ABC CORDOBA 30-05-2015 página 20

18 CÓRDOBA SÁBADO, 30 DE MAYO DE 2015 cordoba. abc. es ABC Viernes de Feria Amalgama multicolor de la diversión La fiesta se hace noctámbula y continua, desde el bullicio de las familias que disfrutan en el interior de las casetas hasta la algarabía de los jóvenes al caer la tarde LUIS MIRANDA CÓRDOBA L a comprensión siempre llega después, porque uno primero siente y aprende las cosas y después, cuando tiene las herramientas a mano, las intelectualiza y las elabora, y eso no siempre. Hace falta trabajo entre medias. Todavía no había escuchado Fiesta de Serrat, o por lo menos no había pasado del momento en que el ritmo vertiginoso se mete como en los nervios y llama la atención aunque no se comprenda del todo, y sin embargo ya sentía algo parecido, que le afloró al pensamiento al entender toda la letra. No como un tiene razón sino como una especie de dejá vu como el ver plasmado lo que sentía. Sí, todo llega más tarde, en el momento en que uno comienza a despertar a una cierta consciencia del mundo, a comprender con una mirada inteligente. Sucede en todas las fiestas y también en la Feria de Córdoba, que aunque al cabo cada uno es cada cual, hay un momento en que todo se confunde, en que la noche termina por mezclar a los que nunca se han conocido, en que la inercia de la fiesta consigue mezclar a los distintos. Al viernes, la cita ya es un revoltillo. Muchas casetas han amortizado el cupo de los días en que pueden entregarse sólo a sus socios. Las comidas de empresas hace tiempo que se dieron y las propias firmas cerraron sus puertas a lo mejor a partir del jueves, porque la ciudad trasladó todas sus cosas hasta El Arenal. Los colegios también están con la cancela echada desde el miércoles y no cabe ni siquiera la fiesta con uniforme que algunos han gustado de hacer al terminar la 169 incidencias en una jornada La oficina conjunta de atención policial, que coordina a efectivos de la Policía Local y Policía Nacional en el recinto ferial de El Arenal, ha registrado durante la jornada del jueves de la Feria de Nuestra Señora de la Salud un total de 169 incidencias, de las cuales la mayor parte corresponden a 64 identificaciones y una detención por delito contra la salud pública. Según informa la Subdelegación del Gobierno, se han llevado a cabo ocho actuaciones de auxilio humanitario, dos intervenciones por intoxicación etílica y se ha intervenido en una decena de riñas. Se ha procedido también a la intervención de cuatro armas blancas y 22 sustancias estupefacientes. El resto de actuaciones corresponden a recuperaciones de efectos y a pérdida de objetos y documentación. Un grupo de niñas se asoman a una de las vetanas de una caseta de la Feria ma, la Feria afronta sus últimas horas con la fuerza de la inercia, que no tiene por qué ser mala. Así pasa que el traje de flamenca ya está metido en la piel y ya no pesa a la mujer que tiene que mover los volantes y vencer con la fuerza de las caderas y los muslos en el momento de cruzar bailando sevillanas. Ahora ya es tan natural como llevar una camisa liviana en primavera, como la falda que se adapta con naturalidad a los pasos. Los pendientes ya no pesan en las orejas y el giro de las muñecas con los complementos extrañaría si no estuviesen, si no escuchase el sonido del entrechocar del material. Los caballos, que se habían habituado al sol del campo y a la amplitud de los espacios verdes, ya se despiertan buscando el camino de asfalto que los tiene que conducir hasta El Arenal, el lugar en que pueden lucirse ante la mirada de miles de personas, el sitio en donde muchos los admiran. Los caballos, como grandes mamíferos, son animales inteligentes que captan lo que sucede a su alrededor, y aunque noten cuando los explotan, también saben sentirse admirados. Los hábitos El mismo cuerpo del que sabe disfrutar de la Feria ya se ha acostumbrado a los horarios: el no madrugar en exceso, el camino al recinto a primera hora de la tarde, los ratos en que hay buscar la sombra y la vida en la caseta, y luego el paseo de la tarde y la busca de emociones distintas si es el que las fuerzas dan para ello. Dará pena que se termine, y sólo queda una tarde, con todas sus visitas desde los sitios cercanos. A partir del viernes, la Feria es de aluvión y de mezcla, de mesas mezcladas y de vecinos que no tienen nada que ver unos con otros, de sevillanas que dan paso a rumbas y rumbas que se mezclan con canciones que son simplemente aflamencadas. Ahí están la familia que acude con traje de flamenca nuevo cada año y última clase, como para apurar los días en que será imposible que se vean. Ahora ya están terminadas todas las inercias, las casetas son privadas sólo en parte, el autobús el mismo para todo el mundo. El que pudo emigró hasta Fuengirola, el que no quiso se quedó y seguirá yendo hasta la Feria y ahora, quitados muchos de los filtros que estos días han condicionado a la fiesta, o la han hecho de una for-