ABC CORDOBA 08-10-2012 página 14

14 OPINIÓN POSTALES LUNES, 8 DE OCTUBRE DE 2012 abc. es opinion ABC BREVERÍAS En Roma ¿Quién dijo que los alcaldes no ven más allá de su término municipal? No es el caso de Federico Cabello de Alba, regidor municipal de Montilla, que ayer no faltó en Roma a la proclamación como Doctor de la Iglesia de San Juan de Ávila, cuyos restos reposan en la ciudad. El alcalde tuvo además, junto a su equipo de gobierno, una recepción en la Embajada de España ante la Santa Sede, y escuchó como se nombraba a su ciudad en la plaza de San Pedro. Justicia para uno de los vecinos más ilustres de Montilla. JOSÉ MARÍA CARRASCAL Silbón va a más La marca de ropa Silbón, creada en 2010 por los empresarios cordobeses Rafael Díaz y Pablo López, sigue a buen paso a fuerza de talento y de trabajo sin descanso. Así, la compañía cerró el primer semestre del año con un crecimiento del 25 por ciento en sus cuentas respecto a 2011, con unos 250.000 euros, y espera que con la apertura de la nueva tienda de Madrid, que se produjo el pasado septiembre, el incremento al final de año alcance el 40 por ciento, un dato muy positivo Para que luego digan que la moda retro no viste. Plazas vacantes El vicerrector de Estudiantes, Manuel Torres, ha reconocido que es un hecho insólito que no se hayan cubierto las plazas del Colegio Mayor La Asunción. Es el primer año que esta residencia universitaria no cuelga el cartel de completo y es una causa directa de la crisis. En una reflexión, el vicerrector asegura que las familias no tienen suficientes recursos para enviar a sus hijos a estudiar fuera de sus ciudades natales. Y es que el coste de una de estas plazas que ronda los 670 euros es demasiado cara para un universitario ANTES DEL PARTIDO Convertir el partido BarcelonaMadrid en un choque CataluñaEspaña no es exageración, sino demencia, que sólo aprovecha a los enemigos de ambas P OCAS cosas ilustran mejor el grado de insensatez a que hemos llegado que presentar el partido Barcelona- Madrid- -un banquete de buen fútbol que me dispongo a disfrutar- -como un choque CataluñaEspaña. ¡Con ambos equipos cuajados de jugadores extranjeros, incluidos sus máximas estrellas! A tal extremo llega nuestra idiotez, enajenación o vesania. Que pregunten, no ya a Messi y a Ronaldo, sino a Casillas y a Piqué, y verán lo que les contestan. Éste último ya contestó ayer en ABC: Es sólo un partido de fútbol Es decir, simple deporte. En el fondo, un juego. Que lo hayan convertido en epítome del contencioso Cataluña- España no es ya exageración, sino demencia, que sólo aprovecha a los enemigos de ambas. Cataluña y España son bastante más que veintidós muchachos en calzoncillos y camiseta corriendo detrás de un balón como describió el fútbol alguien cuyo nombre he olvidado. El hecho, de todas formas, tiene su importancia. Revela que los españoles, catalanes incluidos, no sé si por tendencia genética o por la mala leche que producen los apuros que estamos pasando, convertimos en rivalidad cuanto está a nuestro alcance. Un derivado del famoso por fastidiar que respondió aquel individuo al que preguntaban por qué hacía algo que no beneficiaba ni siquiera a él. Por fastidiar nos hemos convertido en enemigos de todos los demás, lo que a la postre significa convertirnos en enemigos de nosotros mismos, porque en una sociedad civilizada no se va a ninguna parte solo, más, en nuestros días, en que todo tiende a unirse. Nuestra clase dirigente, y no me refiero a los políticos, sino a los empresarios, a los jueces, a los intelectuales, a los obispos, a los periodistas, a los docentes, a todos aquellos que en mayor o menor grado influimos en el clima general que reina en el país, en vez de limitarnos a señalar diferencias y a montarnos en la ola de descontento que nos inunda para obtener más votos, vender algún producto, alcanzar popularidad o, simplemente, dar rienda suelta a nuestros peores instintos, cuando deberíamos advertir de los peligros a que nos conduce tal camino, y escuchar lo que, según las encuestas, es el último deseo de la ciudadanía de a pie: que los dos grandes partidos se unan para sacarnos del pozo en que nos hallamos, pues está visto que uno solo, por mucha mayoría que tenga, no puede. Y si nos quedamos en el pozo, perderemos el tren que lleva al mundo del futuro, donde los que no logren incorporarse se irán por la cañería de la historia. Tan simple y tan triste como eso. Dicho lo cual, me dispongo a disfrutar del Barça- Madrid, un festín de fútbol, sólo fútbol y nada más que fútbol. A fin de cuentas, el fútbol no es sólo el deporte de nuestro tiempo, sino también lo único serio que está quedando en nuestro país. No lo estropeemos. CARTAS AL DIRECTOR La familia está en coma, necesita reanimación La preocupante situación económica por la estamos atravesando incita reflexiones de muy amplio calado. En numerosos medios de comunicación nos mostraban unos titulares muy poco halagüeños: El ahorro familiar cae al nivel de 2006 La familia está viviendo situaciones críticas en su economía; el recibo de la luz, el precio de los carburantes, el inicio del curso escolar... y todo ello soportado por unos ingresos que disminuyen y, lo peor de todo, por unas perspectivas que auguran un calamitoso final. Los presupuestos del Estado para el próximo año dejan en la cuneta la ayuda a la familia. Me gustaría reconsiderar públicamente y plantear un análisis a fondo en una cuestión, que desde hace tiempo se viene ninguneando, y que sin su logro y mantenimiento todo el sistema creado hasta hoy carece de utilidad y estaría abocado al fracaso, me refiero a los niños. Los niños que hoy nacen, los que están incorporándose con coletazos de introducción al mundo, los que cursan estudios superiores y universitarios, todos ellos serán el futuro en todos los aspectos. Si no nacen niños que aumenten nuestra población sobran futuribles coches híbridos, sobra el dinero destinado al cambio climático... sobra casi todo. Podría La ingrata y cruel vanidad del dinero Los españoles, en estos tiempos que corren, estamos soportando una de las mayores crisis económica- financiera jamás conocida desde aquellos años del hambre en la postguerra. Para el año 2013, el gobierno del PP ha presentado unos Presupuestos Generales austeros, complicados y difíciles para intentar salir de la crisis reduciendo el déficit. He ahí el dilema: Hay déficit, y si hay déficit es porque se gastó más de la cuenta, y el déficit que tenemos no es de hace un año, es un déficit heredado que todo el mundo debería reconocer y aceptar. Hay déficit por doquier, y, para recochineo, la banca necesita recapitalizarse en 59.300 millones de euros. Puede ser, y eso lo creo que, en lo de la ayuda a la banca, el Gobierno habrá pensado en aquella frase de Lucio Anneo Séneca que decía: El que puede socorrer al que va a perecer y no lo socorre, lo mata En este país, como siempre, cuando la derecha está en el poder, la izquierda insoportable, y, junto a los sindicatos de clase y junto a los llamados indignados hacen una oposición destructiva, creando malestar, desasosiego, inseguridad y mala imagen. Y, en lugar de ayudar a solucionar su mala gestión, actúan como auténticos semilleros de la discordia, lanzando, por doquier, la cizaña. A ellos, si aún no han perdido su memoria reciente, les convendría que aplicasen lo que dijo en su día José Martí: Ni con lisonjas, ni con la mentira, ni con el alboroto, se ayuda verdaderamente a una obra justa Ante todo este desbarajuste, el pueblo es quien se está llevando la peor parte, unos más que otros. Y, si al pueblo no se le dice la verdad, ¡y no hay más verdad que la que hay! el pueblo irá de mal en peor, y uno de los males más terribles es la anarquía. Los políticos, por lo general, copiando a los banqueros, se han hecho adictos al dinero, esa ingrata y cruel vanidad. A ellos habría que recordarle lo que, en su día, dijo Félix María Samaniego: Conviene al poderoso para los infelices ser piadoso; tal vez se puede ver necesitado del auxilio de aquel más desdichado Por cierto, en los Presupuestos Generales del Estado no se recortan el número de políticos, sus sueldos, las empresas públicas y los asesores de políticos. Y las encuestas vaticinan un aumento considerable en la abstención. Dinero para unos y pobreza para otros. Vanidad de vanidades. MANUEL LEÓN VEGA CÓRDOBA enumerar una dilatada lista de finalidades, pero existe una única realidad: si no hay niños, sobra todo lo demás. La crisis finalizará con una inversión en los valores, con una vuelta total y absoluta hacía los principios básicos que nos he-