Archivo ABC
ArchivoHemeroteca
ABC CORDOBA 20-01-2012 página 53
ABC CORDOBA 20-01-2012 página 53
Ir a detalle de periódico

ABC CORDOBA 20-01-2012 página 53

  • EdiciónABC, CORDOBA
  • Página53
Más información

Descripción

ABC VIERNES, 20 DE ENERO DE 2012 abc. es ABC delOCIO 53 Cuando el cine es noble, generoso y eterno Dirección: Alexander Payne. Intérpretes: George Clooney, Judy Greer, Beau Bridges. País: EE. UU. 2011. Duración: 115 min. OTI RODRÍGUEZ MARCHANTE LOS DESCENDIENTES L que es estrictamente necesario, y me limito a llenar el espacio que necesito en la película. Por ejemplo, en Los idus de Marzo necesitaba un candidato presidencial y sabía lo que tenía que hacer. ¿Y cuando le toca ser dirigido por otro? Aquí he tenido la suerte de que Alexander Payne es mejor cineasta que yo, lo cual genera un sentimiento extraño y ambiguo, me sentía cómodo pero incómodo a la vez. Además, en Hawái es complicado actuar. Parece que tiene en el bolsillo el secreto del éxito de una película, ¿no? Es de lo más sencillo: si das con un mal guión, olvídate del tema. Es imposible que salga una buena película de ahí, digan lo que digan. Después, la cosa suele discurrir sola: rodearse de buenos actores, de un buen equipo técnico y ponerse en manos de un director que diga: Un poco más de esto, menos de lo otro, trata de hacer eso, descuida un poco aquello... Honestamente, me gustaría llevarme el crédito siempre, pero en realidad la importancia de una película pasa por el guión y el director en la mayoría de las circunstancias, y por ese orden. ¿Cuáles son las grandes diferencias entre George Clooney actor y George Clooney director? ¿Sabes qué? Somos casi la misma persona (risas) El actor George Clooney tiene básicamente la misma altu- Aparte de este trabajo memorable, Clooney estrenará en breve su nuevo filme como director (y también actor) Los idus de Marzo ra y el mismo peinado, es muy parecido al George Clooney director. La suerte pasa por rodearse de un grupo de excelentes intérpretes que le dan nivel al proyecto. Ese es mi secreto al dirigir: trabajar con gente muy buena. ¿No te parece una buena respuesta política? Pero si tuviera que elegir, ¿prefiere la actuación o la dirección? En los últimos diez años, prefiero dirigir. Pero la dirección lleva demasiado tiempo hasta que se estrena una película. Mi trabajo real, con el que me gano la vida, es la actuación, y la dirección es lo que realmente me gusta hacer, mi pasión. En medio, tengo la suficiente suerte de encontrar gente como Soderbergh o los Coen, buenos directores. Por eso, si sigue la racha, es lo que quiero seguir haciendo. Con Buenas noches y buena suerte su segunda película como director, confesó que pretendía cambiar algunas ideas de la sociedad y hacer pensar al público. ¿Sigue manteniendo esa ambición? Tenemos que acordarnos que el cine no marca ningún camino en la sociedad. La gente piensa que tratamos de influenciarlos al instante cuando se precisan por lo menos dos años para estrenar una película. A lo sumo nosotros solo podemos trasladar los estados de ánimo y los pensamientos de nuestro país al resto del mundo. En este caso, la película refle- a tierra propia y la carne propia, pero ambas con mayúscula, es lo que descubre Matt King (un George Clooney tan ligero como su camisa hawaiana y más profundo que nunca) cuando la vida le pone delante dos puntos: su mujer en coma irreversible, sus dos hijas en signos de interrogación y todas sus raíces entre paréntesis y a punto de ser segadas. Signos de puntuación que el admirable cineasta Alexander Payne, aquel de Entre copas esparce en una historia que ocurre en el interior de un Hawái sin tópicos y de una cabeza, la suya, obligada por las circunstancias a deshacer clichés... La voz en off del personaje es el motor de arranque y alma de la narración, el termómetro moral que cuenta con discreto desgarro y reconfortante sentido del humor (como aquel de Nicholson en otra de sus anteriores películas) el topetazo con la verdad de la vida cuando se da la vuelta. Payne consigue que el paisaje paradisíaco, el clima cálido, la mú- sica melosa y soleada se adecúe a la fachada de sus personajes, pero que, al tiempo, remarque el bullicio sentimental y el amargor en su interior y que todo ello forme un grumo lleno de inteligencia, emoción y un sentido redondo y hermoso que une el pasado con el futuro y que hermana los contrastes, especialmente sutiles en el carácter y modo de todos los personajes, expuestos con su punto de vileza y de bondad: el suegro, áspero y mezquino con él, acaricia con ternura el rostro inerte de su hija; el joven estúpido con destellos de lucidez adulta; sus propias hijas o él mismo, ávido de conocer el turbio pasado de su esposa... y los hilos invisibles pero fortísimos que unen la repentina certidumbre de que hay que conservar bajo los pies y en la cabeza la integridad de la tierra y de los seres queridos. Y lo que hace de Los descendientes una película especial, de esas que salen contadas al año, es su aparente espontaneidad, su mirada al mundo como desde nuestros propios ojos, conservando en su frescor cinematográfico una complejidad y una comprensiva intuición que se exhala de un modo natural, como con espray, por el patio de butacas, sin necesidad de tener que extraerlas como el carbón de una mina. En los últimos diez años prefiero dirigir, aunque el trabajo con el que me gano la vida es el de actor ja el cinismo que venimos sufriendo últimamente. No está mal mirarnos en un espejo, mostrando cómo somos o cómo vemos a la gente que nos gobierna. Pero no es la idea del filme. ¿Cuál es entonces el motivo que le mueve a hacer cine? Honestamente, la idea y la esperanza de que no exista una sola persona en el público que no se haya enfrentado a cuestiones morales, incluso las más cotidianas y banales. Todos elegimos ciertas opciones éticas para mejorar día a día, aunque lastimen a alguien en el camino. Esa idea, para mí, es universal y puede literalmente transmitirse desde Wall Street a cualquier rincón del mundo. Y con eso en la cabeza me pongo a rodar. ¿Quién fue la persona que más le influyó en su carrera? Mi padre, probablemente. Presentaba un programa de noticias, y ha sido la influencia más grande que he tenido en la vida, en todos los sentidos. ¿Y usted? ¿Se considera un ejemplo tanto fuera como dentro de una pantalla? Si lo creyera, sería la peor idea que habría tenido nunca (risas)

Te puede interesar

Copyright (c) DIARIO ABC S.L, Madrid, 2009. Queda prohibida la reproducción, distribución, puesta a disposición, comunicación pública y utilización, total o parcial, de los contenidos de esta web, en cualquier forma o modalidad, sin previa, expresa y escrita autorización, incluyendo, en particular, su mera reproducción y/o puesta a disposición como resúmenes, reseñas o revistas de prensa con fines comerciales o directa o indirectamente lucrativos, a la que se manifiesta oposición expresa, a salvo del uso de los productos que se contrate de acuerdo con las condiciones existentes.