Archivo ABC
ArchivoHemeroteca
ABC CORDOBA 05-04-2015 página 15
ABC CORDOBA 05-04-2015 página 15
Ir a detalle de periódico

ABC CORDOBA 05-04-2015 página 15

  • EdiciónABC, CORDOBA
  • Página15
Más información

Descripción

ABC DOMINGO, 5 DE ABRIL DE 2015 abc. es opinion OPINIÓN 15 EL RECUADRO UNA RAYA EN EL AGUA ANTONIO BURGOS AL SAN JUANITO LE DIO UN AIRE Puedes decir que a Lorca lo fusilaron los fascistas, pero no que al San Juanito de Miguel Ángel lo machacaron los rojos UCHAS cofradías andaluzas con siglos de historia celebran ahora los 75 años de la bendición de su Cristo o de su Virgen. ¿Cómo hermandades tricentenarias dan culto a imágenes tan recientes? Muy sencillo: porque sufrieron en 1936 las llamas iconoclastas. No a manos de las milicias improvisadas para plantar cara valientemente a los militares alzados en armas contra el Gobierno, sino de las hordas que creían que quemando iglesias y asesinando curas y votantes de la CEDA defendían mejor al Frente Popular. Esto fue así, aunque haya tanta cobardía para recordarlo, como hago ahora contra la Dictadura de la Memoria Histórica. En España puedes decir que a Lorca y a Blas Infante los fusilaron los fascistas en 1936, pero no que al San Juanito de Miguel Ángel lo machacaron los rojos en Úbeda, como quemaron San Román o San Marcos en Sevilla. En muchos programas cofradieros estoy harto de leer que tal Cristo o Virgen, sustituidos luego por réplicas de Illanes o Castillo Lastrucci, se perdieron en los sucesos de 1936 Vamos, que hablan de una Virgen perdida en 1936 como el que se deja olvidado el paraguas en un taxi... Quisiera contar lo que ocurrió en Guadalcanal. Allí nació el dramaturgo y político Adelardo López de Ayala. El Ayala con calle en el barrio de Salamanca. Su villa natal le dedicó en 1926 un monumento, con su busto y una escultura de Talía, la musa del Teatro. Producida la sublevación, los frentepopulistas del pueblo, M tras cometer muchos asesinatos, quemaron a la Patrona, la Virgen de Guaditoca, y a toda la imaginería procesional: no dejaron Cristo vivo. Y creyendo que la Talía del monumento a Ayala era la Virgen María, la decapitaron, tras hacer rodar el busto de su paisano ilustre, desconocedores que fue el redactor de algo tan facha como el manifiesto de la Revolución de 1868. Y decapitada sigue Talía en la plaza de Guadalcanal... Corrió la Talía de Guadalcanal la misma suerte que el San Juanito de Úbeda: el San Juan Bautista Niño de la iglesia del Salvador, erigida por Francisco de los Cobos, la única escultura de Miguel Ángel en España y una de las dos que hay fuera de Italia, reconstruida por el Centro de Restauración de Florencia en una iniciativa ante la que siempre me quedaré corto en elogios a su impulsor, el duque de Segorbe, esforzado mantenedor y acrecentador del patrimonio histórico de la Casa de Medinaceli: no sé qué espera Cultura para darle la Medalla de Bellas Artes. Al San Juanito lo dejaron los rojos de Úbeda en 1936 hecho añicos, a conciencia, en el asalto a la iglesia del Salvador, convertida en garaje para el Cuerpo Tren del Ejército Popular. Garaje que conozco bien porque un sargento de la 40 Compañía Divisionaria de Automovilismo que se llamaba Antonio Burgos Carmona me contó cómo lo ocuparon cuando las tropas nacionales del coronel Saturnino González Badía, las que resistieron en la Cabeza de Puente de Serós, tomaron Úbeda el 29 de marzo de 1939, al día siguiente de la caída de Madrid. Pero por el pánico al uso por recordar la verdadera Historia, la gozosa restauración ha sido presentada poco menos como si al San Juanito le hubiera dado un aire o roto una criada torpona cuando estaba quitándole el polvo con un plumero: Se destruyó durante la guerra civil ¡Toma ya! Solo. Vamos, que se cayó al suelo y, ¡zas! se rompió: qué mala suerte. Como San Marcos de Sevilla, que ardió porque hubo un cortocircuito. El director del Museo del Prado ha dicho al presentar la recuperación: Esta escultura ilustra la barbarie de la que fue víctima la España de los años 30 No, mire: de los años 30, no, que en esos años se publicó lo mejor de la Generación del 27. De barbarie de los 30, nada. Diga usted la barbarie de los rojos de Úbeda, donde no hubo frente, sino odio y sangre: esa es la verdad histórica. Porque va a resultar que el San Juanito fue destruido por un bombardeo. Bombardeo de los nacionales, por supuesto. Guernica con Miguel Ángel, vamos. IGNACIO CAMACHO DEL CIELO A LA TIERRA El proceso andaluz de investidura sugiere la clase de problemas que se avecinan en un escenario político fraccionado L JM NIETO Fe de ratas OS detractores del bipartidismo se lo van a pasar en grande este año deconstruyendo mayorías en todas las administraciones del Estado: municipios, diputaciones, autonomías y, como traca final, el Congreso de la nación. Pero cuando termine la catarsis conviene que se apliquen a establecer acuerdos de cierta estabilidad para demostrar que es mejor dirigir un país entre varios. La diatriba antibipartidista está muy bien como recurso para aglutinar protestas contra el evidente colapso institucional de los últimos años; sin embargo esos votos críticos hay que convertirlos después en alternativas mejores que lo que había. La finalidad de las elecciones es la de erigir gobiernos representativos, no la de constituir frentes de rechazo. Andalucía, tantas veces tubo de ensayo de la política española, va a convertirse en la primera prueba de contraste de la fragmentación que parece caracterizar este nuevo ciclo electoral. Los ciudadanos andaluces se han pronunciado con bastante claridad y no entenderían que su voz no fuese escuchada. Susana Díaz ganó limpiamente en las urnas y tiene derecho a gobernar, pero dos semanas después su diáfana victoria nueve puntos sobre el segundo- -le crea más problemas que los que tenía antes de convocar los comicios. El escaso entusiasmo por facilitarle la investidura demuestra en primer lugar que la presidenta tal vez carezca de las dotes estratégicas que le atribuyen los panegiristas de su liderazgo; en segundo término, empero, sugiere la clase de dificultades que se avecinan en un panorama político fraccionado. Los nuevos partidos están presos de su propio discurso antirrégimen y con varias elecciones a la vista temen comprometer su inmaculada limpieza implicándose en alianzas de poder. Han denostado tanto la política tradicional que ahora no saben cómo comportarse en ella. Pero alguno se tendrá que retratar, y no demasiado tarde. En Andalucía tal vez puedan marear la perdiz hasta que pasen las municipales; a partir de ahí les tocará decantarse. La cantinela virginal no parece bastar para romper la hegemonía de las fuerzas tradicionales y los sedicentes regeneracionistas van a quedar obligados a ensuciarse sus blancas túnicas de tribunos. Podrán retorcer el sentido del veredicto popular o reforzarlo; lo que no van a poder, ahora que ya ha pasado la Semana Santa, es lavarse las manos como Pilatos. Y mientras más eleven el tono de la crítica más les costará justificar su presencia en los inevitables pactos. Al final, la fobia antipolítica no va a desembocar en otra cosa que en un reparto secuencial del poder, que ya está produciendo las primeras contradicciones en el seno de las fuerzas rupturistas más radicales, afectadas por la deflación de sus expectativas mesiánicas. Debe de ser duro prometer un asalto del cielo y quedarse en el triste y terrenal purgatorio de la negociación en el mercado negro.

Te puede interesar

Copyright (c) DIARIO ABC S.L, Madrid, 2009. Queda prohibida la reproducción, distribución, puesta a disposición, comunicación pública y utilización, total o parcial, de los contenidos de esta web, en cualquier forma o modalidad, sin previa, expresa y escrita autorización, incluyendo, en particular, su mera reproducción y/o puesta a disposición como resúmenes, reseñas o revistas de prensa con fines comerciales o directa o indirectamente lucrativos, a la que se manifiesta oposición expresa, a salvo del uso de los productos que se contrate de acuerdo con las condiciones existentes.