ABC CORDOBA 13-08-2015 página 15

ABC JUEVES, 13 DE AGOSTO DE 2015 abc. es opinion OPINIÓN 15 VIC CRÓNICAS DE PEGOLAND RAFAEL RUIZ EL ANCLA Ategua, repitan la palabra. Existe y el próximo atropello se puede llegar a evitar L EL MOLINO DE LOS CIEGOS JESÚS CABRERA DE DIETAS Y CONSEJOS Renunciar a privilegios inexistentes. Inventar la pólvora L A viceportavoz de Ganemos, Vicky López, se descolgó la pasada semana con una rueda de prensa de las que hacen época. Fiel cumplidora del catecismo de su formación matriz (Podemos) la edil marcó diferencias con las formaciones políticas de toda la vida, habló de privilegios que tienen que acabar y anunció de forma grandilocuente que los de su grupo dejarán de cobras las dietas por asistir a los consejos de las empresas municipales, porque así se da muestra de la nueva política que desde la oposición también se puede hacer, porque la política no es una profesión en la que se deban tener privilegios, sino que es un servicio público a la ciudadanía Así planteado está muy bien, pero que muy bien, aunque Vicky López llega tarde, pero que muy tarde. La edil podemita hizo una argumentación muy elemental para defender su propuesta, sin que en ningún momento le faltase en la mirada el brillo inconfundible de quien acaba de descubrir la pólvora, revolucionando con su medida la política local y abochornado de forma inmisericorde al resto de formaciones políticas, porque ellos están por encima del resto de los mortales, y por eso tienen el derecho a desconocer la historia reciente del Ayuntamiento y de la ciudad. Me hubiera gustado estar ese día en los grupos municipales de PP PSOE, IU y UCOR para ver la son, risa con que recibieron la petición reprimenda de Vicky López, ya que desde hace cuatro años los representantes de estas cuatro formaciones no cobran dieta alguna por su asistencia a los consejos. Esos cuatro grupos, que son los que compusieron la anterior corporación, saben perfectamente que desde el verano de 2011 hubo una renuncia colectiva a este privilegio que, en algún, caso vino muy bien al resultado final de la empresa. Ya me extrañaba que la filial cordobesa de Podemos no hubiese divertido aún al respetable con alguna salida de todo similar a las de sus compañeros de otras ciudades españolas donde raro es el día en el que no se sabe si es más jocosa la metedura de pata o la argumentación que utilizan para recular de forma vergonzante. Los alcaldes habituales (Carmena, Colau, Kichi) se encargan a diario de mantenerse en el top del escalafón, mientras hay otros regidores que se dejan el pellejo por desbancarlos, como es el caso de la de Sueca, Raquel Tamarit, de Compromís, quien al ver que no llamó la atención lo suficiente después de subirse el sueldo 6.000 euros, va y censura directamente el repertorio que deben interpretar las bandas de música en las procesiones de su localidad. Tamarit está haciendo méritos para entrar en el Olimpo de la nueva hornada de políticos al suprimir una suelta de vaquillas, tradicional desde tiempo inmemorial, y que no supone un maltrato al animal superior al de capar un gato. Que Carmena y Colau se anden con cuidado, que Tamarit las puede sustituir en cualquier momento. En el caso de Córdoba, me parece muy bien la petición de Vicki López. Tan bien me parece su declaración que ya está en marcha desde hace cuatro años. Pero sí los de Ganemos quieren realmente eliminar privilegios han errado el tiro, porque en vez de pedir que no se cobren las dietas por asistencia a los consejos de administración de las empresas municipales, lo que tienen que hacer es pedir al gobierno municipal que suprima esta partida de los presupuestos del próximo año de las respectivas sociedades dependientes del Ayuntamiento y que las reuniones sean siempre en horario laboral. Ésta sería la medida más justa y eficaz. El problema vendría después, cuando lleguen las quejas de los altos funcionarios municipales que participan como secretarios e interventores de estos consejos de administración y que han venido cobrando de forma puntual la mencionada indemnización. A grada era de tales dimensiones que en el sector del arado recibe el nombre de El Ancla Dicen los que saben de campo que el trasto es algo así como el arma de destrucción masiva del agro. Que por donde pasa rotura todo lo que queda a unos 80 centímetros bajo la superficie. Ya sean guijarros, capiteles o muros de lo que hubo. Eso es lo que utilizaron para dejar como la patena el campo de labor ubicado junto a Ategua, el yacimiento arqueológico más maltratado de nuestro entorno para pasmo de historiadores, aficionados y personas con una cierta sensibilidad hacia los restos del pasado. Resulta que las labores se hicieron de noche, motivo por el cual la Policía y los servicios administrativos están con la mosca detrás de la oreja como parece relativamente normal. No son horas esas para ponerse con el tractor si no es porque se va a lo que (presuntamente) se va. Por el momento, dos imputados por un presunto delito contra el patrimonio histórico como consecuencia de un acto- -se sospecha- -que tenía como misión algo más que dejar limpio el campo de malas hierbas. Vaya usted a saber qué pasa por esas cabezas cuando a la gente le da por estas cosas tan curiosas. Cualquiera que haya estado en el Museo Arqueológico de Córdoba y tenga un cierto interés sabe qué relevancia tiene Ategua. La famosa estela- -vayan a verla, puñetas- -se obtuvo bien cerca, en un cortijo próximo, a finales de los sesenta. Una piedra grabada con un tosco guerrero y una escena probablemente funeraria a la que se le calculan tres mil años, chispa más o menos. Todo mucho antes de la Mezquita, de la Mezquita- Catedral, de Medina Azahara, del presidente de las peñas, de los programas que pone Procono en los que salimos todos tan jóvenes. Representación digna de los auténticos y genuinos cordobeses. Los que estaban antes de todo lo que puede nombrarse con palabras. No hay arqueólogo que salive cuando de Ategua se habla. Muchos siglos, muchas culturas. Superpuestas, como las lamas de una lasaña, en la misma bandeja de Santacrucita. Desde Tartesos hasta la Edad Media. Chúpate esa. Y no hay colas, ni nada en la puerta. Porque conocimiento y asignación de presupuesto nunca fueron hermanos de la misma madre. Resígnense. El hombre es un lobo para su pasado, sobre todo, cuando lo dejan. Si el consejero, el ministro o el agricultor recitan a la vez lo de delenda est Unos por acción, por mantener su propiedad sobre las tierras de labranza, y otros por omisión. Por no haber gastado unas perras en la protección efectiva y en la investigación necesaria. García Márquez escribió que, de niño, casi lo atropellan. Un cura que andaba por allí gritó cuidado lo que le permitió apartarse a tiempo. Ahora conoces el valor de las palabras le dijo el sacerdote. Ategua. Recuerden, existe. Pónganle nombre a menudo. Igual alguien, a fuerza de escuchar la palabra, cae en que hay que evitar el próximo atropello.