empresa dedicada a la producción de todo tipo de materiales de construcción. La posibilidad de que la declaración de fuera de ordenación de la antigua Asland por parte de la Gerencia de Urbanismo pueda tener también consecuencias para su planta no parece preo- cupar por el momento a esta industria vecina. Fuentes de la compañía aseguraron ayer a ABC que, en principio, creemos que este cambio urbanístico no tiene por qué afectarnos, por lo que estamos tranquilos No obstante, se muestran prudentes a la hora de mostrar su postura definitiva en torno a este asunto hasta que no se conozcan en profundidad las repercusiones del expedien- te que finalmente salga adelante. Estaremos pendientes de cómo discurre todo esto afirmaron desde el Grupo Puma. Aunque apuestan por ser cautos en esta cuestión, desde esta empresa se reconoció que es verdad que las industrias que estamos aquí instaladas en referencia al polígono industrial anexo al de Pedroche- no somos bien vistas por muchos en Córdoba Puma es una de las industrias más pujantes en su sector y una de las destacadas en esta actividad tanto en la provincia de Córdoba como en la comunidad andaluza.