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ABC CORDOBA 12-08-2015 página 58
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ABC CORDOBA 12-08-2015 página 58

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58 DEPORTES MIÉRCOLES, 12 DE AGOSTO DE 2015 abc. es deportes ABC Pachanga veraniega con final La pereza defensiva azulgrana con 4- 1 propició que el Sevilla forzara la prórroga. Un gol de Pedro da la Supercopa al Barça BARCELONA Ter Stegen Alves Piqué Mascherano (93) Mathieu Rakitic Busquets Iniesta (62) Messi Suárez Rafinha (77) S. Roberto (62) Bartra (77) Pedro (93) 5 SEVILLA Beto Coke Rami Krychowiak Trémoulinas Krohn- Dehli Banega Reyes (67) Iborra (79) Vitolo Gameiro (79) Konoplyanka (67) Ferreira (79) Immobile (79) 4 GOLES 0- 1. m. 2: Banega. 1- 1. m. 6: Messi. 2- 1. m. 6: Messi. 3- 1. m. 43: Rafinha. 4- 1. m. 51: Suárez. 4- 2. m. 57: Reyes. 4- 3. m. 71: Gameiro. 4- 4. m. 80: Konoplyanka, 5- 4. m. 114: Pedro. EL ÁRBITRO W. Collum (Escocés) Amonestó a Coke, Krychowiak, Banega, Mathieu, Pedro, Alves y Krohn- Dehli SALVADOR SOSTRES mpezó mal la Supercopa, con la canción Imagine sonando en los altavoces del estadio, el himno que más solemnemente convoca a la destrucción de Occidente. Lo que dice Imagine es peor que silbar a un rey y tan lamentable apología del relativismo tendría que estar prohibida en los eventos deportivos. El Sevilla salió a presionar, luchándolo todo, como los esforzados equipos menores. El Barça salió de Rodríguez, a cenar con los amigos cuando tienes colocadas en la finca de los suegros a la mujer y a la niña. Enseguida tuvo premio el Sevilla, con un gol de falta de Banega, bien lanzada, pero no tanto como para que Ter Stegen ni se moviera. Messi igualó el partido en el minuto siete, con una falta parecida pero mejor lanzada, más ajustada a la escuadra, dibujando una parábola preciosa, sin apenas tomar impulso. Después de tan boyante comienzo, el Barça calmó el partido con sus rondos eternos, desenchufando al Sevilla y esperando su momento de encontrar a Messi como quien pide otro gintónic antes de empezar a cenar. Krychowiak vio la amarilla por una falta sobre Rakitic y Messi la ejecutó a la perfección, a media altura y pegada al palo. Con los aperitivos servidos, el Barça se acomodó otra vez en sus rondos como sedantes. A veces la vida es muy sencilla. Irrum- E Messi celebra uno de sus dos goles de anoche en Tbilisi pe el talento y todo lo demás palidece. El Sevilla continuó esforzándose, pero ¿cómo mantener la tensión, y la autoestima, cuando todo lo intentas hacer bien y siempre comparece el mismo a hacerte algo imposible que te acaba destruyendo? to antes del descanso marcó el tercero Rafinha, después de una trabajada jugada de Suárez. El Barcelona jugó la segunda parte con pantalones de lino blanco, esos que sólo le quedan bien a Julio Iglesias y que cuando te los pones tú procuras no moverte mucho para que no acaben tan arrugados. A pesar de que el Sevilla salió a presionar más arriba, un error de Trémoulinas, que aprovechó Busquets y remató Suárez, pareció dejar la final sentenciada. Pero la pereza defensiva del Barça propició un gol de Reyes en el minuto 57, y otro de penalti, en el 72, de Gameiro, que dieron emoción al partido. Tanta emoción que Konoplyanka lo empató en el minuto 81. Temblaba el Barça en defensa, cansado y desmoralizado. La cena veraniega se volvió un trago amargo cuando llegamos a la prórroga, y lo que era no más que diversión se convirtió en una peligrosa indisposición por haber bebido demasiado. Luis Enrique confió finalmente en Pedro, que vio la amarilla nada más salir. El Sevilla entraba con todo, que no era demasiado, y un Barça desdibujado, previsible y sin ideas, parecía fiarlo todo a alguna genialidad de Messi, que parecía agotado. Pero un genio siempre es un genio y de sus botas nació el quinto gol del Barça, obra de un Pedro heroico, que se reivindicó ante los que le dan por amortizado. Todo lo hizo el Barça en Tbilisi, y el Sevilla sólo fue el espejo de los momentos de mediocridad del equipo de Messi, porque así hay que llamarlo. Pachanga veraniega con susto final, que acabó con los amigos llegando sanos y salvos a casa. A partir de una cierta edad, es absurdo crecerse cuando nuestras mujeres nos dejan unos días solos en casa. El Barça, andando El encuentro se volvió una pachanga de los amigos de Messi lanzándole balones por ver lo que era capaz de hacer. El Barça jugaba andando, corriendo sólo al final del ataque y si le hacía falta. Un percebe por aquí, una zamburiña por allá. El Sevilla parecía el matrimonio discutido de la mesa de al lado. Gente de media botella y fritanga. Jus- Messi y sus amigos Todo lo hizo bien el Barça, y el Sevilla sólo fue el espejos de los momentos de mediocridad azulgrana Galería con las mejores imágenes del Barcelona- Sevilla

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