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ABC CORDOBA 11-07-2015 página 14
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14 OPINIÓN VIDAS EJEMPLARES PUEBLA SÁBADO, 11 DE JULIO DE 2015 abc. es opinion ABC LUIS VENTOSO ESA GRAN IDEA Con nuevas etiquetas, estos renovadores son comunistas antediluvianos A L norte del parque de Kensington, en Londres, se encuentran los Jardines Italianos, a la vera del Long River, que luego en Hyde Park se convierte en la laguna alargada bautizada como La Serpentina. Aquel jardín es un lujo casi excéntrico, una estirada del Príncipe Alberto, que hace 150 años lo encargó como regalo para su mujer, la Reina Victoria. No falta de nada: mármol de Carrara, piedra de Portland, fuentes de querencia romana, maceteros ornamentales y las mejores flores que resiste cada estación. Como es zona de sufridos turistas y la próstata aprieta, cerca hay unos servicios. Al intentar entrar se descubre que para acceder hay que introducir 20 peniques en la ranura de la barrera. Dentro, un cartel explica que hace un año aquel lavabo público estuvo a punto de ser clausurado, debido al incivismo de los usuarios. Finalmente se decidió hacer la prueba de cobrar una pequeña cantidad. El recinto luce impoluto. Holland Park, no demasiado lejos, es otro parque londinense. Si no se trata del más bonito de la ciudad debe de ser el segundo, como bien sabe la colección de plutócratas con dacha por allí, del viejo Elton a los pegajosos Beckhamg, pasando por banqueros y glorias televisivas. Los baños de Holland Park son de acceso libre. Y en efecto, están hechos un asco. Cuento todo lo anterior porque supone una parábola política: lo que es de todos, al final no es de nadie, por eso el comunismo jamás ha funcionado. El ser humano, como bien vio el sombrío pero realista Thomas Hobbes, no es ningún serafín altruista, volcado de manera espontánea en el trabajo desinteresado en nombre del bien común. El hombre se mueve por estímulos prácticos. ¿Por qué funcionan mejor las empresas privadas que las públicas y son más creativas? Pues porque el régimen funcionarial no prima el esfuerzo ni castiga el bajo rendimiento. En el fondo es un modelo comunista. El afán de emulación, la legítima ilusión de ir a más en la vida, es un acicate económico formidable, que se traduce en que los países de economía abierta acaban siendo los que otorgan mejor vida a sus ciudadanos. Por el contrario, la poesía igualitaria comunista, que puede ser conmovedora en el romanticismo de los 18 años, solo se ha traducido en ineficacia, reparto de miseria y dolorosas mermas de las libertades personales. Su absoluto descrédito se completa con que en nombre del comunismo se han cometido algunas de las matanzas más atroces de la historia moderna, como los genocidios y hambrunas de Stalin, Pol Pot y Corea del Norte. Todos esos ceñudos renovadores españoles que nos dan lecciones para aburrir son de ideología comunista. Tras lo ocurrido en la pasada centuria, declararse comunista debería ser tan oprobioso como declararse nazi o fascista, los otros espantos del siglo ¿o acaso Lenin y Stalin no mataron también a millones de personas? Algo de vergüenza hay, por eso el comunismo ahora se hace llamar Podemos, Marea, Colau. Pero sigue siendo la misma mercancía averiada, porque se da de bruces con la naturaleza real del ser humano y trata de amaestrarlo coartando su libertad. Así que lo siento, Pablo, pero me temo que eres más antiguo que el candil de carburo. HORIZONTE RAMÓN PÉREZ- MAURA PACO GÓMEZ ANTÓN: IN MEMORIAM Eran clases tan apasionantes que en ellas se colaban alumnos de otras facultades que acudían sólo por el placer de escucharle URANTE 42 años el profesor Francisco Gómez Antón enseñó Instituciones Jurídico- Políticas Comparadas a los miles de alumnos que pasaron por la Facultad de Periodismo de Navarra que en más de medio siglo ha adoptado diferentes nombres. He oído malversar tantas veces el calificativo de maestro de periodistas que cuando de verdad alguien lo merece me da vergüenza atribuírselo. Pero él lo fue. Fue un vasco tan universal que se le olvidó mencionar en sus Desmemorias (Eunsa. Pamplona, 2002) que había nacido en Ordizia el 4 de junio de 1930. Llegó a la Facultad de Derecho de la Universidad de Navarra en 1956 y en 1958 se incorporó al nuevo Instituto de Periodismo al que estuvo unido hasta su jubilación en el año 2000. Enseñó una asignatura que muchos probablemente creerían soporífera. Comparaba los sistemas políticos de Estados Unidos, la Unión Soviética, el Reino Unido, España, Italia, Alemania y China. Y sus clases eran tan apasionantes que en ellas se colaban alumnos de otras facultades que acudían sólo por el placer de escucharle y disfrutar con su docencia. Cuando fui su almuno, en el curso 1987- 88, estaba imbuido de una auctoritas estremecedora. Impartía la clase desde el estrado, con una voz grave, fumando Ducados con los puños de la camisa siempre D desabrochados, moviendo las manos para marcar el ritmo de su entonación mientras llenaba la pizarra de datos con una caligrafía primorosa. Contaba que el primer día que dio una clase en la Universidad de Santiago en 1953 llegó al aula con más miedo que vergüenza, se encaró con los alumnos y se quedó sin habla, contemplándolos. Eso produjo el resultado de que los estudiantes, que murmuraban cuando entró en el aula, acabaran quedándose en un silencio sepulcral. Y así nació una táctica educativa que emplearía con éxito el resto de su vida. Porque su lema fue enseñar a aprender Para ello se fue a Stanford en el curso 197273 aprovechando que su asignatura pasaba de segundo a tercer curso y él quedaba libre un año. Y con el paso del tiempo razonó un consejo fundamental para quien quisiera dedicarse a la docencia: Hazlo si crees que al encontrarte frente a los alumnos de cada nuevo curso te sentirás feliz diciéndote a ti mismo ¡Qué bien! ¡otros! ¡A ver cómo consigo motivarlos y que enganchen! Pero dedícate a otra cosa si sospechas que pensarás en cambio ¡Cielo santo! ¡cómo miran! a ver si llego a junio sin grandes quebraderos de cabeza Entre 1979 y 1990 Paco Gómez Antón dirigió el Programa de Graduados Latinoaméricanos, la fabulosoa escuela de postgrado para periodistas en ejercicio por la que desde su fundación en 1972 pasaron unos cuatrocientos profesionales. Creó un método magnífico que concluyó con el final de la financiación que había proveído la fundación Aktion Adveniat y que después ha inspirado, lo niegue quien lo niegue, proyectos como el Programa Balboa y el Curso Iberis que ha llevado adelante el gran Aires Vaz. El profesor Gómez Antón fue un maestro de seres humanos. Para mí el más importante que tuve en mi vida y el que me marcó el camino por el que me inicié en esta profesión. El que llamaba para interesarse como iba la carrera profesional del becario o la del jovencísimo redactor jefe. Cuando se jubiló en 2000 empezó a fallarle la salud. Tenía tantos amigos que no quería ser una carga para nadie y se fue a México DF en 2002. Allí murió ayer. Cuánto duele escribir la necrología de tu maestro.

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