ABC CORDOBA 16-08-2015 página 65
- EdiciónABC, CORDOBA
- Página65
- Fecha de publicación16/08/2015
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ABC DOMINGO, 16 DE AGOSTO DE 2015 abc. es deportes DEPORTES 65 Valdés se enfrenta a sí mismo El enfado con Van Gaal, el último de los líos en la carrera del guardameta L. BUXERES BARCELONA El dorsal número 1 La llegada de Rijkaard al banquillo en 2004 supuso la consagración de Valdés Víctor Valdés es el mejor portero de la historia del Barcelona. Es el que más títulos ha ganado. El que más minutos de imbatibilidad ha sumado. Y el que más estabilidad le ha dado a la portería del Camp Nou. Víctor Valdés se fue del Barça por la puerta de atrás, sin ni siquiera decir adiós. Un escenario impensable para cualquier otro futbolista, menos para él, singular como ninguno. Su fuerte y peculiar personalidad le ha servido para crecer en su carrera, para olvidarse de las críticas y centrarse en su trabajo. Pero también le ha conducido por el camino equivocado en varias ocasiones y ha enterrado más de una oportunidad de hacerse aún más grande. Van Gaal es el común denominador en dos de las grandes polémicas que han azotado su carrera. Ambas, con un argumento muy similar. La última ha ocurrido en Manchester, don- ALBERTO ESTÉVEZ La final de París, su mejor recuerdo No todo han sido decepciones en la carrera de Valdés, repleta también de éxitos y títulos. Entre ellos, el portero se queda con su primera Liga de Campeones, la conseguida frente al Arsenal en París en 2006. Su actuación fue portentosa, con dos paradas increíbles a Thierry Henry que le convirtieron en uno de los héroes de aquella final. Aún guardo el DVD de aquel partido admitió hace poco. Años más tarde, ya con Guardiola, añadiría dos Champions más a un palmarés de ensueño, el mejor de todos los porteros que ha tenido el Barcelona en su historia. Valdés es único, en muchos sentidos. EFE Otro de los apartados a tener en cuenta para analizar la situación del Barcelona es el estado físico. El bajón de los azulgranas en la segunda parte de la final de la Supercopa de Europa fue evidente, con Messi como principal estandarte. Pero ante el Athletic, el cansancio o la baja forma no puede servir como excusa para explicar el rotundo marcador. Siete de los once futbolistas titulares llevaban más de un mes de preparación, tiempo más que suficiente para rendir a un nivel mucho más alto del que lo hicieron. Pero quizás una las causas más alarmantes de la derrota para Luis Enrique fue el pobre papel de los futbolistas que suelen disponer de menos minutos. La segunda unidad naufragó estrepitosamente y ante el tupido calendario de los azulgranas este curso al técnico se le acumulan los problemas. Los jóvenes no dan el paso adelante que se les presupone y no acaban de retar a los teóricos titulares, que parecen tener su puesto asegurado tras lo visto en San Mamés. Bartra y Sergi Roberto no suelen gozar de demasiadas oportunidades y en Bilbao no se hicieron acreedores de que cambie el escenario. Rafinha, por su parte, tiene más confianza de Luis Enrique, pero sigue sin demostrar por qué. Está claro que la crisis del Barça tiene muchos nombres. de el técnico holandés le ha dejado sin dorsal aludiendo su negativa a jugar con los reservas. Una acusación que el portero rebatió a través de las redes sociales publicando una foto junto al filial del United y reclamando respeto Valdés tenía una oportunidad única esta temporada después de ser rescatado por Van Gaal cuando su lesión de rodilla le cerró las puertas del Mónaco. Con De Gea apartado temporalmente, la portería de Old Trafford debería haber sido suya, pero su difícil carácter lo ha vuelto a impedir. Romero se ha hecho con el puesto. Sin despedida Ese mismo carácter fue la razón de que Valdés no se despidiera de la afición azulgrana, que le apoyó fielmente durante sus once años en el primer equipo. Así lo ha admitido el propio guardameta en una de las pocas entrevistas que suele conceder. Ya se enfrentó a Van Gaal en su primera temporada en el Barça, cuando se negó a entrenar con el filial. La destitución de Van Gaal y la llegada de Antic propiciaron que la situación volviera a su cauce. Aunque no fue hasta la etapa de Rijkaard cuando se consolidó como titular. Valdés ya tuvo unos comienzos complicados en el Barcelona. Ingresó con diez años en las categorías inferiores del club, un año (1992) en el que sus padres y sus dos hermanos tuvieron que mudarse a Tenerife por motivos profesionales. El portero no pudo soportar la distancia y acabó abandonando el Barça para estar con su familia. Dos años después, todos regresaron a la Ciudad Condal y Valdés empezó ya a dar las primeras muestras de su calidad en la cantera azulgrana. Ahora, con 33 años, vuelve a estar en una situación difícil, a la espera de que algún club apueste por él. Cambiaría de puesto Si volviera a nacer no sería portero, no ha sido un camino fácil. Me hicieron creer que servía y no tuve más remedio Una santa Soy una persona difícil de llevar y mi mujer Yolanda merece el mayor de los trofeos por aguantarme AFP