ABC CORDOBA 16-05-2015 página 54

52 INTERNACIONAL El drama de la inmigración El sureste asiático SÁBADO, 16 DE MAYO DE 2015 abc. es internacional ABC Miles de rohingyas se juegan la vida al huir por mar de Birmania y Bangladesh Hasta 8.000 emigrantes esperan en barcos a ser aceptados en Malasia, Indonesia o Tailandia CARMEN CALVO SINGAPUR Al igual que sucede en las costas del sur del Mediterráneo, barcos cargados con centenares de personas, procedentes de Bangladesh y, principalmente, de la provincia de Rakhine en Birmania, los llamados rohingyas tratan de llegar a las orillas de Malasia, Indonesia o Tailandia, tras sufrir semanas de navegación en condiciones infrahumanas por el mar de Andamán. Los gobiernos indonesio y malasio se niegan a acoger a los inmigrantes e impiden a los barcos acercarse a las costas, lo que, según el Alto Comisariado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) conducirá a muchas muertes que se podrían evitar La organización no gubernamental Human Rights Watch (HRW) ha descrito la situación como un partido de ping pong humano en el que la marina indonesia envía los barcos a las costas de Malasia que, a su vez, los devuelve a las aguas territoriales indonesias. Según activistas de derechos humanos, podría haber más de 8.000 personas, muchas de ellas mujeres y niños, navegando en barcos a la deriva cerca de la isla de Kho Lipe, sin apenas espacio en cubierta, ni alimentos ni agua. Víctimas de traficantes, los rohingyas buscan una vía de escape por mar para huir de Birmania, una vez que las autoridades de Tailandia han tomado severas medidas para controlar el flujo de inmigrantes que se producía a través de sus fronteras terrestres. El hallazgo de varias fosas comunes con decenas de cadáveres de esta etnia en la selva tailandesa ha puesto al descubierto una macabra red de tráfico de personas. En ella estaban implicados oficiales y funcionarios del gobierno local que utilizaban su posición para explotar a los refugiados. En la mayoría de los casos, la muerte se habría producido a causa de enfermedades, malos tratos y hambre. Cerrada pues la salida terrestre a través de Tailandia, los traficantes han intensificado la vía marítima y, según Naciones Unidas, serían más de 25.000 personas las que habrían tratado de partir desde principios de año. El primer ministro de Malasia, Najib Razak se ha manifestado muy preocupado por los inmigrantes, aunque no ha dado ninguna indicación sobre si su gobierno aceptará la entrada de los barcos. Estamos en contacto con todas las partes implicadas, con las Un grupo de rohingyas acogido en un pabellón de deportes de la provincia indonesia de Aceh AFP BIRMANIA VIETNAM TAILANDIA Mar de Andamán Isla de Kho Lipe Dónde se concentran la mayoría de barcos Una minoría apátrida SILVIA NIETO MALASIA Singapur INDONESIA 500 km que compartimos el deseo de encontrar una salida a esta crisis ha explicado en un comunicado. Al parecer, se estudia la convocatoria de una cumbre el próximo 29 de mayo entre los distintos países afectados: Tailandia, Indonesia, Malasia y Birmania. Sin embargo, el gobierno birmano no muesta interés en acudir. Es bastante improbable que asistamos, no aceptamos que nos inviten solo para ayudarles a disminuir la presión a la que se están enfrentando explicó a la Los rohingyas son una de las minorías más perseguidas del mundo según las Naciones Unidas. También de las más desconocidas. Las pésimas condiciones de vida a las que se enfrentan en Birmania, el país del que procede la mayoría, se traduce en su emigración masiva hacia otras naciones del sureste asiático. El viacrucis de esta etnia comenzó con la independencia en 1948 de Birmania, que no les da la nacionalidad. Los ingleses, que habían colonizado la zona en 1825, trasladaron a los rohingyas de Bengala- -un territorio ahora dividido entre Bangladesh y la India- -al estado birmano de Arakan. A lo largo de los años ha habido varios estallidos de violencia y la ONU ha tenido que llevar a cabo varias campañas desde los años 70 para proteger a la minoría musulmana. agencia France Press el director de la oficina presidencial, Zaw Htay. Los rohingyas son originarios de la región de Chittagong en la actual Bangladesh y fueron llevados a Birmania para trabajar durante la época colonial inglesa. De religión musulmana, el gobierno birmano considera a esta comunidad, de aproximadamente un millón de personas, como extranjeros ilegales, a pesar de que han vivido en el país durante generaciones, por lo que son discriminados y no tienen derecho a educación, salud o vivienda. Mafias sin escrúpulos En 2012 sufrieron ataques de grupos extremistas budistas en la región de Rakhine que provocaron más de 140 muertos y decenas de miles de desplazados. Para Naciones Unidas se trata de uno de los pueblos más perseguidos del mundo y, a finales del pasado año, aprobó una resolución en la que urgía a Birmania a conceder la ciudadanía a esta minoría musulmana apátrida. Pero la falta de voluntad del gobierno birmano y la ausencia de escrúpulos de los traficantes de personas han provocado un nuevo drama humano en las costas del sureste asiático.