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ABC CORDOBA 12-11-2012 página 22
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ABC CORDOBA 12-11-2012 página 22

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22 CÓRDOBA LUNES, 12 DE NOVIEMBRE DE 2012 cordoba. abc. es ABC El Guadalquivir y sus inundaciones POR JOSÉ MIGUEL PESSINI TÉVAR N uevamente los cordobeses, sobre todo los que habitan en casas ubicadas en las riberas del río, están alarmados por la crecida de sus aguas y la posible inundación de sus viviendas. En 1998 hice un informe dirigido a la concejalía correspondiente advirtiendo del grave peligro que corrían las viviendas que empezaban a construirse en la Urbanización Guadalvalle. Como es habitual, el informe fue silenciado, las casas se siguieron construyendo y por supuesto cuando llegaron las crecidas se inundaron, con gran algarabía de quién no las debía haber construido nunca en la llanura de inundación y de quién con desprecio de su obligación de in vigilando lo permitió. El Guadalquivir es un río muy vivo que puede variar su caudal en poco más de 24 horas, por la aportación de lluvias, arroyos, escorrentías y desembalses de su curso. A partir de Alcolea provoca inundaciones porque sus riberas han sido ocupadas de forma desordenada por casas, urbanizaciones y otras construcciones, y cuando el aforo supera los 1.800 m 3 s comienza a ocupar lo que es su cauce natural. Recordemos que en las últimas inundaciones el caudal estuvo entre los 2.200 y 2.500 m 3 s. En las inundaciones habidas en 1963, en las que se anegó parte de el Campo de la Verdad y derrumbó el muro de contención de Miraflores construido hacía pocos años, el aforo fue de 3.500 m 3 s. Desde el año 1992 inspeccionábamos el estado de los arroyos de nuestro término municipal, haciendo un informe pormenorizado de cada uno de ellos indicando su estado y si era necesario la limpieza o acondicionamiento de su cauce, para que cuando VALERIO MERINO llegaran las lluvias de otoño no se desbordaran e inundaran las parcelaciones aledañas a su cauce. En 1996 se realizó otro informe del arroyo San Cristóbal que un desaprensivo comenzó a rellenar con escombros con la pretensión de parcelar y vender la superficie resultante. Afortunadamente, se actuó con rapidez y se paralizó el vertido. No obstante, el encauzamiento y embovedado del arroyo provoca habituales inundaciones en la zona de su influencia. No es mi intención hacer un detalle pormenorizado de todas las actuaciones e informes realizados por Protección Civil municipal. Lo que se ha intentado durante muchísimos años es que estas situaciones se corrigieran, pero desgraciadamente intereses creados, desinterés y total falta de rigor urbanístico hacen recurrente un problema que actualmente no tiene ninguna solución ni a medio ni a largo plazo. Es increíble que las administraciones que tienen competencias en los cauces públicos hayan desistido de su responsabilidad en la vigilancia e impedido que esta situación se haya producido durante años con las consecuencias que ahora todos padecemos, porque todos somos damnificados al tener que pagar con nuestros impuestos los desorbitados gastos que se producen cada vez que los servicios municipales y de otras administraciones (Protección Civil, Bomberos, Policía Local, operarios, maquinarias diversas y de obras públicas) tienen que intervenir para socorrer a los damnificados y restaurar las infraestructuras afectadas. JOSÉ MIGUEL PESSINI TÉVAR es exjefe Agrupación Municipal de Protección Civil del Ayuntamiento de Córdoba

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