ABC CORDOBA 07-05-2015 página 34

34 ANDALUCÍA JUEVES, 7 DE MAYO DE 2015 abc. es andalucia ABC MÁLAGA Mijas reclama 28 millones a la empresa de la planta de residuos P. D. A MÁLAGA Las balsas de fosfoyesos, 1.200 hectáreas de residuos vertidos durante décadas por industrias del Polo Químico, deben ser descontaminadas por orden judicial. La UE vigila el proceso El contencioso que desde hace años mantienen el Ayuntamiento de Mijas y la empresa Fomento de Construcciones y Contratas (FCC) a cuenta del vertedero de Entrerríos parece abocado a resolverse en los tribunales. Los representantes legales del Consistorio mijeño interpusieron el martes una denuncia ante la Fiscalía al entender que la gestión realizada por la compañía en esta planta de residuos ha supuesto un quebranto de 28 millones de euros a las arcas municipales. Una cantidad que considera debe ser reembolsada y de cuya salida también se responsabiliza políticamente al Partido Socialista por haber propiciado una adjudicación fuera de los parámetros del mercado. Este conflicto se desató en el año 2011, poco después de que el actual alcalde, Ángel Nozal, del Partido Popular, llegara al poder y solicitase un informe en el que los técnicos empezaron a detectar ciertas irregularidades que llevó al regidor a decretar el cese de la actividad en la planta. Huelva debate qué hacer con el vertedero de su marisma M. ROSA FONT HUELVA ALMERÍA El TSJA mantiene la sentencia que vio legal la licencia del Algarrobico RAQUEL PÉREZ ALMERÍA vista de pájaro, las que parecen dos enormes piscinas situadas a los pies de una serie de montañas de un material blanquecino visualmente inocuo, conforman uno de los mayores problemas ambientales en suelo español, que Europa vigila de cerca. Se trata de un macrodepósito de desechos industriales, que ocupa 1.200 hectáreas a escasos 500 metros de la ciudad, resultado del proceso de producción de ácido fosfórico por parte de dos empresas de fertilizantes del Polo Químico de Huelva, Fertiberia y Foret (ya cerrada) Durante décadas, lo que era una zona de marismas (Rincón y Mendaña) y suelo de especial interés en el planeamiento, ha servido mediante concesión administrativa para verter un subproducto denominado yeseras, que ha evolucionado al casi impronunciable término de fosfoyesos. Desde la década de los 90 distintos estudios han alertado de la radiactividad y toxicidad de las balsas, donde también se depositaron cenizas con cesio 137 procedentes del accidente de Acerinox. Las voces que reclaman estudios epidemiológicos para determinar posibles efectos sobre la salud humana y el entorno no se han callado. Batalla diaria para los colectivos A ecologistas, que desde hace años exigen el fin de los vertidos y la retirada de los residuos. El procedimiento judicial que se arrastra desde hace más de una década marca los tiempos. En junio de 2007, la Audiencia Nacional dictaba un auto en el que decretaba que la concesión a Fertiberia había caducado y ordenaba el cese de los vertidos, ratificando la orden del Ministerio de Medio Ambiente (27 de noviembre de 2003) El fin de los vertidos se produjo en diciembre de 2010. En un año con sucesivas citas electorales, la restauración de las balsas de fosfoyesos entra en el programa de todos los partidos políticos, sin excepción, y aún con más fuerza que en elecciones anteriores por los últimos acontecimientos: la orden judicial de regeneración sin más demoras después de una década y el proyecto presentado por la empresa Fertiberia. Ubicación Las balsas de residuos están a escasos 500 metros de zonas habitadas Alternativas Unos sectores optan por el enterramiento y otros por confinarlos en plantas Archivado el expediente a España por infracción en la gestión de las balsas, Europa acaba de advertir hace solo un mes que intervendrá si no se cumple la sentencia de la Audiencia Nacional que obliga a restaurar la zona. El proyecto presentado por Fertiberia, con un plazo de ejecución de 10 años, prevé el drenaje de las balsas para después sellarlas con un revestimiento de polietileno de alta densidad (PEAD) cubrirlas con tierra vegetal y reforestarlas. En el caso de las zonas en la que la radiactividad es más elevada, la empresa plantea que estas áreas se mezclen con yeso más claro, y luego con el revestimiento de PEAD y la cobertura correspondiente. Las partes implicadas toman posiciones. El Ministerio de Medio Ambiente, a petición de la Audiencia Nacional, ha dado las bendiciones iniciales al proyecto de Fertiberia, que deberá presentar estudios adicionales. La organización WWF se opuso ayer a la propuesta de Fertiberia y abogó por la retirada de los residuos. La Mesa de la Ría, personada en el procedimiento, rechaza el enterramiento de los fosfoyesos y plantea su traslado para ser tratados en una planta de descontaminación. La parte menos contaminada recalaría en vertederos controlados mediante transportes alternativos al camión. Una vez limpios podrían ser reutilizados. El Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) con su última resolución vuelve a insuflar aire a la promotora Azata del Sol al rechazar la anulación de la sentencia que declaraba legal la licencia municipal de obras concedida para la construcción del hotel de El Algarrobico, en el municipio de Carboneras. Se trata de un fallo firme, por lo que no es preciso aguardar al pronunciamiento del Tribunal Supremo (TS) sobre la catalogación del suelo sobre el que se levanta el coloso de hormigón. Además de dar aliento a la constructora, el TSJA da un tirón de orejas tanto a la Junta de Andalucía como a la Abogacía del Estado, organismos promotores, junto a las organizaciones Ecologistas en Acción y Salvemos Mojácar, de la solicitud de anulación del permiso de obras. Según los magistrados, no se ha producido ninguna vulneración de derechos fundamentales. Vista panorámica de las balsas de fosfoyesos en una zona de marismas, con la ciudad de Huelva al fondo ABC