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ABC CORDOBA 03-10-2012 página 48
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46 INTERNACIONAL Las claves del primer debate El primero, el más importante El primero de los tres debates que enfrentará a los candidatos a la presidencia de Estados Unidos es sobre política nacional y se centrará especialmente en la economía. Tendrá seis partes, de un cuarto de hora de duración cada una. MIÉRCOLES, 3 DE OCTUBRE DE 2012 abc. es internacional ABC Un moderador con experiencia El moderador será Jim Lehrer, presentador del programa News Hour de la televisión pública PBS. Ha hecho ese papel ya en once debates previos. Periodistas de CBS, CNN y ABC moderarán los otros dos cara a cara posteriores. La sede, Colorado, un Estado swing Tiene lugar en la Universidad de Denver, en Colorado, Estado que tradicionalmente votaba republicano pero que en 2008 arrebató Obama. Es un Estado swing es decir, de los que puede variar su voto y que ninguno de los dos tiene seguro. La oratoria de Obama frente al empuje de Romney La economía centra el primero de los tres debates entre los candidatos a la presidencia de EE. UU. que se celebra esta noche en Denver rack Obama y el candidato republicano Mitt Romney. Colorado es uno de los ocho o nueve estados que realmente ambos candidatos se disputan en las elecciones del 6 de noviembre (es un estado swing Pero Denver, donde los hispanos son el 32 por ciento de la población, está más bien del lado del presidente. Y en la calle se nota, aunque ello no tendrá traslación en la composición del público que presenciará en persona el debate. Un debate, que se centrará en asuntos nacionales (los internacionales se dejan para el último) también se considera terreno abonado para Obama debido a su fácil oratoria. El 58 por ciento de los estadounidenses cree que el presidente será el ganador, mientras que solo el 28 piensa que vencerá Romney, según un sondeo de Quinnipiac University. El equipo de campaña de Obama está haciendo serios esfuerzos para pinchar ese globo, porque no desea partir de tan alta expectativa. El encuentro se desarrollará en seis segmentos. Los tres primeros están dedicados a la economía y los siguientes a sanidad, peso del Gobierno central y otros asuntos de la agenda gubernamental. Cada parte, de un cuarto de hora, comenzará con una pregunta del moderador, tras la que cada candidato tendrá dos minutos para responder antes de dar paso a interpelaciones entre ellos. El público no podrá expresar sus sentimientos aplaudiendo alguna de las intervenciones de los candidatos. Janet Brown, directora ejecutiva del Comité para los Debates Presidenciales, entidad al margen de los partidos que se encarga de organizar estos encuentros en las elecciones estadounidenses, negó tal posibilidad. En ediciones anteriores no había ese impedimento, pero la experiencia de las primarias republicanas, donde se hicieron más debates que en ciclos electorales previos, los aplausos fueron percibidos en varias ocasiones como entorpecedores de una relación más directa entre el candidato y la audiencia televisiva. EMILI J. BLASCO CORRESPONSAL EN WASHINGTON enver es un terreno abonado para Barack Obama. ¡Viene el presidente! dicen excitados varios empleados del tren que comunica el centro de la ciudad con la Universidad de Denver, donde esta noche (madrugada en España) tiene lugar el primero de los tres debates televisados entre el presidente Ba- D Moderador con experiencia El moderador será Jim Lehrer, un veterano periodista de la cadena pública PBS, que ya ha ejercido esa función en otros once debates presidenciales. Periodistas de la CBS, CNN y ABC moderarán los otros dos pulsos presidenciales y el debate entre los candidatos a vicepresidente. Lehrer ha rechazado su consideración de opción segura es alguien inquisitivo pero que no genera sorpresas y no considera excesivo el número de debates que ya Barack Obama El poder de la televisión ANÁLISIS DANIEL UREÑA Analista político esde el nacimiento de la televisión, la política cambió para siempre. Los gobernantes y los partidos viven pendientes de los medios, especialmente de la televisión, ya que sigue siendo D la herramienta con mayor capacidad de influir en la opinión pública. La televisión tiene el poder de construir y destruir percepciones. Por ello, los debates suelen ser los principales hitos en una campaña. Los candidatos se la juegan. Sin asesores, sin jefes de prensa y sin consejeros, están solos ante las cámaras. Millones de espectadores (y potenciales votantes) les observan, les examinan y les evalúan. Esta noche Obama tiene por delante el reto de convencer a los estadounidenses de que el país camina en la dirección correcta y que por eso necesita cuatro años más. Romney tiene el doble objetivo de recordar las promesas incumplidas por Obama y que los espectadores se hagan la pregunta de si están mejor que hace cuatro años. Para conseguirlo ambos líderes tendrán que adaptar su discurso y su lenguaje al medio. Los políticos americanos suelen ser bastante más aventajados que los europeos a la hora de comprender que los códigos de la televisión no son los mismos que los del Congreso o el Senado. La televisión se basa en la emoción y en el entretenimiento. Por ello, es de esperar que tanto Obama como Romney expliquen sus propuestas tratando de conectar con la audiencia a través de historias y anécdotas. Además, tratarán de ofrecer buenos titulares con gancho que gusten a los reporteros, ya que saben que el veredicto de quién ha ganado lo darán las portadas de los periódicos y los informativos del día siguiente.

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