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ABC CORDOBA 03-05-2012 página 50
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ABC CORDOBA 03-05-2012 página 50

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50 INTERNACIONAL JUEVES, 3 DE MAYO DE 2012 abc. es internacional ABC HORIZONTE RAMÓN PÉREZ- MAURA EL OCASO DEL GAULLISMO R esulta fascinante ver cómo el ocaso de la derecha construida por el general De Gaulle va a llegar de la mano de la ultra derecha gala. Ya hemos conocido en esta campaña cosas inverosímiles como el anuncio de Jacques Chirac de que vota al candidato socialista. Eso dicho por el fundador del Reagrupamiento por la República, el hombre que el día que llegó al Elíseo se levantó horas antes del amanecer y voló a Colombeyles- Deux- Eglises a postrarse y orar ante la tumba del general, es una muestra indudable de la descomposición de la derecha francesa. Pero su verdadera debilidad se deriva del auge de la ultra derecha que surgió alentada por François Mitterrand desde la Presidencia y que ahora, en justa reciprocidad, en una comunidad de intereses poco disimulada, va a dar el poder al gris candidato socialista, François Hollande. Es verdaderamente irónico que Marine Le Pen diga que da libertad de voto a sus seguidores. Libre es todo el que va a votar. Lo que ha hecho es garantizar a Hollande que ni uno solo de los votantes de Le Pen de la primera vuelta que ahora piensan sufragar por el socialista se sienta ante una dicotomía. La que se hubiera producido si quisieran votar socialista y ella les hubiera reclamado el voto para la derecha. Al no reivindicar ella el voto a Sarkozy está garantizando el triunfo de la izquierda con la voluntad de enterrar el legado gaullista y la asunción de una nueva alternativa heredera de la ultra derecha de su padre. Será, sin duda, una victoria legítima de la izquierda, pero será también, desde la tumba, un triunfo de Mitterrand, que con el discurso de Marine Le Pen del 1 de mayo de 2012 se ha impuesto sobre el legado del fundador de la V República. De la mano de Jacques Chirac. Tiene delito. Barack Obama saluda a las tropas estadounidenses en la base aérea de Bagram, este miércoles en Kabul REUTERS Obama utiliza la muerte de Bin Laden con fines electoralistas BLos republicanos critican su exhibición como comandante en jefe desde Afganistán EMILI J. BLASCO CORRESPONSAL EN WASHINGTON Últimas palabras de Bin Laden Alertado por el ruido de los dos helicópteros de los Navy Seals y el tiroteo que se produjo, Osama bin Laden y su cuarta esposa se dirigieron a la puerta de la habitación de la tercera planta. Era la madrugada del 2 de mayo de 2011 y se hallaban en su escondite de Abbottabad, una tranquila ciudad paquistaní. No enciendas la luz le dijo el líder de Al Qaida a Amal. Los soldados estadounidenses dispararon en la pierna de la mujer cuando ésta se interpuso y luego mataron a Bin Laden cuando se internaba en la habitación, al parecer en busca de un arma. Sus últimas palabras se revelan ahora en el libro Manhunt del experto en terrorismo Peter Bergen. Se suponía que la campaña de las presidenciales estadounidenses iba a estar centrada en la economía. De momento, debido a la debilidad de la recuperación económica, Barack Obama ha logrado llevar la atención hacia la seguridad, el aspecto más valorado, con diferencia, de su presidencia. El aniversario de la muerte de Bin Laden y la firma del acuerdo marco con Afganistán para después de la retirada de las tropas, han permitido a Obama exhibirse como comandante en jefe. Y lo ha hecho con claras maneras electoralistas, según le critican los republicanos. El tiempo de guerra comenzó en Afganistán, y ahí es donde terminará proclamó Obama el miércoles de madrugada desde Kabul. Fue una visita sorpresa cuya orquestación- -horarios pensados para la hora de máxima audiencia de las televisiones estadounidenses, mensaje emitido a la nación a 22.000 kilómetros de distancia- -difícilmente puede no verse como parte de la campaña de reelección de Obama. Aunque aún quedan dos años para que se dé por terminada oficialmente la misión de guerra en Afganis- tán, Obama vino a hacer una predeclaración de final de la contienda. La escenificación irritó al equipo de Mitt Romney, ya volcado en la campaña de las presidenciales, después de la retirada de las primarias de Rick Santorum y Newt Gingrich, quien ayer confirmó públicamente su abandono. Pero como lo prescriptivo en la política estadounidense es evitar las críticas al presidente cuando se encuentra en el exterior, Romney optó por felicitarse de que Obama fuera a ver a las tropas. Me complace que el presidente haya vuelto a Afganistán. Nuestras tropas y el pueblo americano merecer oír del presidente lo que tiene que decir sobre lo que está en juego en esta guerra indicó. Otros dirigentes aplaudieron el viaje y el acuerdo firmado con el presidente de Afganistán, Hamid Karzai, pero criticaron que Obama se hubiera dirigido a la nación desde allí, de modo innecesario y con una única justificación electoral. Pero lo que más ha enervado a los republicanos es el vídeo lanzado a final de la semana pasada por los demócratas, en el que Bill Clinton narra el protagonismo de Obama en el ataque y muerte de Bin Laden, hace justo un año. Las imágenes y la narración glorifican el heroísmo del presidente en su decisión de dar la luz verde final a la operación. Y ese liderazgo se contrapone a la personalidad de Romney, de quien se menciona una cita de 2007 en la que decía que no valía la pena remover cielo y tierra gastando miles de millones de dólares para intentar cazar a una persona La decisión de atacar la habría dado hasta Jimmy Carter han contraatacado los asesores de Romney, mencionando al presidente demócrata con fama de blando y que ordenó un fallido rescate de reheres en Teherán.

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